Cuentas Corrientes
Cuentas Corrientes refleja los intercambios de bienes y servicios entre un país y el resto del mundo. Las bienes (balanza comercial) recogen las importaciones y exportaciones que realiza un país (comercio visible). Las importaciones son compras a otros países que suponen pagos, y las exportaciones son ventas que generan ingresos. La diferencia entre el valor de ambos muestra si la economía del país tiene o no desequilibrios en su comercio exterior. Si los pagos superan a los ingresos, la economía presenta un déficit comercial, en caso contrario, superávit. Servicios recoge la contratación internacional de servicios de transporte, bancarios, seguros, turismo, viajes (comercio invisible). España es un receptor neto de ingresos por turismo. Si la diferencia entre ingresos por los servicios exportados y los pagos por los servicios importados es positiva, esta balanza presenta un superávit, que permitirá compensar el posible déficit comercial del país. Si es negativa, tendrá un saldo deficitario. Rentas Primarias incluye las rentas procedentes de préstamos e inversiones en el exterior, así como las rentas del trabajo, de trabajadores fronterizos, temporeros, beneficios, intereses. Rentas Secundarias o de Transferencias Corrientes registra la transferencia o entregas de dinero sin contrapartida, ayudas a países en vías de desarrollo, en España la aportación española al presupuesto de la UE o subvenciones de la UE a los agricultores españoles.
Cuenta Financiera
Si un país tiene déficit en su cuenta corriente, debe utilizar ahorros o acudir al mercado financiero internacional porque necesita financiación. Un país con superávit tiene capacidad de financiación y puede utilizarla para invertir o realizar préstamos en el exterior o aumentar sus ahorros o reservas. Estas operaciones se contabilizan en esta cuenta, que recoge los flujos financieros entre los residentes de un país y el resto del mundo. Inversiones Directas son inversiones de otros países para conseguir una rentabilidad permanente y un control significativo en la gestión de la empresa, como la apertura de una nueva tienda de Mango en Japón. Inversiones en Cartera se refiere a cuando alguien adquiere acciones o bonos en otro país para obtener rentabilidad, por ejemplo, si un inversor español compra acciones de una empresa en Suiza. Otras Inversiones incluyen préstamos y depósitos internacionales, como un préstamo del BBVA a una empresa chilena.
Mercado de Valores
Es un mercado especializado en la compraventa de toda clase de títulos y su función es canalizar el ahorro hacia la inversión. La oferta está constituida por empresas y organismos públicos que buscan financiación a través de la emisión y venta de activos financieros. La demanda la conforman los ahorradores-inversores interesados en comprar esos activos. Los mercados pueden ser primarios o de emisión, donde se venden títulos por primera vez, y secundarios, donde se negocian títulos ya existentes una vez colocados. La bolsa es el mercado más importante y mejor organizado.
Ambos están relacionados, cuanto más desarrollado el secundario, mejor funcionará el primario. El mercado secundario potencia al primario, dándole liquidez y facilitando la relación entre inversores. Si no existiera el secundario, alguien que compra hoy acciones o bonos en el mercado primario no podría venderlos cuando necesitara dinero. La existencia del secundario permite transformar los activos en dinero en cualquier momento que el inversor lo necesite.
Emisión de Acciones y Obligaciones
La emisión de acciones permite a las sociedades anónimas reunir grandes cantidades a través de las aportaciones de muchos inversores. La empresa divide la totalidad del capital que necesita en pequeñas cantidades iguales, emite títulos por ese valor y los pone en venta, son las acciones y quienes los compran son socios accionistas. Las acciones representan la propiedad de una parte de la empresa. Las sociedades pueden ampliar su capital tantas veces como lo necesiten mediante la emisión de nuevas acciones. El incentivo para los accionistas es la participación en los beneficios de la empresa según el número de acciones compradas. Son títulos de renta variable. La emisión de obligaciones permite a empresas y sector público obtener fondos a través de la venta de bonos u obligaciones. La empresa divide la totalidad del dinero que necesita en pequeñas cantidades iguales y emite títulos por ese valor. Una obligación es el certificado de una deuda, en el que se especifica la fecha de vencimiento en la que se devolverá el préstamo y el tipo de interés que se pagará periódicamente. Las obligaciones son títulos de renta fija, a largo plazo son más arriesgadas porque cuesta más tiempo recuperar el dinero y tienen un tipo de interés superior. El estado es más fiable que la empresa, por lo que el tipo de interés de sus bonos es inferior.
Intermediarios Financieros No Bancarios
No son entidades bancarias y no crean dinero bancario, actúan a través de grandes bancos e incluyen: fondos de inversión, cuya función es la creación de un fondo patrimonial a partir de aportaciones por ahorradores. El fondo creado se invierte en una cartera de distintos tipos de productos financieros, los participantes aceptan todo el riesgo y el rendimiento que conlleva la cartera. Fondos de pensiones, se forman con el dinero aportado por trabajadores a lo largo de su vida activa. El fondo creado se invierte para obtener beneficios y, si el beneficiario se jubila, se le paga una cantidad fija o pensión periódica acorde a las aportaciones realizadas en su vida activa y los rendimientos obtenidos de las inversiones del fondo. Compañías aseguradoras cubren económicamente a sus clientes de todo tipo de riesgos a cambio del pago de una cuota o prima anual. Leasing financia empresas que necesitan bienes de equipo en forma de alquiler con derecho final de compra. Factoring cobra las facturas pendientes o los réditos que tengan las empresas sobre terceros a cambio de comisión. Entidades de capital riesgo aportan capital temporal a empresas de sectores dinámicos de la economía de los que se espera un crecimiento superior a la media. El objetivo es que la empresa aumente su valor y, conseguido el capital, se retira obteniendo beneficio.