La Dictadura de Primo de Rivera y la Crisis de la Restauración (1923-1930)
1. Antecedentes Históricos: El Reinado de Alfonso XIII y la Crisis del Sistema
Tras el Desastre de 1898, Francisco Silvela, líder conservador, asumió el poder. Su gobierno, que buscaba un regeneracionismo, incluyó figuras como el nacionalista catalán Manuel Durán y Bas, y el General Polavieja. Se intentaron reformas fiscales y descentralización administrativa, pero las tensiones internas y el descontento social llevaron a la dimisión de Silvela en 1901.
En 1902, Alfonso XIII alcanzó la mayoría de edad, iniciando un reinado que se extendería hasta 1931. Este periodo se caracterizó por la inestabilidad política, con gobiernos de concentración y la persistencia de problemas como:
- La Semana Trágica de Barcelona (1909): Revueltas populares debido al llamamiento a filas de reservistas para la guerra en Marruecos. La represión y la crisis política resultante provocaron la dimisión de Maura.
- La Crisis de 1917: Confluencia de crisis militar (Juntas de Defensa), política (Asamblea de Parlamentarios) y social (huelga general). El pistolerismo, con asesinatos de sindicalistas por parte de la patronal, agravó la situación.
- El Problema de Marruecos: Tras la Conferencia de Algeciras, España obtuvo un protectorado en Marruecos. La inestabilidad de la zona, con la rebelión de Abd-el-Krim, culminó en el Desastre de Annual (1921). El Expediente Picasso, que investigaba las responsabilidades militares, generó una gran controversia.
2. El Golpe de Estado de Primo de Rivera (13 de septiembre de 1923)
Ante la crisis política, social y económica, el General Miguel Primo de Rivera lideró un golpe de Estado. Sus objetivos eran:
- Restablecer el orden público.
- Acabar con la corrupción política.
- Frenar el avance del nacionalismo y del movimiento obrero.
El golpe, apoyado por un sector del ejército, se presentó como una medida contra los políticos de la Restauración, no contra el rey. Se declaró el Estado de Guerra y se exigió que el poder pasara a los militares.
3. La Dictadura de Primo de Rivera (1923-1930)
La dictadura se divide en dos fases:
3.1. El Directorio Militar (1923-1925)
Primo de Rivera elaboró el Manifiesto Inaugural, justificando la toma del poder por parte de los militares. Sus argumentos principales eran:
- La necesidad de «limpiar» el país de caciques y políticos corruptos.
- Restablecer el orden social y acabar con la amenaza del comunismo.
- Superar el desprestigio del sistema de la Restauración.
Se instauró un Directorio Militar, con las siguientes medidas:
- Suspensión de la Constitución de 1876 y disolución de las Cortes.
- Cese de los gobernadores civiles, sustituidos por militares.
- Prohibición de partidos políticos y sindicatos.
- Declaración del «estado de sitio», con restricción de derechos y libertades.
- Represión contra comunistas y anarquistas.
Se aprobaron el Estatuto Municipal y el Estatuto Provincial, que suprimieron los ayuntamientos y sustituyeron a los alcaldes por Juntas de Vocales Asociados, controladas por el gobierno.
3.2. El Directorio Civil (1925-1930)
Una vez estabilizada la situación, Primo de Rivera incorporó a civiles al gobierno, aunque mantuvo a algunos militares. Se buscaba dar una imagen de mayor apertura y contar con expertos en áreas como economía y sociedad.
3.3. Oposición a la Dictadura
A pesar de la represión, surgieron diversos grupos de oposición:
- Republicanos: Figuras como Alejandro Lerroux y Manuel Azaña.
- Intelectuales: Destacaron Miguel de Unamuno y José Ortega y Gasset.
- Sectores del ejército: Participaron en intentos de golpe de Estado, como la «Sanjuanada» de 1926.
- Nacionalistas catalanes: Francesc Macià lideró un intento de invasión desde Francia (Prats de Molló).
- Anarquistas y comunistas: Sufrieron una dura represión, pero mantuvieron su actividad clandestina.
4. Crisis y Caída de la Dictadura (1930-1931)
La crisis económica de 1929 y el creciente descontento social y político debilitaron la dictadura. Primo de Rivera dimitió en enero de 1930.
4.1. El Gobierno de Transición
a) «La Dictablanda» de Dámaso Berenguer: El general Berenguer intentó una transición controlada hacia un régimen constitucional, pero la oposición, unida en el Pacto de San Sebastián, exigía la instauración de una República.
b) El Gobierno del Almirante Aznar: Convocó elecciones municipales en abril de 1931, que se convirtieron en un plebiscito sobre la monarquía. La victoria republicana en las principales ciudades llevó a la proclamación de la Segunda República el 14 de abril de 1931.