La Crisis de 1917
Antecedentes
Al comienzo de la Primera Guerra Mundial en 1914, España adoptó una postura de neutralidad. Esto repercutió en la economía española:
- Minería e industria se vieron favorecidas por la demanda de países en guerra.
- Los precios de productos agrícolas crecieron por la dificultad de importaciones.
- La balanza comercial fue favorable por primera vez.
- Grandes industriales y comerciantes obtuvieron beneficios.
La neutralidad pudo ser una oportunidad para transformar las estructuras socioeconómicas, pero el capitalismo español no consolidó el desarrollo industrial ni aumentó el poder adquisitivo. Las ganancias se concentraron en pocos, acentuando las diferencias sociales.
La Crisis
En 1917 estalló la mayor crisis del reinado por varias circunstancias:
- El inminente final de la Primera Guerra Mundial agudizó las dificultades económicas.
- Problemas en el Ejército por desacuerdos entre africanistas y oficiales peninsulares.
- Protesta de parlamentarios descontentos con la política de Eduardo Dato.
En agosto, UGT y CNT convocaron la primera huelga general de la historia de España. La clase política, con ayuda de las Juntas de Defensa, reprimió el movimiento.
Consecuencias
El Régimen de la Restauración se debilitó desde 1917 hasta el golpe de Estado de 1923. La inestabilidad, el pistolerismo y los conflictos sociales, agravados por el paro y la influencia de la revolución bolchevique, dificultaron la convivencia.
La Constitución de 1931
Fue avanzada para su tiempo, definiendo a España como una república de trabajadores. Principios:
- Estado integral con posibilidad de autonomías.
- Poder legislativo en las Cortes, ejecutivo en el gobierno y judicial en jueces independientes.
- Amplia declaración de derechos y libertades.
- Igualdad ante la ley, educación y trabajo.
- Expropiación por utilidad social.
- El trabajo como obligación social.
- Voto desde los 23 años, incluyendo a las mujeres.
- Estado laico.
- Matrimonio civil y divorcio.
- Falta de consenso entre izquierda y derecha.
La República del Frente Popular
La izquierda formó el Frente Popular con un programa común, incluyendo la amnistía para los sucesos de 1934. El Frente Popular ganó las elecciones, evidenciando la polarización del país. Manuel Azaña formó un gobierno moderado y fue nombrado presidente de la República, designando a Santiago Casares Quiroga como presidente del Consejo de Ministros.
El triunfo de la izquierda aceleró la conspiración militar derechista, liderada por el general Emilio Mola. El asesinato de José Calvo Sotelo aumentó la tensión, desembocando en la Guerra Civil Española.