ESTRUCTURA EXTERNA E INTERNA
El libro tiene 18 romances de extensión variable (desde 36 versos hasta 124). Los 15 primeros tratan asuntos gitanos contemporáneos y los 3 últimos, separados de los anteriores por una portadilla, gitanizan figuras del pasado.
El libro se estructura en 2 bloques de desigual extensión:
El 1º (principal y más extenso), muestra un mundo gitano creado en el 1º romance/romance prólogo, en el que la influencia de la luna sobre los gitanos simboliza el destino trágico de esta raza, y se destruye en el romance epílogo, en el que los gitanos son asesinados, también bajo la presencia de la luna. El 2º, está formado por 3 romances históricos, ambientados en el mundo paleocristiano (narra el suplicio sufrido por Santa Eulalia durante la época del emperador Diocleciano), la época medieval (romance de un caballero que encuentra la muerte cuando regresa a casa) y el universo bíblico (centrado en las relaciones incestuosas entre dos hijos del rey David).
A su vez, el 1º bloque se divide en 2 series que tienen como intermedio los 3 romances de los arcángeles:
- 1ª serie: Abarca los 7 primeros romances, es más lírica, con creación de dos mitos (luna y viento) y con protagonistas femeninas (todos excepto “Reyerta”, que tiene protagonista masculino).
En el centro, los 3 romances de los arcángeles están destinados a exaltar 3 ciudades andaluzas: Granada, Córdoba y Sevilla. “San Miquel” describe una romería en el Sacromonte granadino, “San Rafael” es una reinterpretación del pasaje bíblico en el que este acompaña a Tobías en un largo viaje y “San Gabriel” recrea el pasaje bíblico de la Anunciación.
- 2ª serie: Más épica, y formada por 5 romances, 4 de ellos protagonizados por personajes masculinos marcados por un destino trágico. El último narra la destrucción de la ciudad de los gitanos.
Esta división se corresponde con una división temática: En los romances de la 1ª serie predomina el tema de la frustración amorosa y en los de la 2ª los temas de violencia y muerte. El único romance que rompe esto es “Reyerta” que, por tema (lucha entre gitanos) y personaje (masculino), podría ir en la 2ª serie, con lo que el número de romances en cada una se igualaría a 6. De ser así, lo que se desequilibraría sería la extensión de ambas series, pues el “Romance de la Guardia Civil española” tiene tanta longitud como 3 de los más breves de los 1º. En todo caso, los 2 temas se fusionan en el último romance del libro.
Además, se nota la ordenación en otros rasgos. Así, el 1º es uno de los romances más breves y menos realistas y el último “Romance de la Guardia Civil española”, es el más largo y el de mayor fuerza narrativa. La colocación de este al final muestra un hilo épico que vertebra la obra: La lucha entre el héroe gitano y su antihéroe, la Guardia Civil.
En la estructura de los romances, tienen una naturaleza narrativa: Relatan algún episodio de la vida de los gitanos (muerte de un niño, una joven perseguida por el viento, una reyerta, una trágica historia de amor, una infidelidad, una romería…). Aunque en esa historia tiene más importancia lo que se sugiere que la anécdota en sí.
Se subdividen en secuencias separadas por números romanos, asteriscos o espacios en blanco. Estas, obedecen a cambios de escenario, tiempo o personajes. En otras ocasiones, Lorca estructura el poema en cuadros o escenas, como en una pieza dramática, o intercala la voz de los personajes en forma de monólogo o diálogo.
TEMAS
El tema central es la muerte, enfrentada con el afán de vivir de los personajes y aparece siempre revestida de violencia: Muerte como crimen, venganza, emboscada… Este tema aparece ya en el 1º romance, en el que la luna, mujer–muerte, se lleva a un niño, y recorre casi todos los romances del libro. La violencia aparece como un atributo del gitano unido a su sentido de la hombría. Por eso una voz anónima, representando la conciencia colectiva del pueblo gitano, recrimina a Antoñito el Camborio que no use la violencia contra los guardias civiles que lo detienen cuando va a Sevilla.
Tanta violencia aislada y muerte individual acaba en un asesinato colectivo, en una orgía desenfrenada de violencia, saqueo a sable, fusil y fuego, en el “Romance de la guardia Civil española”, donde arde la ciudad de los gitanos.
Otro tema esencial es el amor y el sexo, cuya influencia se percibe desde el principio, con esa luna-mujer-bailarina desnuda que seduce al niño con posesión mortal, hasta el último, en el que la luna preside una bíblica y agitanada violación. Estos, excepto en “La casada infiel”, son fuente de frustración. Así, en “Preciosa y el aire” es evidente la frustración erótica del viento y en el “Romance sonámbulo”. Hay insatisfacción en la “La monja gitana”, pues la protagonista es arrastrada por su imaginación a sueños llenos de erotismo, pero su realidad está dentro del convento.
El «Romance de la pena negra» nos presenta el tema de la pena andaluza, que Lorca definió como lucha de la inteligencia amorosa con el misterio que la rodea.
Además, en todo el libro hay un andalucismo. Así, a 3 ciudades andaluzas se le dedican poemas, y en la geografía y paisaje andaluz discurre la acción de los romances: En las estribaciones de la serranía de Cabra es el enfrentamiento entre gitanos del romance “Reyerta”. Desde ese mismo lugar huye el contrabandista del “Romance sonámbulo” y su destino es el barrio del Albaicín, donde le espera su amada. Entre las callejuelas de Albaicín está el convento donde la monja gitana reprime sus instintos amorosos y ansias de libertad. Por los olivares de Jaén canta su pena Soledad Montoya. Antoñito el Camborio es detenido camino de Sevilla y muere cerca del Guadalquivir asesinado por sus primos que son del pueblo Benamejí…
El andalucismo se ajusta al presente y a las raíces culturales de Andalucía: Romana, judía y cristiana. El sustrato romano se percibe en “San Rafael”, aludiendo a la belleza del puente que mandó construir Augusto, y en el “Martirio de Santa Olalla” la presencia romana se aprecia en el vocabulario (soldados de Roma, Minerva, cónsul, centuriones…). La influencia judía está en “Thamar y Amnón”, relatando los amores incestuosos entre 2 hijos del rey David. Pero, sin duda, el elemento cristiano es el dominante:Frecuentes las imágenes relacionadas con la pasión de Cristo, y uno de los personajes más emblemáticos, Antoñito el Camborio, sufre, como Cristo, 1º el prendimiento y luego la muerte. Además, los arcángeles reconfortan a los moribundos, como Juan Antonio el de Montilla o el Camborio, y la Virgen y San José curan a los gitanos heridos por la guardia civil.
En este espacio poético andaluz lo gitano cobra relevancia. Se muestran elementos asociados a su modo de vida (la forja de metales, la afición al canto y al baile, la relación con los caballos o el gusto por los objetos de adorno) y todo se agitana, desde la naturaleza hasta los seres sobrenaturales.
Por último hay que señalar que a través de la figura del gitano y de la Guardia Civil, se trata un tema en la literatura de Lorca: La libertad frente a la opresión.Los romances del Camborio y el “Romance de la Guardia Civil española” son la expresión clara.