La Celestina
Publicada en Burgos en 1499, consta de 21 actos y fue escrita por Fernando de Rojas.
Género literario
Unos, basándose en las dificultades que plantea su puesta en escena, niegan su carácter dramático y la consideran una novela dialogada. Otros, la sitúan dentro del subgénero dramático de la comedia humanística. Pero pocos discuten que es esencialmente dramática; lo fundamental es el diálogo.
La acción
La acción se estructura en un prólogo y dos partes: la primera hasta el acto XIV y la segunda, desde el acto XV hasta el XXI.
Prólogo
Calisto entra por casualidad en el huerto de Melibea, de la que se enamora. Le declara su amor, pero la muchacha lo rechaza al percatarse de que sus intenciones son deshonestas.
Primera parte
Calisto acude a Celestina. Esta, movida por la codicia, se dispone a actuar. Cuenta con la colaboración de Sempronio. Pero se encuentra con una serie de obstáculos: la resistencia de Pármeno y la actitud esquiva de Melibea. Pármeno se muestra fiel al principio a Calisto, pero Celestina lo tienta con la codicia y la lujuria.
Melibea, atraída por Calisto desde el primer momento, disimula su pasión. El deseo amoroso pugna con el temor a transgredir unas normas sociales que tiene desde niña. La hechicera, con ayuda de la magia, consigue convencer a Melibea.
Celestina muere por la codicia, por no querer repartir la recompensa con Pármeno y Sempronio.
Segunda parte
Elicia y Areúsa traman venganza contra Melibea, a la que creen culpable de su situación. Calisto muere al bajar por una escalera. Melibea, tras conocer la noticia, se suicida.
Los personajes
Los personajes no son arquetipos sino criaturas singulares.
Calisto
Dominado por la pasión amorosa, se muestra melancólico unas veces y exaltado, otras. Es inseguro, egoísta y amoral, pues no duda en transgredir cuantas normas morales y sociales se opongan a la satisfacción de sus apetitos.
Melibea
Profundamente humana, al principio rechaza con violencia las insinuaciones del joven galán, luego duda, vacila y, finalmente, se entrega a él sin reparos.
Celestina
Es el prototipo de alcahueta. Dominada por la codicia, persigue un único objetivo: obtener riquezas. Moviliza todas sus habilidades como la astucia, la seducción y el engaño.
Sempronio y Pármeno
Representan a una servidumbre vinculada a su señor por relaciones económicas y no afectivas. Movido por el interés y la lujuria, Sempronio es falso, desleal y violento. Pármeno, el otro criado, experimenta una evolución: inicialmente se muestra leal a su señor y más tarde mantiene una lucha interior claudicante.
Elicia y Areúsa
Manifiestan sus envidias y resentimiento hacia la clase dominante.
Alisa y Pleberio
Alisa es una gran señora, orgullosa y altiva, pero insensata. Pleberio representa al padre solícito, tierno y cariñoso con su hija (padres de Melibea).
Centurión
Es el único personaje cómico de la obra. Es un soldado fanfarrón y cobarde que quiere vengarse de Melibea.
Los temas
- El amor: se muestra como una pasión incontrolable que desestabiliza el ánimo de los individuos, los destruye y los aniquila. El amor engendra el caos, la perdición y la muerte.
- La codicia: otra pasión que enloquece a los criados y a Celestina hasta provocarles la muerte.
- La fortuna: es un azar ciego y arbitrario, responsable de las tragedias humanas.
- La magia: cumple una función dramática: despertar en Melibea el fuego amoroso.
- El tiempo: irreversibilidad del tiempo con lo que se vive el presente frenéticamente. Continua referencia a las horas y los relojes.
- La muerte: es un simple dejar de existir.
El espacio y el tiempo
Destacan la multiplicidad y simultaneidad de espacios. La trama se desarrolla en múltiples lugares: unos son interiores y otros exteriores.
El autor maneja dos tiempos: uno explícito, corto, en el que la acción progresa de forma continua; y otro implícito, más largo, en el que transcurren los acontecimientos no representados en la escena.
El mundo social de La Celestina
Transformación de la sociedad medieval:
- Nuevas relaciones entre los distintos estratos sociales. La nobleza ha sido desplazada por la burguesía.
- Configuración de un nuevo código moral con nuevos principios: individualidad, libertad y el afán de lucro.
El lenguaje
Dos registros: el culto y el coloquial. Los personajes utilizan uno u otro dependiendo de la situación comunicativa.
Las formas de expresión
- El diálogo: tres modalidades: el oratorio, el de extensos parlamentos y réplicas cortas; y el convencional.
- Los monólogos: son extensos. En ellos, el personaje desahoga sus emociones, expresa sus conflictos anímicos y muestra su carácter.
- El aparte: captados a medias por las personas que no debían oírlos.
- Las acotaciones: se intercalan en los diálogos y monólogos, es decir, se trata de acotaciones implícitas.