¡Escribe tu texto aquí!La crítica de Nietzsche a los filósofos y a la filosofía se enmarca dentro de su crítica más amplia a la civilización occidental. Conesta crítica, pretende destruir dicha cultura para sustituirla por otra de índole aristocrática, inspirada en la civilización presocrática que él tanto admiraba especialmente en sus primeros escritos. Esta crítica es un punto central de su pensamiento. Con ello, deja claro que nuestra cultura es una cultura filosófica y que, si no se destruye la filosofía, nunca podremos superar nuestra cultura, nuestros valores, para dar paso otro nuevos totalmente distintos. Para criticar a los filósofos, Nietszche,expone cual es la idiosincrasia de ellos, su peculiar manera de ser.
Sostiene Nietzsche que la primera idiosincrasia de los filósofos es su odio al devenir, pues carecen de sentido histórico es decir, no tienen capacidad de percibir la progresión en el tiempo. Metafóricamente lo expresa Nietzsche con la acusación de egipticismo. En consecuencia, los filósofos han creado una oposición excluyente entre el ser y el devenir relacionado con la oposición entre el inmovilismo de Parménides y el “todo fluye” de Heráclito. Y mientras que la filosofía ha optado por Parménides, Nietzsche, por Heráclito. En consecuencia, los filósofos sólo “creen, incluso con desesperación, en lo que es”, pero se encuentran con la muerte, el cambio, la vejez…; todo eso son para ellos objeciones, incluso refutaciones.
Viendo
entonces que no pueden apoderarse de la realidad buscan la causa del
engaño, la cual encuentran en los
sentidos con el cuerpo. Por eso, los filósofos quieren deshacerse de los
sentidos, de todo lo cambiante, del devenir y,sobre todo, del cuerpo. En
definitiva, niegan la realidad, o sea, la
vida.
Parece, por tanto, que Nietzsche caracteriza a los filósofos como
personas mediocres, débiles, con un instinto de temor y de calumnia.
La segunda idiosincrasia de los filósofos es “confundir lo último con lo primero”.Los filósofos han duplicado el mundo, pues han inventado un segundo mundo, el de los conceptos. Además, los filósofos no sólo han sustituido la vida por meros conceptos, sino que los han puesto por encima de la realidad considerándolos como algo superior a ella.
Pero aún hay más: los filósofos llevan hasta el extremo su idiosincrasia y sostienen que hay conceptos supremos, que son lo máximamente real. Y como lo superior no puede proceder de lo inferior, resulta que ninguno de los conceptos supremos puede haber devenido; por consiguiente tiene que ser causa si mismo. Y como ninguno de esos conceptos es contradictorio ni excluye a los demás, todos están comprendidos, en el concepto de Dios. Nietzsche basa ese extremismo en su idiosincrasia, la cual los ha llevado a vengarse, siendo la filosofía el resultado de la venganza de los débiles e inferiores que no aman la vida, que no son capaces de afrontarla, y se inventan “otra” vida “mejor”adecuada a su debilidad. El resentimiento creó los valores morales de Occidente y es el responsable de la aparición de una civilización enemiga de la vida Es, por tanto, el causante del nihilismo occidental.
Con esto,
Nietzsche consuma su crítica a la filosofía negando la validez de los
conceptos, de la verdad y negando la
validez de Dios, elimina también la ontología y toda posible fundamentación
metafísica.
Y una vez eliminada toda la tradición intelectual y racional de
Occidente, negada la filosofía, puede ofrecer su propuesta partiendo de cero:
la vida, lo vital, es el único y supremo valor.
Así, lleva a cabo una crítica de la metafísica,pues se asienta en un error fundamental: la creencia e la antítesis de los valores. Ontológicamente, critica la concepción del ser como una realidad estática, inmutable e inmóvil,y la creencia de dos mundos:el “aparente(realidad sensible y cambiante) y el “real”(equivalente al mundo de las ideas). Esta separación es debida, según Nietzsche, a prejuicios filosóficos contra la vida y , sobre todo, contra ciertas manifestaciones, y es síntoma de decadencia. El error metafísico tradicional lo expone Nietzsche en las 4 tesis del “Crepúsculo de los Ídolos. En la primera tesis, Nietzche enuncia que la metafísica occidental toma como verdadera la reflexión de la razón, sin darse cuenta de que no está fundamentada en la lógica, sino en la necesidad que tiene el ser humano de sobrevivir en un mundo en devenir, de encontrar reposo, seguridad y calma. En la segunda expone los signos distintivos que han sido asignados al ser verdadero de las cosas son los signos distintivos del no ser, a base de ponerlo en contradicción con el mundo real es como se ha construido el mundo verdadero: en realidad, un mundo aparente, por cuanto es una ilusión óptico moral. Con la tercera se descubre que el problema de fondo es el nihilismo y que Inventar otro mundo supone tomar venganza de este. Y la cuarta tesis dice que dividir el mundo en verdadero y aparente, ya sea al modo del cristianismo, ya al modo de Kant, es unicamente una cuestión de decadencia, así aparece de nuevo el nihilismo
Nietzsche también crítica el aspecto epistemológico, objetado el génesis de los conceptos como apoyo a la visión estática de la realidad. Piensa que los conceptos se usan para expresar una multiplicidad de cosas que nunca son idénticas. No existe la verdad. Es una ilusión. También, enuncia que el lenguaje en general nos engaña pues muestra una realidad unitaria que no lo es.
Por último, Nietzsche introduce en la historia de la Filosofía la horrible sospecha de que hemos equivocado el camino, desde Parménides hasta Hegel. Nietzsche cree que esa «gran mentira» ha llegado a su fin, ha sido desenmascarada. Y este hecho, llamado «la muerte de Dios», estará seguido por un período de nihilismo.