El Método Cartesiano y la Búsqueda de la Verdad en la Filosofía Moderna


El Método Cartesiano: La Búsqueda de la Certeza en la Filosofía Moderna

1. La Duda Metódica y el Fundamento de la Verdad

El punto de partida de la filosofía de Descartes es la creencia en el poder de la razón para alcanzar la verdad universal, oponiéndose al escepticismo de su época. Inspirado por la revolución científica, Descartes buscaba un conocimiento cierto y absoluto. Su objetivo era construir un «edificio de la verdad», un sistema de conocimientos indudables.

Para lograrlo, Descartes propone una renovación radical de la filosofía, rompiendo con el principio de autoridad como criterio de verdad. En cambio, busca certezas evidentes que sirvan como fundamento para el conocimiento verdadero.

El Método Cartesiano: Inspiración Matemática

Descartes se inspira en el método deductivo de la geometría, considerándolo como modelo de certeza. Este método se basa en dos elementos:

  • Intuición: La aprehensión de ideas claras y distintas.
  • Deducción: La obtención de conclusiones evidentes a partir de ideas claras y distintas.

Descartes busca aplicar este método a la filosofía y a las ciencias en general.

Las Cuatro Reglas del Método Cartesiano

El método cartesiano se compone de cuatro reglas fundamentales:

  1. Evidencia: No aceptar como verdadero nada que no sea evidente. Esta regla busca evitar la precipitación y el error, estableciendo la claridad y la distinción como criterios de verdad.
  2. Análisis: Descomponer el problema en ideas claras y distintas, buscando una primera verdad evidente a partir de la cual deducir nuevos conocimientos.
  3. Síntesis: Reconstruir el conocimiento a partir de las ideas claras y distintas, deduciendo nuevas verdades de forma ordenada.
  4. Enumeración: Revisar exhaustivamente el proceso de análisis y síntesis para asegurar la validez de las conclusiones.

La Primera Verdad: «Pienso, luego existo»

A través de la duda metódica, Descartes llega a la primera verdad indubitable: «Pienso, luego existo». Esta verdad no solo afirma la existencia del sujeto pensante, sino que también revela su esencia: el pensamiento. Descartes concibe al ser humano como una dualidad de cuerpo y pensamiento.

A partir de esta primera verdad, Descartes inicia un proceso deductivo para demostrar la existencia de Dios y del mundo, sentando las bases de la filosofía moderna y la era de la razón.

2. El Concepto de Idea y sus Tipos

Para Descartes, la idea es el contenido del pensamiento, una representación mental de las cosas. A diferencia de Platón, Descartes no considera que las ideas existan por sí mismas.

Tipos de Ideas

: 1. Ideas adventicias. Son aquellas que parecen provenir del mundo exterior a través de los sentidos, por ejemplo, cualquier color, olor, sabor, etc. 2. Ideas facticias. Son aquellas creadas por la imaginación a partir de la combinación de ideas adventicias. Por ejemplo, el centauro, la sirena, el ángel, etc. 3. Descartes y los racionalistas rompe con ello, y dicen que hay unas ideas con las que nacemos, es decir, ideas innatas, son pocas pero muy importantes, porque son las que permitirán en el método de Descartes, salir del solipsismo. Permitirán la demostración de la existencia del mundo. Dirá que la existencia del mundo no puede ser una idea adventicia ni una idea facticia, por tanto solo queda que sea innata. La afirmación de la existencia de ideas innatas es una tesis fundamental del racionalismo contra el empirismo, que niega la existencia de ideas innatas, defienden que todo proviene de los sentidos. El propósito de Descartes es demostrar que el mundo existe y lo hará a través de la idea de que Dios existe, que es una idea innata. Descartes encuentra la idea de perfección o en la idea de infinito como idea innata., ya que no son ni adventicias ni facticias. Estas dos ideas corresponden a Dios, que se define como el ser perfecto e infinito, es decir, la idea de Dios es una idea innata. Ahora, descartes pretenderá demostrar la existencia de Dios, y de ahí demostrará la existencia del mundo, con lo cual, llegamos a que hay 3 ámbitos en la realidad, lo que llama Descartes sustancias, el yo, Dios, y el mundo

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