Análisis de poemas de Antonio Machado


CXVII: Caminos

Tema

Soledad y tristeza por el recuerdo de Leonor, reflejado en el paisaje de Baeza.

Estructura externa

Este poema está compuesto por 6 estrofas. Las tres primeras son cuartetas y las tres últimas, sextetos. Los versos son heptasílabos (arte menor) y endecasílabos (arte mayor). La rima es asonante en los versos pares en la vocal -e-a, dejando libres los impares. Es una silva arromanzada.

Estructura interna

Este poema se puede dividir en dos partes. La primera abarca las 5 primeras estrofas y consiste en una descripción lírica del paisaje de Baeza, desde lo más cercano a lo más lejano. La segunda parte, que corresponde a la sexta estrofa, explica el motivo de la soledad y la tristeza: la ausencia de Leonor.

Comentario literario

El poema es descriptivo, con una descripción lírica que expresa sentimientos de soledad y tristeza, especialmente en los versos 3 y 4. La mención de la «tarde silenciosa» no es casual, ya que es melancólica. La «tibia tarde de noviembre», perteneciente al otoño, es una metáfora del ocaso de la vida del poeta. Su tristeza se debe a la ausencia de Leonor, expresada mediante una interjección: «¡Ay, ya no puedo caminar con ella!», que indica dolor. Destaca el uso de la primera persona gramatical («contemplo mi sombra», «yo», «mi soledad») para expresar el intimismo del poeta. En la descripción, predominan los colores tristes: grises, olivares, violeta. El violeta, que no es propio del alegre paisaje andaluz, contrasta con la descripción lírica de los campos de Baeza. En esos campos, destacan dos elementos: las vides con pámpanos dorados y el Guadalquivir, que «reluce y espejea» como «un alfanje roto y disperso». Estos son los únicos colores alegres del poema. El paisaje sugiere descanso, que es el anhelo del poeta, expresado mediante personificaciones como «los montes duermen».

Conclusión

Es un poema íntimo, de profundo sentimiento de melancolía y soledad ante el recuerdo del fallecimiento de su esposa. Se caracteriza por la descripción lírica del paisaje, de tono sombrío y triste, en consonancia con el sentimiento del poeta. El paisaje se presenta humanizado mediante el empleo de personificaciones.

CXXIV

Tema

La esperanza de reencontrarse con su esposa con el renacer de la naturaleza en primavera.

Estructura externa

Este poema está formado por dos estrofas de ocho versos cada una, endecasílabos (arte mayor) y heptasílabos (arte menor), con rima asonante en -e-a en los versos pares, dejando libres los impares. Es una silva arromanzada.

Estructura interna

El poema se divide en dos partes. La primera, que abarca la primera estrofa, describe el renacer de la naturaleza y la esperanza de ser libre. La segunda, que corresponde a la segunda estrofa, expresa la esperanza de reencontrarse con su esposa.

Comentario

Machado realiza una descripción lírica de un paisaje primaveral, con el «sol de abril», y utiliza la primavera como símbolo del renacer de la naturaleza. Hay un contraste entre el blanco de la nieve al derretirse y el verde, para cuya expresión utiliza adjetivos como «verde llama» y el verbo «ha vencido». También usa un epíteto, «verde llama», y una metáfora, «la vega tiene la verde llama», donde la llama, que no es fuego, simboliza la esperanza. El paisaje le produce sosiego al ver el renacer y le hace pensar en un posible reencuentro con su esposa. Para expresarlo, utiliza una sinestesia: «dulce soplo», donde «dulce» se relaciona con el gusto y «soplo» con el tacto, simbolizando el sosiego al recuperar la esperanza. Es una descripción lírica, importante para Machado como forma de recuperar el pasado. Sueña con Leonor, que ha muerto, al hablar del renacer. Expresa su sentimiento anímico: «esta amargura que me ahoga». Utiliza el pronombre ELLA en mayúscula para enfatizar su amor único. Acaba con puntos suspensivos, recordándola al verla en su mente. En la segunda estrofa, destaca la anáfora con «con» («con el círculo», «con el glauco…»), donde la preposición indica compañía. Machado expresa su soledad en este poema intimista, en primera persona, donde paisaje y sentimientos se unen. Utiliza una metonimia: «triunfa de la muerte y de la piedra», refiriéndose a la muerte de Leonor, donde «piedra» alude a su lápida, y expresando la esperanza de su renacimiento.

Conclusión

Es una descripción lírica donde Machado proyecta en el paisaje primaveral sus sentimientos de soledad y esperanza de reencontrarse con Leonor. Aparece la metáfora del sueño, característica de Machado, como forma de recuperar el pasado. El color verde se relaciona con el sentimiento de esperanza.

La primavera besaba

Tema

Lamento por una juventud vivida sin amor.

Estructura interna

El poema se divide en dos partes. La primera (estrofas 1 y 2) describe la primavera y sus efectos en la naturaleza. La segunda (estrofas 3 y 4) expresa el recuerdo nostálgico de su juventud y el lamento por no haberla aprovechado.

Estructura externa

El poema consta de 4 estrofas de cuatro versos octosílabos (arte menor), con rima consonante en los versos pares, dejando libres los impares. Su forma métrica es la cuarteta.

Comentario

Es un poema descriptivo con abundantes adjetivos que transmiten frescor y colorido, como «verde humareda» y «frescas lluvias», que son adjetivos de sensación visual. Predomina el verde, símbolo de esperanza, presente en «almendro», «flor», «arboleda», «campo» y en el nombre sustantivado «el verde nuevo». También aparece el epíteto «frescas lluvias». En esta descripción lírica, Machado expresa sus sentimientos en el paisaje. La personificación «la primavera besaba» representa la expresión física del amor. Esta primavera se relaciona con la juventud y el amor. Otra personificación es «campo juvenil». En la primera parte, los verbos están en pretérito imperfecto, expresando una acción en desarrollo. Machado se detiene a contemplar el paisaje, y para expresar esa sensación en desarrollo, utiliza una perífrasis aspectual durativa: «iban pasando», y un gerundio: «temblando». Emplea comparaciones como «una verde humareda», que es una descripción impresionista. En la segunda parte, los verbos están en pretérito perfecto compuesto («he maldecido», «me ha parado»), recordando la juventud desde el presente («hoy, en mitad de la vida, me he parado»). El recuerdo se expresa mediante una metáfora que recupera el pasado. El verbo en subjuntivo «volviera» expresa deseo. La perífrasis verbal iterativa «te volvería a soñar» enfatiza el deseo de revivir la juventud sin amor, expresado en tono exclamativo de lamento.

Conclusión

Es un poema intimista donde el yo poético lamenta una juventud vivida sin amor y anhela recuperar el tiempo perdido, expresado mediante la metáfora del recuerdo. Está lleno de sensaciones coloristas, donde predomina el verde, asociado a la naturaleza.

Soñé que tú me llevabas

Tema

Lamento por la añoranza de Leonor.

Estructura externa

El poema consta de 4 estrofas, las dos primeras de 6 versos y las dos últimas de 4 y 2 versos respectivamente. Los versos son octosílabos (arte menor) con rima asonante en los versos pares, dejando libres los impares. El esquema métrico es 8- 8- 8- 8a. Es un romance.

Estructura interna

El poema se divide en dos partes. La primera (dos primeras estrofas) describe el sueño nostálgico con su esposa. La segunda (dos últimas estrofas) expresa el lamento por la añoranza de Leonor y la necesidad de esperanza para reencontrarse con ella.

Comentario

El poema, relacionado con la muerte de Leonor, es intimista, con presencia de la primera persona («soñé», «sentí», «mía») y la segunda persona («tú me llevabas», «tu mano», «tu voz»), dirigida a Leonor. El paisaje describe a una Leonor idealizada, como muestra el adjetivo «blanca vereda», símbolo de pureza. «En medio del campo verde» es un epíteto que idealiza el paisaje. Los versos siguientes contienen una traslación adjetival: «hacia el azul de las sierras los montes azules», describiendo un azul tan intenso que los montes se recortan en la lejanía. Sitúa a Leonor en el paisaje mediante metonimias: «sentí tu mano en la mía, tu mano de compañera, tu voz de niña en mi oído», donde la parte representa el todo, recordando esos aspectos de ella. La juventud de Leonor al morir se expresa mediante metonimias: «tu voz de niña», y comparaciones: «como una campana virgen, un alba de primavera, la mañana serena», destacando los adjetivos «nueva» y «virgen». Para expresar sus sentimientos, Machado usa el tono exclamativo («¡y quién sabe lo que se tragó la tierra!») y los puntos suspensivos, recordando a Leonor. La metáfora del sueño («soñé») es típica de Machado para revivir el pasado. Los pocos verbos («soñé», «sentí», «eran»), en pretérito perfecto simple, indican acciones pasadas. En la última estrofa, el verbo en presente «vive» expresa la esperanza del poeta. El coloquialismo «¡quién sabe lo que se tragó la tierra!» se refiere a la muerte y a la posibilidad de un reencuentro en otra vida.

Conclusión

Es un poema intimista que expresa la añoranza de Leonor, recuperándola del pasado mediante la metáfora del sueño, típica de Machado. Leonor aparece idealizada mediante epítetos, traslación adjetival y metáforas. Los sentimientos de añoranza y esperanza se expresan mediante el tono exclamativo, los puntos suspensivos y un coloquialismo.

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