Diferencias entre Símbolos y Signos
Un símbolo es la representación perceptible de una realidad, es decir, es la forma de exteriorizar un pensamiento o idea. Los símbolos son específicamente humanos; tienen un significado más amplio y menos concreto, por ejemplo, las banderas, los himnos, etc. Los signos pueden ser comprendidos por los seres humanos y los animales; señalan; son específicos de un cometido o una circunstancia, por ejemplo, el humo, el arco iris, el rayo, etc.
Semiótica: Semántica y Pragmática
La semiótica se ocupa de signos, sistemas sígnicos, acontecimientos sígnicos, procesos comunicativos, funcionamientos lingüísticos y cosas así. Es decir, la semiótica se ocupa del lenguaje entendido tanto como la facultad de comunicar que como el ejercicio de esa facultad.
- Semántica: La parte de la semiótica que estudia las relaciones entre significantes y significados es la semántica. Se llama así a la rama de la lingüística que se ocupa de estudiar el significado tanto de las palabras, como de los enunciados y de las oraciones.
- Pragmática: La parte de la semiótica que se encarga de estudiar las relaciones entre significantes y usuarios se le llama pragmática y, en efecto, estudia el empleo de los signos por los seres humanos en sus diferentes maneras de relacionarse.
Heliocentrismo: Un Cambio de Paradigma
El heliocentrismo es un modelo astronómico según el cual la Tierra y los planetas se mueven alrededor de un Sol relativamente estacionario y que está en el centro del Universo. El heliocentrismo se oponía al geocentrismo, que colocaba en el centro a la Tierra. No fue sino hasta el siglo XVI, durante el Renacimiento, cuando un modelo matemático completamente predictivo de un sistema heliocéntrico fue presentado por el matemático, astrónomo y clérigo católico polaco Nicolás Copérnico, con la publicación póstuma en 1543 del libro De Revolutionibus Orbium Coelestium. Esto marcó el inicio de lo que se conoce en Historia de la ciencia como «revolución copernicana». En el siglo siguiente, Johannes Kepler extendió este modelo para incluir órbitas elípticas. Su trabajo se apoyó en observaciones hechas con un telescopio que fueron presentadas por Galileo Galilei. Con las observaciones de William Herschel, Bessel y otros, los astrónomos terminaron por aceptar que el Sol no se encuentra en el centro del universo; en la década de 1920, Edwin Hubble demostró que formaba parte de un complejo aún mucho mayor: la galaxia (la Vía Láctea), y que esta era tan solo una entre miles de millones de galaxias más.
La Comunicación: Proceso y Elementos
La comunicación es el proceso mediante el cual se puede transmitir información de una entidad a otra, alterando el estado de conocimiento de la entidad receptora. La entidad emisora se considera única, aunque simultáneamente pueden existir diversas entidades emisoras transmitiendo la misma información o mensaje. Por otra parte, puede haber más de una entidad receptora. En el proceso de comunicación unilateral la entidad emisora no altera su estado de conocimiento, a diferencia del de las entidades receptoras.
Los procesos de la comunicación son interacciones mediadas por signos entre al menos dos agentes que comparten un mismo repertorio de signos y tienen unas reglas semióticas comunes.
El funcionamiento de las sociedades humanas es posible gracias a la comunicación. Ésta consiste en el intercambio de mensajes entre los individuos. En la actualidad se entiende que el buen funcionamiento de la sociedad depende no sólo de que estos intercambios existan, sino de que sean óptimos en cierto sentido. Es en este punto del análisis dónde se incorpora la visión pro social, que entiende la comunicación no sólo como un medio de intercambio sino cómo un sistema de apoyo y bienestar para la masa social.
Desde un punto de vista técnico se entiende por comunicación el hecho que un determinado mensaje originado en el punto A llegue a otro punto determinado B, distante del anterior en el espacio o en el tiempo. También es un intercambio de ideas y conceptos, por medio del lenguaje en el que damos a conocer historias, experiencias mediante un proceso del emisor y receptor. Basado a lo anterior, unos de sus elementos principales son:
- Código: El código es un sistema de signos y reglas para combinarlos, que por un lado es arbitrario y por otra parte debe de estar organizado de antemano.
- Canal: El proceso de comunicación que emplea ese código precisa de un canal para la transmisión de las señales. El canal sería el medio físico a través del cual se transmite la comunicación.
- Emisor: Es la persona que se encarga de transmitir el mensaje. Esta persona elige y selecciona los signos que le convienen, es decir, realiza un proceso de codificación; codifica el mensaje.
- Receptor: Será aquella persona a quien va dirigido el mensaje; realiza un proceso inverso al del emisor, ya que descifra e interpreta los signos elegidos por el emisor; es decir, descodifica el mensaje.
- Contexto situacional: Naturalmente tiene que haber algo que comunicar, un contenido y un proceso que con sus aspectos previos y sus consecuencias motive el mensaje. Las circunstancias que rodean un hecho de comunicación se denominan contexto situacional (situación), es el contexto en que se transmite el mensaje y que contribuye a su significado.
Diferencias Fundamentales entre Arte y Ciencia
La verdadera cultura no entiende de divisiones (si acaso de jerarquías o prioridades), y un individuo culto tiene que aspirar a ser alfanumérico. Pero ello no significa que ciencia y arte sean la misma cosa, ni siquiera que funcionen de la misma manera para obtener conocimiento (ni siquiera proporcionan el mismo tipo de conocimiento). A continuación, una lista de diferencias fundamentales entre arte y ciencia que no aspira a que nos decantemos por una o por otra, sino que no las confundamos a la hora de operar con ellas:
- Si bien en sus primeros pasos, ciencia y arte son artefactos narrativos en los que prima la imaginación, en los cuales se añaden y se descartan segmentos que influyen en toda la construcción. En este primer momento, palabras y frases son como ecuaciones y experimentos. Pero entonces progresa la narración y se precipita hacia un desenlace, y allí es cuando arte y ciencia divergen.
- En el desenlace, una mente creativa aspira a mostrar un final concluyente. Pero el científico, si bien también trabaja como un poeta hasta este punto, finalmente debe trabajar como un contable: sus conclusiones se exponen para ser revisados por iguales, con la esperanza de que otros científicos acepten sus descubrimientos o localicen errores en los mismos.
- La ciencia crece tanto por la aprobación de los iguales como por la veracidad de sus afirmaciones técnicas.
- Si como se ha dicho la muerte del científico la provoca fundamentalmente el fraude (no el error, pues del error parte el progreso), la muerte de artista o literato es el plagio, pero no en fraude. En la ficción, como en las otras artes creativas, se espera un juego con la imaginación. Y en la medida que éste resulta estéticamente agradable, o bien evocador, se alaba. En ciencia no importa la estética a la hora de juzgar la calidad de un trabajo.
Pero la mayor diferencia que existe entre arte y ciencia la estableció el filósofo Sydney Hook: “La Madonna de Rafael sin Rafael, las sonatas y sinfonías de Beethoven sin Beethoven, resultan inconcebibles. En la ciencia, por otra parte, la mayoría de los hallazgos de un científico podría haberlos hallado perfectamente otro científico de su mismo campo.”