El Juego: Una Actividad Natural
El juego es una actividad natural que evoluciona en paralelo al desarrollo humano y se manifiesta a lo largo de toda la vida. Se identifica con diversión, satisfacción y, en ocasiones, ocio. Todas las personas poseen un instinto que les impulsa a jugar. Transmite valores, normas de conducta, resuelve conflictos y contribuye al desarrollo de la personalidad.
El Juego en la Primera Infancia
El juego es el principal medio de aprendizaje en la primera infancia. La UNESCO en 1998 afirmó que «el juego ayuda al crecimiento del cerebro». Es una actividad universal, necesaria y placentera que favorece el desarrollo sensorial y emocional, actúa como elemento equilibrador y contribuye al desarrollo cognitivo y psicomotor.
Antecedentes Históricos del Juego
Multitud de ejemplos de personas jugando han sido recogidos gracias a los restos arqueológicos, pinturas o escritos, que describen la vida del homo ludens desde los inicios de la civilización.
Grecia Clásica y Roma
En Grecia Clásica y en Roma, el juego formaba parte de la vida de las personas:
- Existían juguetes como canicas, peonzas, aros, pelotas de cuero, tabas, columpios y muñecos de hueso o marfil que se utilizaban para desarrollar diferentes actividades lúdicas.
- También los adultos jugaban, como lo demuestran los Juegos Helénicos, Pícnicos, Nemeos o los Olímpicos (año 776 a.C.).
El juego era considerado como un elemento de distracción, disfrute y entretenimiento. La gallina ciega, la peonza, el churro, pares o nones y muchos juegos más son conocidos desde la época de la Antigua Roma.
Algunos Juegos de la Antigüedad:
- Juego de la Morra: Se jugaba en Grecia y consistía en adivinar los dedos que mostraba el adversario. Actualmente se conoce como «los chinos».
- Juego de Latrumculi: De la antigua Roma, consistía en robar fichas al adversario.
- Harpastum: Juego romano que consiste en transportar un balón con la mano hasta un punto determinado.
- Sistrum: Una especie de sonajero que (según sus creencias) ahuyentaba los males y protegía a los niños.
Edad Media
En la Edad Media, el juego se vincula a la clase social alta porque los niños, considerados mano de obra barata, trabajaban muchas horas al día, por lo que tenían poco tiempo para jugar. Aun así, existían juegos populares.
La Edad Media es una época de muchas guerras, por lo que la actividad física se orienta a «preparar el cuerpo para la guerra», ya no interesa la estética corporal que se perseguía en el periodo clásico.
Alfonso X el Sabio escribe el primer tratado sobre juegos: El libro de los juegos. Este hecho puede indicarnos que, a finales de este periodo, el juego empezaba a ser considerado como elemento de estudio por los valores que desarrollaba. Los juguetes de la época solían ser de madera.
Algunos Juegos de la Edad Media:
- Ajedrez: Favorito entre los nobles y señores feudales. Considerado juego de guerra y de preparación de caballeros.
- Alquerque: Fue la base de lo que hoy se conoce como las damas.
- Soule: Consistía en patear una pelota hasta un punto del campo contrario. Se jugaba al aire libre. Una variante fue utilizar un palo curvado para empujar la pelota.
- Juego de Palma: De origen francés, se juega con una especie de raqueta y en Francia fue deporte rey en los años 1250-1650. Es el antecesor de los deportes actuales de raqueta.
Edad Moderna (Renacimiento)
En la Edad Moderna, el juego motor empieza a ser valorado como actividad necesaria y educativa. Se promueve la idea de «cultivar el cuerpo para desarrollar la mente», entendiendo el cuerpo como unidad funcional. Se potencian los juegos al aire libre por considerarlos necesarios para la salud. También se juega a las cartas y la oca, y se conservan a su vez el ajedrez, las damas y otros juegos de salón.
Aparecen artesanos fabricantes de juguetes, principalmente realizados en madera. El juego motor se consolida como elemento pedagógico.