Dirección Empresarial: Niveles, Funciones y Dirección Participativa por Objetivos (DPO)


La Dirección de la Empresa y sus Funciones

La dirección se ocupa de coordinar e integrar el conjunto de recursos materiales y humanos que configuran la empresa. La esencia de la tarea directiva es liderar a las personas que componen la organización, dándoles objetivos y valores comunes. La dirección de la empresa ha de llevar a cabo las funciones de planificación, organización, dirección de recursos humanos y control.

Niveles de la Dirección

  1. Alta Dirección

    Presidencia y la dirección de más alto nivel de la empresa. Nivel superior de la pirámide, encargada de pilotar la empresa y fijar sus objetivos. Sus decisiones establecen la misión o propósito de la empresa, qué productos se elaborarán, etc.

  2. Dirección Operativa

    Directivos que están en contacto directo con los trabajadores. Nivel más bajo de la pirámide, responsables de asignar tareas a los trabajadores y de supervisar sus resultados. Se encargan de llevar a la práctica las decisiones y los planes desarrollados por los directivos de nivel superior, como por ejemplo, un jefe de almacén.

  3. Dirección Intermedia

    Entre la alta dirección y los directivos de primera línea están los directivos de nivel medio. Se encargan de mantenerlos en contacto, como por ejemplo, la directora de una fábrica o el jefe de ventas. Su función es traducir y concretar las directrices fijadas por la alta dirección en objetivos y planes específicos para cada uno de los niveles subordinados.

Funciones de la Dirección

  1. Planificación

    Consiste en determinar por anticipado qué quiere conseguirse en el futuro, cómo se va a lograr y qué recursos se van a utilizar para lograrlo.

  2. Organización

    Consiste en definir las actividades y tareas que se desarrollarán, dividir y distribuir el trabajo entre las personas que las llevarán a cabo y determinar las relaciones de autoridad que deben existir entre ellas, con la intención de cumplir los objetivos previstos de la forma más eficiente.

  3. Dirección de Recursos Humanos

    Se ocupa de la selección, formación y asignación de personas a los distintos puestos de trabajo, así como del diseño de sistemas de recompensas e incentivos que sirvan de motivación a las personas en el ejercicio de sus funciones. Para dirigir los recursos humanos es necesario el liderazgo, el ejercicio de la influencia y el poder para conseguir que las personas se identifiquen con los objetivos del grupo y actúen para lograrlos.

  4. Control

    Consiste en comparar los resultados previstos con los reales, identificar desviaciones si las hubiera y establecer la forma de corregirlas.

Dirección Participativa por Objetivos (DPO)

La DPO es un sistema de dirección en el que los objetivos específicos se planifican de forma conjunta entre trabajadores y directivos, y se revisan periódicamente para observar su progreso. Los trabajadores pueden participar en la fijación de sus propios objetivos y conocer los factores que se utilizan para valorar su rendimiento, con el consiguiente efecto motivador.

Etapas de Implementación de la DPO

  1. Fijación de Objetivos

    El superior se reúne con sus subordinados para establecer los objetivos del periodo (1 año o 6 meses). Ambas partes determinan qué se debe hacer, cómo se van a medir los resultados y en qué fecha, así como la importancia relativa de cada objetivo y sus dificultades.

  2. Aplicación

    El subordinado es el responsable del logro de los objetivos y quien determina el procedimiento, lo que otorga una gran autonomía para decidir cómo alcanzarlos.

  3. Evaluación

    Al final del periodo establecido, el superior y los subordinados determinan el grado de cumplimiento de los objetivos y analizan las causas que han impedido su logro con el fin de evitarlas en un futuro. Se establecen los objetivos para el periodo siguiente.

Ventajas e Inconvenientes de la DPO

Ventajas

  1. Favorece la motivación de los trabajadores, al ser ellos mismos los responsables de qué conseguir y de cómo hacerlo.
  2. Mejora el compromiso personal, al comprender cómo contribuye su esfuerzo a los objetivos generales de la organización.
  3. Clarifica la organización. Las personas saben qué tareas van a desarrollar y con qué objetivos, lo que permite que puedan medir regularmente sus propios progresos.
  4. Facilita la dirección. Aumenta la comunicación regular entre subordinados y superiores, facilita el conocimiento mutuo y las relaciones humanas.
  5. Las decisiones sobre remuneración y promoción son más objetivas.

Inconvenientes

  1. Dificultad en la fijación de los objetivos para que sean verificables.
  2. Centrarse en el corto plazo puede suponer descuidar los objetivos a medio y largo plazo.
  3. Se critica la DPO por su visión lineal y demasiado alejada del contexto que rodea la empresa, así como por su visión estrecha y resultadista de la naturaleza humana.
  4. La DPO no se adapta especialmente bien a esta época de vertiginosos cambios en la información, en la que el cambio de supuestos y de objetivos puede hacer que los planes de ayer no valgan para hoy.

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