Introducción
Al terminar la Guerra Civil (1936-1939), el teatro español había perdido autores como Valle-Inclán, Lorca o Unamuno y otros muchos estaban en el exilio. Mientras en los escenarios europeos se hacían obras novedosas (teatro épico, el teatro del absurdo) España tenía un teatro burgués destinado a entretener a una burguesía mayoritariamente conservadora. Además, la censura impedía estrenar obras críticas con la sociedad y los valores establecidos. Así seguirá hasta 1949 con Historia de una escalera que inicia un camino hacia la renovación.
El teatro burgués
En los primeros años de la posguerra resurge la comedia costumbrista, con obras de dramaturgos como Joaquín Calvo Sotelo.
El teatro poético o de ensueño
Su temática se centra en la lucha entre realidad y fantasía, y en la defensa del amor como método para superar conflictos. Destacó Alejandro Casona, La dama del alba.
El teatro de humor
Su humor se caracteriza por situaciones inverosímiles y diálogos absurdos con los que se critica, de forma muy irónica a la sociedad. Además este teatro influirá después en el teatro experimental. Destacan:
Enrique Jardiel
Hizo teatro de evasión. Los personajes son numerosos y de la burguesía y se moverán constantemente creando dinamismo. Representan una sociedad feliz, cuyos objetivos son el amor y el dinero. Los ladrones somos gente honrada.
Miguel Mihura
Toda su obra dramática es una crítica de los convencionalismos e imposiciones sociales que ahogan la libertad y la felicidad de las personas. Tres sombreros de copa. Pero después hizo comedias más convencionales.
El teatro existencialista y social
En torno a los 50 surge un teatro que lleva a los escenarios los principales problemas existenciales del ser humano y los dramas de las clases humildes. Es un teatro realista que critica las injusticias sociales. Destacan:
Antonio Buero Vallejo (1916-2000)
Se inicia en 1949 con Historia de una escalera que supone una ruptura con los escenarios burgueses de las comedias de evasión. Y desde entonces, tiene un compromiso social con los temas humanos más universales.
Las obras de Buero Vallejo tienen unos elementos comunes:
- Los personajes tienen actitudes opuestas en el modo de afrontar la realidad. Es un teatro problemático que le muestra los problemas, pero no las soluciones.
- Son frecuentes los dramas de personajes con taras, que simbolizan las limitaciones humanas para enfrentarse con la realidad.
- El autor utiliza efectos de inmersión.
- El espacio escénico está descrito con minuciosidad.
Por otro lado, Alfonso Sastre (1926): Pertenece al teatro social y se caracteriza por una actitud de denuncia y una fuerte voluntad de renovación. Escuadra hacia la muerte. En los años 60 ambos abren el camino de una generación de jóvenes que escriben y estrenan sus obras a finales de los 50 y comienzos de los 60. Estas son algunas de las características de este teatro:
- La temática es de carácter realista.
- Los personajes son víctimas de situaciones extremas
- El lenguaje es preciso y cuidado.
El nuevo teatro experimental
Al final de los 60 y principios de los 70, algunos dramaturgos españoles inician nuevas líneas teatrales basadas en la experimentación gracias a influencias del teatro europeo más vanguardista. Consideran que en el teatro deben haber muchas disciplinas artísticas y, entre ellas, el texto es solamente un aspecto más. En los años 70 surgen compañías teatrales independientes con nuevas técnicas y lenguajes propios, en los que se potencian los elementos estéticos y audiovisuales.
El teatro en los últimos años
Este género se ve favorecido por la desaparición de la censura, las subvenciones, la creación de un Centro Teatral, importancia a las Escuelas de Arte Dramático, la aparición de nuevas editoriales, festivales de teatro, como por ejemplo en Extremadura, (Mérida, Cáceres o Alcántara de teatro), y de Danza en Badajoz. Sin embargo, el florecimiento teatral no se produjo. Las obras atraen menos debido a que hay otras actividades como el cine. En los 80 destaca Antonio Gala y en sus obras las protagonistas son generalmente mujeres y sus temas tratan sobre conflictos individuales. Los verdes campos del Edén. José Luis Alonso de Santos hace una comedia que refleja aspectos de la sociedad “actual». También, Fernando Fernán Gómez dentro del realismo, que alcanzó el triunfo con Las bicicletas son para el verano. Y finalmente, José Sanchís Sinisterra que presenta obras que reflexionan sobre la naturaleza del propio teatro. ¡Ay, Carmela!. Mientras que en Extremadura, Manuel Martínez Mediero, Miguel Murillo. Dogma de fe y Jorge Márquez.