11. SEXENIO
INTRODUCCIÓN
Se conoce por Sexenio Revolucionario o Democrático al periodo transcurrido desde el triunfo de la revolución de Septiembre de 1868 hasta el pronunciamiento de Diciembre de 1874 (Restauración borbónica). Las causas que lo motivaron fueron varias. Por un lado, la crisis económica que tuvo tres manifestaciones: la crisis financiera por la quiebra de las compañías ferroviarias, la sucesión de sequías y el aumento del paro. Por otro lado, la crisis política a causa del rechazo hacia el régimen isabelino, que estaba en manos de una camarilla de moderados hacia los cuales la reina no ocultaba su favoritismo. Ante estos problemas, se dieron varios alzamientos, como el de Los Sargentos del Cuartel de San Gil en 1866, que fue reducido por O’Donnell. Este hecho, costó a O’Donnell su puesto, siendo sustituido por Narváez y más tarde por González Bravo, quien establecíó una dictadura civil en la que gobernaba por decretos. Mientras tanto, progresistas y demócratas junto con la Uníón Liberal fundada por O’Donnell conspiraban y, en 1866, los dos primeros firmaron el Pacto de Ostende para derrocar a la reina. Al año siguiente, se añadió también la Uníón Liberal ahora dirigida por Serrano. Finalmente, en 1868, tuvo lugar La Revolución Gloriosa. Como tradicionalmente se ha indicado, este periodo será fruto de un “nuevo hombre”, pues frente al Romanticismo; que actuaba antes de pensar, ahora se impone un razonamiento: todo debe estar previamente pensado. Surgen así todas las ideologías que se habían ido gestando durante el reinado de Isabel pero que estaban al margen del liberalismo oficial (federalismo, republicanismo, democracia popular, etc.). El sexenio ensayará uno a uno dichos modelos políticos, pero todos fracasarán, pues cada grupo quería hacerse con el poder total viéndose enfrentados a diversos problemas (crisis, guerra carlista, guerra de Cuba, radicalismo político y el aumento de la conflictividad). Esto supondrá el fin del experimento democrático del Sexenio y la vuelta de la monarquía borbónica.
DESARROLLO
1. REVOLUCIÓN DE 1868
El 17 de Septiembre de 1868, la revolución, conocida como “La Gloriosa”, se inició con la sublevación del almirante Topete en la Bahía de Cádiz, apoyado por Prim y Serrano, quienes actuaron bajo el lema “Viva España con honra” (El pueblo añadiría “y abajo los borbones”). Dicho levantamiento se extendíó originando levantamientos populares y organizaciones de juntas revolucionarias locales. Días después, Serrano vence al ejército gubernamental en Alcolea e Isabel huye a Francia. La Junta revolucionaria asumíó el poder hasta la formación de un gobierno provisional en Octubre. En la revolución estaban Unionistas (bajo Serrano), Progresistas, (Prim y después Sagasta), Demócratas monárquicos (“cimbrios”, Martos), y Republicanos Federalistas, (Estanislao Figueras, Pi i Margall, Salmerón y Castelar).
2. GOBIERNO PROVISIONAL (1868-71)
Tras la constitución de un gobierno provisional, presidido por el general Serrano y con cinco ministros progresistas, entre ellos Prim, se crearon Los Voluntarios de la Libertad y se convocaron elecciones para unas Cortes Constituyentes.–Las Cortes quedaron constituidas el 11 de Febrero de 1869, con una mayoría de los partidos que formaban el gobierno frente a republicanos y carlistas. Esta mayoría elaboró la Constitución de 1869, por la que España quedó configurada como una monarquía parlamentaria. Esta incluía principios básicos del liberalismo como:
La soberanía
Reside en las Cortes bicamerales y se traduce en el ejercicio del sufragio universal.La división de poderes
El rey tenía el poder ejecutivo, pero lo ejercía a través de sus ministros, el legislativo estaba en las Cortes y el judicial en los jueces.Una declaración exhaustiva de los derechos individuales. La descentralización administrativa y judicial
La libertad de culto
Dio lugar a la secularización de la sociedad con leyes como la del matrimonio civil.-Una vez aprobada la Constitución, se establecíó una Regencia, de la que se encargó Serrano. Mientras tanto, Prim, que ahora presidía el gobierno, se encargó de buscar un nuevo rey. El elegido fue Amadeo de Saboyá, el cual llegó a España días después de que Prim hubiera sido víctima mortal de un atentado en Madrid.3. REINADO DE AMADEO I
Amadeo de Saboyá entró en Madrid en Enero de 1870. La muerte de Prim provocó una inestabilidad política en la que se sucedieron los gobiernos de los constitucionales de Sagasta, los radicales de Ruiz Zorrilla y los unionistas de Serrano. A esto se le añadió la oposición de los republicanos y alfonsinos, la guerra carlista (1872), la insurrección cubana (1868) y la impopularidad del rey. Estos problemas provocaron que Serrano, jefe de gobierno, pidiera al rey la supresión de las garantías constitucionales, a lo que este se negó. Ante la falta de apoyos, Amadeo terminó abdicando el 10 de Febrero de 1873 y la Asamblea Nacional proclamó la Primera República.4. LA PRIMERA REPÚBLICA (1873-74)
La Primera República intentó consolidar el régimen nacido en Septiembre de 1868. No tuvo éxito, pues la idea republicana apenas tenía apoyo popular y los republicanos estaban divididos en unitarios y federalistas (“intransigentes” bajo Estévanez, José María Orense, Juan Contreras; “centristas federales” bajo Pi i Margall y “moderados federalistas” bajo Castelar y Salmerón). Los intransigentes defendían construir una república desde abajo, formando primero los “cantones” y luego las instituciones que los organizaran. Los Centristas federales defendían lo contrario. Finalmente, los moderados federalistas defendían la construcción de una República que diera cabida a todas las opciones liberales, rechazando la vía revolucionaria.
Figueras, primer presidente de la República, reuníó a las Cortes. Como llegaron noticias de un levantamiento de Juan Contreras, Figueras huyó a Francia y la presidencia recayó sobre Pi i Margall. Este presentó un proyecto por el cual España quedaba convertida en una República federal de diecisiete estados, pero debido a la insurrección cantonal (destacó Cartagena bajo Juan Contreras y Antonete Gálvez), el proyecto no se aprobó y Pi i Margall tuvo que dimitir.
Llegó entonces a la presidencia Salmerón, que trató de acabar con la resistencia cantonal a través del ejército, si bien, su oposición a la firma de unas penas de muerte provocó su salida y el nombramiento de Castelar, que practicó una política autoritaria encaminada a asegurar el orden y la unidad. A los problemas cantonalistas se les unieron la guerra de Cuba y el Carlismo, que ocupó Estella y sitió Bilbao.
Cuando las Cortes se reunieron en Enero de 1874 se produjo la intervención del general Pavía que dio un Golpe de Estado y disolvíó las Cortes. Se nombró un gobierno dirigido por Serrano, que siguió gobernando bajo el régimen constitucional de 1869 pero bajo poderes dictatoriales (república unitaria). Este liquidó el problema cantonalista tras la rendición de Cartagena, pero no pudo hacer frente al problema cubano y al carlista.
El partido alfonsino, defensor de Alfonso de Borbón (hijo de Isabel II), se aprovechó de la situación y presentó el manifiesto de Sandhurst para la vuelta de la monarquía. En este contexto, en Diciembre de 1874 tuvo lugar el pronunciamiento del general Martínez Campos en Sagunto, que provocó la Restauración borbónica.
CONCLUSIÓN
El Sexenio democrático fue el primer intento de establecer un régimen democrático en España bajo la Constitución de 1869. Si bien, ha sido considerado por muchos historiadores, como Nadal o Tortella, como una oportunidad perdida, ya que no se pudieron llevar a cabo las reformas debido a los numerosos problemas que se tuvieron que afrontar. Finalmente, el Sexenio se convirtió en un periodo trágico en el que se sucedieron un gobierno revolucionario, una monarquía constitucional, una República federal y, por último, otra República unitaria y dictatorial. Por ello, los españoles, cansados ante esta inestabilidad, apoyaron el regreso de la monarquía borbónica. Lo cierto es que estos aprendizajes servirán de base para los sistemas políticos que vendrán en etapas posteriores.