Clasificación de las Salas de Cine
Las salas de cine se pueden clasificar según dos criterios principales:
Criterio Legal
Según este criterio, las salas se dividen en:
- Salas comerciales
- Salas X: Estas salas solo pueden proyectar películas clasificadas como X, las cuales están sujetas a clasificaciones especiales en cuanto a publicidad y tienen un IVA mayor.
Criterio Estructural
Este criterio se basa en el aforo y la disponibilidad de pantallas. Según este criterio, las salas se clasifican en:
- Palacios: Salas de exhibición cinematográfica de gran aforo, situadas en núcleos urbanos importantes y con una única pantalla. Esta fórmula está prácticamente extinta o se ha transformado en multisalas, ya que apenas cubren el aforo y solo lo consiguen con películas taquilleras y de gran expectación.
- Multisalas: Aparecieron en España como consecuencia de la crisis de espectadores de los años 80 y de la competencia de otros medios como el vídeo y la televisión. Son complejos con más de dos pantallas y salas de diferentes aforos donde se proyectan películas con distinto grado de aceptación.
- Multiplexes y Megaplexes: Los multiplexes son locales con seis o más pantallas y al menos 2.000 butacas. Los megaplexes son locales o complejos que tienen a partir de 15 pantallas y 4.000 butacas o más. El fenómeno de los multiplexes y megaplexes surgió a partir de 1992 y tuvo su mayor etapa de expansión entre 1998 y 2002.
Esta fórmula se caracteriza por disponer de suficientes pantallas para adaptar a tiempo real la oferta a la demanda existente. En estos complejos se pueden dedicar hasta siete salas para la proyección de una misma película, reforzando el efecto podio de las películas de éxito. También potencian el efecto rebote del público hacia películas de relleno conforme se agotan las entradas para las más taquilleras.
Los multiplexes y megaplexes permiten proyectar películas de contenido diverso, incluso dedicando salas pequeñas a películas de arte y ensayo o películas no comerciales. Se caracterizan por una alta calidad en el diseño arquitectónico, el sonido y la imagen, contando con los medios más modernos para la proyección y la sonorización.
Normalmente, estos cines se ubican cerca de un centro comercial en un nudo de comunicaciones en la periferia de una gran ciudad. Otra característica es el precio elevado de las entradas, que suele compensarse con descuentos mediante una tarjeta de fidelización. También se lleva a cabo la venta adyacente de productos relacionados con la experiencia cinematográfica, lo que permite amortizar con mayor rapidez la alta inversión realizada.
El fenómeno de los megaplexes, en un principio, contribuyó al aumento del número de espectadores. Sin embargo, ha desestabilizado los cines adyacentes o cercanos, produciendo un fenómeno de «tierra quemada» que, en muchos casos, ha supuesto el cierre de dichos cines. A esto se le llama fenómeno de la tierra quemada.
Relación Distribuidor-Exhibidor
El productor puede ceder la película siguiendo dos sistemas:
- A tanto alzado por una cantidad fija, independiente de la recaudación.
- A porcentajes (un tanto por ciento de la recaudación en función del número de entradas vendidas).
La segunda fórmula es la más habitual en las películas de estreno y tiene dos modalidades:
- Porcentaje fijo: Se pacta durante todo el proceso de exhibición y suele ser de 40-60 o de 50-50. El distribuidor español obtiene alrededor de un 52%, mientras que el resto de los distribuidores europeos no consigue más del 42%.
- Porcentaje con escala: Se pacta un número mínimo de semanas de exhibición, y a partir de la última se varía el porcentaje utilizando una escala correctora, siempre a favor del distribuidor. Por ejemplo, puede comenzar con 50-50, continuar con 55-45 y terminar con 60-40.
Contrato de Exhibición
A diferencia del contrato de distribución, el contrato de exhibición suele ser un modelo tipo sujeto a las cláusulas comunes al resto de los contratos. Debe incluir:
- Nombre de la empresa distribuidora.
- Nombre de la empresa exhibidora.
- Designación de la plaza (nombre del cine).
- Fecha aproximada de la programación, que normalmente depende del resultado en taquilla de la película precedente. En otros casos, se pacta una fecha de antemano y la película en cartel sale automáticamente, independientemente de su recaudación.
- Formato de la película.
- Datos de identificación de la película.
- Porcentaje de reparto.
Acciones Promocionales: Marketing en el Sector Audiovisual
El marketing es una herramienta fundamental en el sector audiovisual para la promoción. Se puede definir como el conjunto de estudios de mercado o técnicas para el conocimiento de los canales de distribución de un producto, con la finalidad de establecer más pretensiones de venta a las que deberán adaptarse los planes de producción de la empresa.
Los objetivos del marketing son:
- Establecer previsiones de venta.
- Potenciar las ventas.
- Estudiar nuevos mercados.
- Racionalizar la distribución de los productos.
- Orientar la campaña publicitaria.
- Adecuar el producto a las necesidades de los consumidores.
En el sector audiovisual, el marketing busca acercar la película al público. No solo se utiliza en la fase de comercialización, sino también en las tres fases de producción:
- Preproducción: Se utiliza el marketing de financiación para conseguir capital.
- Producción: Se utiliza el marketing de producción para vender la película mientras se filma.
- Comercialización: Se utiliza el marketing de distribución para la promoción comercial.
Marketing de Desarrollo o Financiación
Tiene como objetivo obtener los fondos necesarios o vender el proyecto a los inversores. Hoy en día, las películas se venden y luego se hacen. Antes de comenzar el rodaje, se intenta tener cubierto el coste de producción.
Para conseguirlo, el productor presenta el proyecto como una inversión atractiva utilizando tres instrumentos:
- Memoria o dossier: Recoge el plan de financiación y producción, el presupuesto preventivo y los compromisos de participación. También se conoce como plan de negocios y sirve para planificar el proyecto a medio-largo plazo, satisfaciendo las exigencias de inversores o entidades bancarias que quieren comprobar la viabilidad del proyecto. También ayuda al productor a reflexionar sobre sus decisiones financieras.
El plan de negocios incluye:
- Presentación y objetivos.
- Análisis de la industria audiovisual propia, situación actual y tendencias de futuro.
- Sinopsis del proyecto.
- Análisis de mercados.
- Elementos creativos.
- Elementos empresariales.
- Plan o calendario de trabajo.
- Plan de financiación y previsión de ingresos.
Plan de Financiación
Es la estrategia financiera diseñada por el productor e incluye un plan inicial o ideal (PLAN A) y un plan alternativo (PLAN B). En España, la estrategia financiera habitual sigue este esquema: 30% recursos propios, 30% créditos, 40% anticipos y derechos de antena.
Previsión de Ingresos
Es la estimación de ganancias en cada uno de los territorios donde la película se estrenará en formato cine, tomando como base las estimaciones de los agentes profesionales, distribuidores y agentes de venta. Se suele hacer una estimación al alza y otra a la baja, y de ahí se saca la media.