El Sistema Esquelético y las Articulaciones: Un Vistazo a la Estructura Ósea


Los Receptores Sensoriales

Se denominan receptores a las células nerviosas capaces de detectar estímulos internos y externos. Según su especialización, se agrupan en:

  • Mecanorreceptores: Se estimulan por fuerzas mecánicas, como la presión. En este grupo se incluyen los receptores del tacto, del oído y del equilibrio.
  • Quimiorreceptores: Se activan por sustancias químicas o por variaciones en sus concentraciones, como los receptores del gusto y el olfato.
  • Receptores de energía: Reaccionan ante la energía electromagnética y térmica, como los fotorreceptores y los termorreceptores.
  • Nociceptores: Son los receptores del dolor, de origen mecánico o térmico.

La complejidad de los receptores es muy variada. Algunos son terminaciones nerviosas libres. Los receptores sensoriales complejos están formados por la asociación de neuronas sensibles con células epiteliales especializadas.

Efectores. El Aparato Locomotor

El aparato locomotor o sistema esquelético-muscular está formado por la unión de los huesos, las articulaciones y los músculos, y constituye el elemento de sostén, protección y movimiento del cuerpo humano.

El Sistema Esquelético

El sistema esquelético está formado por los huesos, los cartílagos, los ligamentos y las articulaciones. El esqueleto humano se divide en varias regiones: la cabeza, el tronco y las extremidades.

El esqueleto de la cabeza, la columna vertebral y la caja torácica constituyen el esqueleto axial, y el esqueleto de las cinturas y las extremidades, el esqueleto apendicular.

Funciones

  • Sostén: Es la estructura que sostiene las partes blandas del cuerpo.
  • Protección: Protege órganos internos como el encéfalo, el corazón, los pulmones y la médula espinal.
  • Movimiento: Realiza la función de palanca en los movimientos.
  • Almacenamiento de minerales: Contiene minerales como el calcio y el fósforo, que son utilizados según las necesidades orgánicas.
  • Formación de células sanguíneas: En la médula ósea roja, presente en algunos huesos, se produce la hematopoyesis, es decir, la formación de los glóbulos rojos, algunos glóbulos blancos y las plaquetas.
  • Almacenamiento de triglicéridos: La médula ósea amarilla o tuétano, presente en el canal central de los huesos largos, está formada por adipocitos, células que contienen grasa y que el organismo puede utilizar como reserva energética.

El Tejido Óseo

Tipo de tejido conectivo formado por células muy separadas rodeado de grandes cantidades de una sustancia llamada matriz.

Las células óseas maduras son las que segregan la matriz, que contiene fibras de colágeno y sales minerales de calcio precipitadas. Las sales se depositan entre las fibras proteicas de colágeno mediante un proceso llamado calcificación o mineralización. Las sales minerales confieren dureza al hueso mientras que las fibras de colágeno le proporcionan flexibilidad, es decir, su gran resistencia a la tracción.

La parte «viva» del tejido óseo tiene células de tres tipos diferentes:

  • Los osteocitos son las células óseas maduras y las células principales de tejido óseo.
  • Los osteoblastos son osteocitos jóvenes sin especializar.
  • Los osteoclastos que derivan de glóbulos blancos de la sangre y sirven para destruir el tejido óseo viejo.

Estructura de los Huesos

  • Hueso compacto: Es una capa externa, dura y compacta, formada por células óseas y que posee una matriz proteica, dispuesta en laminillas que rodean los canales de Havers, diminutos conductos que contienen los vasos sanguíneos. Dentro de las laminillas hay pequeñas cavidades, ocupadas por células óseas.
  • Hueso esponjoso: Es la capa interna, rica en células óseas y que presenta cavidades ocupadas por vasos sanguíneos y grasa, que forman espacios ocupados por médula ósea roja.

El periostio es una capa delgada y dura, que forma la cubierta externa de los huesos. La cavidad medular y los canales de Havers están cubiertos por el endostio, una envoltura fibrosa.

El endostio está activo cuando el hueso crece y cuando se realizan procesos de reparación. Suele ser una capa incompleta con el grosor de una célula. El endostio reviste todas las superficies internas, incluyendo los conductos vasculares y los espacios medulares.

Formación de los Huesos

Durante la gestación, el esqueleto del feto está formado por cartílago. La sustitución del cartílago por hueso, u osificación, se produce a partir del segundo mes de gestación. A medida que una persona crece, el tejido cartilaginoso es reemplazado gradualmente por el tejido óseo.

En los huesos largos, entre las epífisis y la diáfisis se encuentra una fina lámina: el cartílago de crecimiento. Las células que constituyen esta lámina se dividen constantemente y depositan calcio en la matriz proteica del hueso. Los huesos crecen longitudinalmente hasta la edad de 20-25 años aproximadamente, cuando se produce la osificación total del cartílago y se alcanza la estatura máxima.

Las Articulaciones

Las articulaciones se suelen clasificar, según el grado de movilidad que permiten, en:

  • Sinartrosis o inmóviles: Son articulaciones fijas que no permiten el movimiento de los huesos. Los bordes de los huesos están tan próximos entre sí que incluso pueden quedar entrecruzados. Pueden ser de varios tipos: suturas del cráneo, con los bordes óseos encajados entre sí por medio de tejido conjuntivo; gonfosis, una especie de atornillamiento que une cada diente al alveolo óseo a su alrededor, y sicondrosis, que es la unión de huesos mediante una sutura cartilaginosa, que se da en los huesos en crecimiento, en los que la diáfisis se mantiene unida a cada una de las epífisis por un cartílago. Una sicondrosis que permanece en los adultos son las primeras articulaciones esternocostales. A veces se fusionan dos huesos distintos, lo que forma una sinostosis.
  • Anfiartrosis o semimóviles: Son articulaciones con escaso movimiento. La conexión entre los huesos se hace por cartílago o por fibras de colágeno. La articulación de los extremos de la tibia y el peroné y la membrana interósea del cubito y radio, que se hacen por medio de ligamentos, los cuales limitan el movimiento de los huesos, se denomina sindesmosis. Si los huesos están separados por una almohadilla o una cuña de cartílago se denomina sínfisis, como sucede en los discos intervertebrales, en la unión de los cuerpos vertebrales, o en los huesos del pubis.
  • Diartrosis o móviles sinoviales: Permiten un gran movimiento de los huesos. Además de la parte ósea, están constituidas por varios elementos.

Los movimientos del cuerpo tienen lugar en las zonas de unión entre los huesos, es decir, en las articulaciones, estructuras de tejido conectivo que unen dos o más huesos próximos.

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