Entendiendo el Conflicto: Naturaleza, Evolución y Métodos de Resolución


El Conflicto: Una Perspectiva Psicosocial

CONFLICTO

Tradicionalmente se ha dicho que el conflicto es intrínseco al ser humano. Está adherido a él desde que nace, como una manera de comunicarse con los otros cuando sus intereses se contraponen.

A través de los tiempos, han variado las formas y las técnicas de resolver los conflictos de acuerdo a la época histórica en la que se han ubicado. Resulta interesante observar cómo en tiempos antiguos, la fuerza y la intransigencia era la práctica más común de resolución, dando lugar a enfrentamientos que en ocasiones determinaron la vida de los pueblos.

A través de un enfoque, relevamos la importancia del diálogo y la negociación en la resolución de conflictos. A partir del análisis de casos prácticos puntuales, ponemos en evidencia los diversos actores que intervienen en estos procesos, tales como las comunidades.

Iniciar un análisis teórico del conflicto, implica tomar como premisa que las personas por su naturaleza son proclives a provocar, involucrarse, afectar y verse afectadas por determinadas situaciones, las mismas que pueden ser de distintas categorías y con diferentes implicaciones, siempre dependiendo del contexto en el cual se desarrollen los actores involucrados. La cotidianidad nos ha demostrado que todos tenemos conflictos, (en las relaciones laborales, comerciales, relaciones de pareja, en general en la cotidianidad), sin embargo; esto no implica que debemos huir de ellos o evitarlos.

Pero, sí se requiere tener la objetividad suficiente para visualizarlos, exteriorizarlos, enfrentarlos y resolverlos, pues un llamado éxito no radica en no tener conflictos, sino en cómo resolverlos.

El común de las personas no se ha preparado académica o profesionalmente para enfrentarlos, pero por sentido común de sobrevivencia, pueden resolverlos.

A pesar de esto, hay ciertos conflictos que sí requieren de una mayor preparación, esto debido a su complejidad y a una serie de factores que requieren contar con mayores herramientas y elementos que faciliten su intervención y manejo. Dentro de este análisis teórico debemos considerar aspectos conceptuales, clasificaciones, niveles, escalamiento, así como elementos relacionados con los modos de resolver conflictos.


¿Qué es el Conflicto?

Para entender el conflicto es necesario tomar como centro de estudio a los seres humanos, quienes intrínsecamente tenemos conflictos que por lo general trascienden a nuestro entorno social y que se ven reflejados en la sociedad. En otras palabras, la sociedad es el reflejo del conflicto humano que vivimos cada uno de nosotros diariamente. Éste es inmerso a la naturaleza humana y existe en todos los países y en todos los niveles de la sociedad. Siempre ha existido y siempre existirá.

El Conflicto por sí mismo, no es una fuerza negativa, es una expresión natural y diferente de una sociedad en su lucha por la justicia y su propia autodeterminación. Si se lo maneja de una forma no violenta es una fuente positiva de inmensa creatividad y progreso. En otras palabras, no es más que un aspecto intrínseco e inevitable del cambio social, porque es una expresión heterogénea de intereses, valores, necesidades y creencias que dan lugar a nuevas ideas producidas por la presión de ese cambio social.

Hay conceptos como el de Henry Pratt, que definen al conflicto como:
«Un proceso – situación en el que dos o más seres o grupos humanos tratan activamente de frustrar sus respectivos propósitos, de impedir la satisfacción de sus intereses recíprocos, llegando a lesionar o a destrozar al adversario, pudiendo ser el conflicto organizado o no, transitorio o permanente, físico, intelectual o hasta espiritual»

Sin embargo, este concepto para el manejo de conflictos es muy negativo y parecería que siendo así, jamás se podría llegar a solucionar los mismos.

De forma general, el conflicto es una contraposición y confrontación de posiciones, intereses y necesidades percibidas como incompatibles que involucra a dos o más actores dentro de su interacción social.

Sin embargo, hay que considerar distintos conceptos que amplíen la visión que tenemos dentro de la problemática social, ya que como hemos dicho el conflicto es inherente al ser humano, una realidad presente y evidente, la cual se ha dado a lo largo de la historia y seguirá presentándose dentro de la interacción de las personas.

En este sentido, no podemos seguir tomando al conflicto como una disfunción social como así lo mencionan positivistas, es decir, no tenemos que verlos como algo que no debe presentarse en la sociedad, ya que es inevitable su existencia, aún cuando en algunas ocasiones genere grandes perjuicios para la sociedad. Además, si estos son bien manejados pueden convertirse en un mecanismo de cambio social trascendental.

Evolución de la Teoría del Conflicto

La resolución de conflictos como un área de especialidad definida nace en la post-Guerra Fría. Sin embargo, es entre los años cincuenta y sesenta en plena cúspide de la Guerra Fría cuando comienza a vislumbrársele como una ciencia debido al desarrollo de armas nucleares y el surgimiento de los conflictos entre súper potencias que pusieron en riesgo la seguridad humana mundial nuevamente.

Un grupo de especialistas en diferentes disciplinas visualizaron la necesidad y la importancia de estudiar el conflicto como un fenómeno general con similares características sea en el ámbito de las relaciones internacionales, de la política nacional, relaciones comerciales, comunitarias, familiares o entre individuos. De igual manera, consideraron importante aplicar las mismas formas de aproximación para todas las distintas formas de conflicto.

Estas ideas comenzaron a ser desarrolladas por investigadores europeos y estadounidenses quienes crearon instituciones para el estudio de esta área de una manera más académica. Así mismo, se empezó a desarrollar diferentes grupos que se enfocaron en el estudio de conflictos sociales, y aproximaciones a la solución de los conflictos desde la negociación y mediación.

Para los años ochenta, las ideas sobre resolución de conflictos habían incrementado notablemente. Es así, que por ejemplo, en Sudáfrica el Centro para Estudios Inter-grupales empezó a aplicar aproximaciones que habían sido desarrolladas in situ para las confrontaciones surgidas por el apartheid con resultados impresionantes.
Con este nuevo contexto internacional, la concepción de la resolución de conflictos toma un nuevo giro, en el que se empieza a utilizar el mismo lenguaje y los organismos internacionales empiezan a desarrollar mecanismos de resolución de conflictos, así como a fundar centros de prevención de conflictos. En este sentido, el ex presidente estadounidense Jimmy Carter, inicia a nivel mundial uno de los liderazgos más activos de las organizaciones no gubernamentales sobre resolución de conflictos a través de la creación del Centro Carter.

Aproximación al Conflicto

Uno de los hábitos típicos de la aproximación al conflicto es dar una alta prioridad a la defensa de nuestros propios intereses. Para entender mejor esta característica, pondremos como ejemplo uno de los casos de conflicto más antiguos que la humanidad ha tenido: el de Caín y Abel. En un momento dado los intereses de Caín chocaban con los de su hermano y ante esta situación, Caín simplemente procedió a ignorar los intereses de Abel produciéndole perjuicios irreparables.

Utilizando esta misma lógica, la concepción común de los líderes en la historia de humanidad ha sido defender los intereses nacionales y destruir los intereses de otros cuando éstos han entrado en choque.

Como ya hemos mencionado el conflicto es aquella situación en la que las partes están en desacuerdo o tienen posiciones encontradas con respecto a la distribución de recursos materiales y/o simbólicos determinados, y actúan movidas por su percepción.

En cuanto a los elementos encontrados en el concepto antes mencionado hay que hacer énfasis en las posiciones, intereses, y necesidades, ya que dentro de las metodologías existentes para la resolución de conflictos se los considera primordiales.

Posiciones, Intereses, Necesidades

Las posiciones se las expresa como determinadas posturas, una frente a otra y que generalmente, no se prestan a discusión. Cada argumentación fijada, es cristalizada en contraposición a la otra que también es rígida y diferente sobre el mismo asunto. Según los expertos en resolución de conflictos, la raíz inicial de un conflicto está en una forma cultural de argumentar la defensa de lo propio de manera unilateral con el afán de describir cómo perciben las partes determinada situación. Sin embargo, las posiciones tienden a ocultar las causas reales y los verdaderos intereses de los involucrados. Así, es muy frecuente observar que cuando se deponen posiciones se las puede cambiar por otras.

Tras estas posiciones se encuentran los intereses, que son lo que las partes dentro de un conflicto están tratando de conseguir del otro.

Las necesidades, sobre todo cuando son biológicas son innatas a los seres humanos, las mismas que se visualizan diariamente y deben ser satisfechas. Las necesidades dentro de los conflictos sociales pueden interpretarse con un doble enfoque, por un lado se las comprende como algo que una persona requiere satisfacer mientras que por otro lado, estas, pueden fortalecer a las personas involucradas en un conflicto al punto de convertirse en un factor que los compromete y motiva a encontrar una solución.

Es importante señalar que, el elemento común que siempre está presente en las posiciones, intereses y necesidades es la percepción, la cual no es más que la forma como la persona interpreta el mundo que lo rodea o los fenómenos que intervienen en una situación determinada. La percepción que se tenga de una situación determinada es la que ayuda a definir las posiciones iniciales que cada parte tiene.

Al ser las percepciones un factor o elemento importante, generalmente la aproximación al conflicto se la hace desde el YO y desde el OTRO y de esta aproximación surgen cinco enfoques:

  1. Enfoque contencioso.- Implica una alta consideración por los intereses propios y una baja o nula consideración de los intereses del otro. Este sería en caso de Caín quien tuvo una alta consideración por sí mismo y una baja consideración por su hermano.
  2. Enfoque de ceder.- Significa tener más consideración por los intereses del Otro que por los propios.
  3. Enfoque de retiro o abandono del conflicto.- Que implica una baja consideración por los intereses de ambas partes porque se prefiere evitar el conflicto.
  4. Enfoque de transacción.- Que implica un balance o equilibrio en la consideración de los intereses de ambas partes para llegar a un acuerdo.
  5. Enfoque de solución definitiva del problema.- Implica una alta afirmación de los intereses propios pero con igual conocimiento de las aspiraciones y necesidades de la otra parte. Este enfoque genera una solución creativa y es la alternativa más recomendable donde hay una alta consideración de los intereses propios y de los intereses del otro.

Características de los Conflictos

  • El conflicto es algo natural. Como mencionamos anteriormente en todo momento y en toda etapa de la interacción social existen conflictos.
  • El conflicto involucra un problema de poder. Este tema resulta evidente ya que siempre va a existir dentro de un conflicto una parte que tenga ventajas sobre la otra.
  • La intervención de dos o más personas. Cuando se habla de los sujetos que intervienen en el conflicto no solo se debe presumir que los conflictos son interpersonales, sino que también intervienen en éstos grupos, comunidades, organizaciones, etc.
  • Un conflicto siempre es visible. Se lo puede observar y caracterizar.
  • Los conflictos se pueden originar por la escasez de posiciones o de recursos. Este elemento puede ser atribuido por ejemplo a la exigibilidad de un derecho por el acceso a ciertos recursos naturales.
  • Los conflictos deben estar involucrados con la acción, deben ser dinámicos, implican un costo, todos los conflictos son distintos y necesariamente deben tener un fin.
  • La contraposición de intereses. La pugna por intereses es lo que hace que el conflicto se constituya como tal, es donde las partes o sujetos que intervienen encuentran la controversia.

Tipos de Conflictos

  • Conflicto Intrapersonal: interviene una sola parte (persona – naturaleza)
  • Conflicto Interpersonal: se da entre dos o más personas, a este tipo de conflicto se lo conoce comúnmente como conflicto multipartes
  • Conflicto Intragrupal: se da entre dos o más grupos.
  • Conflicto Real: surge de la incompatibilidad de objetivos.
  • Conflicto Irreal: se da por la necesidad de liberar tensiones.
  • Conflicto Latente: se da por aspectos subyacentes de los actores (afectivos – emociones).
  • Conflicto Inducido: se da por el desequilibrio de las relaciones de poder.
  • Conflicto Institucionalizado: se da por comportamientos previsibles y reglas explícitas (negociación colectiva).
  • Conflicto Secundario: no se enfrentan directamente los actores sino sus representantes.
  • Conflicto Cultural: abarca valores y aspectos culturales (religiosos, ideológicos) además que pueden tener características de los tipos y niveles de conflictos antes anotados.
  • Conflicto Institucional: son provocados y regulados por la cultura con el fin de mantener el orden
  • Conflicto Histórico: procuran resolver una controversia real y profunda de la sociedad (conflictos raciales)
  • Conflicto Extremo: conflicto violento (guerras)

Escalamiento de Conflictos

Es común apreciar que un conflicto de menor categoría o de baja intensidad puede escalar a una etapa superior, es decir que un conflicto con poca importancia puede llegar a convertirse en uno grave como resultado de acciones u omisiones de las partes o actores involucrados.

Existen cuatro elementos que provocan que un conflicto escale:

  • Imagen Refleja: Cada una de las partes considera que la posición de la otra es exacta, totalmente hostil y opuesta a la otra; en consecuencia, ambas partes ignoran por completo las oportunidades de acomodo o acuerdo que se les presenta.
  • Interpretaciones diferentes de los mismos hechos o conductas: En efecto, las partes ven sólo lo que desean observar; están a favor de cualquier interpretación que consideren que es más compatible con sus fines predeterminados.
  • Doble estándar: Las partes juzgan sus propios actos a través de estándares distintos a los que usan para juzgar los actos de sus adversarios.
  • Posiciones polarizadas en un solo tema: Las partes se concentran en un solo tema y consideran que los otros representan los extremos opuestos respecto a ese tema; por ello, consideran que el conflicto tiene una sola fuente, y consideran también que su tarea es obligar a sus adversarios a rendirse incondicionalmente.

Cuando en el desarrollo de un conflicto intervienen estos elementos, éste puede escalar hasta el punto de que se vuelva incontrolable. Sin embargo, se debe considerar que así como los conflictos escalan, fruto de las actuaciones de las partes éstos también pueden descender por los mismos motivos, sobre todo cuando los actores visualizan y reconocen la existencia de intereses mutuos y no consideran un tema único sino una serie de opciones y alternativas para solucionarlos.

Modos de Resolución de Conflictos

En la resolución de conflictos, el objetivo principal es encontrar una solución al conflicto. La pregunta inmediata que nos hacemos es: ¿cómo?, es decir de qué manera, cuál es la forma o el camino apropiado que se debe buscar para intervenir en el conflicto. Lo que se pretende es buscar el modo idóneo que nos permita involucrarnos dentro de una situación delicada, por lo que el poder elegir el modo se transforma en una decisión fundamental. Tomando en cuenta, además, que ningún conflicto es igual, el modo que elijamos deberá también adaptarse a las circunstancias propias de cada caso.

Esto hace pensar que antes de tomar una decisión sobre qué modo se empleará para resolver el conflicto, debemos contar con todos los elementos que nos permita tomar una decisión adecuada sobre qué modo es el que emplearemos.

Al tomar en cuenta la complejidad y el significado de un conflicto podemos mencionar que existen dos modos o formas de resolverlos: modos formales y modos no formales o alternativos.

Modos Formales

Al hablar de modos formales nos referimos a las vías procesales a través de las cuales se resuelven conflictos, entre las que podemos encontrar la vía judicial sea civil, penal o constitucional y la vía administrativa a través de procedimientos que han sido elaborados, estructurados, reglamentados e instrumentados por las distintas autoridades e instituciones competentes gubernamentales.

Vía Judicial

Ésta se ejecuta a través de órganos Estatales de administración de justicia como son los jueces, tribunales y cortes de justicia. En esta vía el Estado es uno de los actores con mayor relevancia ya que éste es el encargado de la administración de justicia y además de buscar los mecanismos necesarios para el cumplimiento y ejecución de sus resoluciones a las cuales las partes involucradas deben someterse obligatoriamente.

Vía Administrativa

La vía administrativa es también un modo formal para resolver conflictos, ésta acciona a través de entidades e instituciones estatales, como ejemplo esta vía se ejerce a través de Ministerios.

Por ejemplo, es común que un Ministerio de Medio Ambiente reciba denuncia sobre contaminación de aguas o tala ilegal de bosques, etc., ámbito en el cual es competente para conocer y resolver sobre el caso.

Modos Alternativos

Los modos no formales o también llamados alternativos, son mecanismos en base a los cuales se trata de resolver conflictos, sin embargo el hecho de que se los considere informales no quiere decir que nuestra legislación no los reconozca, la diferencia es que los procedimientos en estos modos son flexibles y realzan el papel protagónico de los actores del conflicto.

La Negociación

En la negociación las partes aceptan sentarse a la mesa a negociar cómo resolver su conflicto, sin regulación jurídica directa a la que se sometan. El proceso puede ser más o menos elaborado y por lo general puede existir un facilitador que cuente con el reconocimiento de las partes para jugar ese papel.

La Mediación

Otro método de solución de conflictos es la mediación, método que sí se encuentra contemplado por nuestra legislación. Sobre este método, se menciona que: La mediación es un procedimiento de solución de conflictos por el cual las partes, asistidas por en tercero neutral llamado mediador, procuran un acuerdo voluntario, de carácter extrajudicial y definitivo, que ponga fin al conflicto.

Para ser parte de este proceso no existen restricciones, sin embargo, existen ciertos requisitos para participar en una mediación.

  • Existencia de acuerdo entre las partes para asistir a la mediación o una solicitud a un centro de mediación autorizado de una de las partes.
  • Capacidad para respetar.
  • La mediación debe versar sobre materia transigible. (Tolerancia)
  • Voluntad para participar del proceso (no es obligatorio).

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