1. La Restauración (1875-1902)
1.1 Alfonso XII y María Cristina
En 1875 se inició en España la Restauración, un nuevo período histórico que supuso la vuelta al trono de los Borbones en la persona de Alfonso XII, hijo de Isabel II. Fue posible gracias a la labor política realizada por Antonio Cánovas del Castillo, el jefe del futuro Partido Conservador, que logró la abdicación de Isabel II en su hijo. Para ello, Cánovas redactó un manifiesto a la nación, que el príncipe Alfonso firmó en Sandhurst. Poco después, un pronunciamiento militar del general Martínez Campos proclamaba rey de España a Alfonso XII. Tras su muerte, la Restauración se mantuvo durante la minoría de edad de su hijo Alfonso XIII, a través de la regencia de la reina María Cristina (1885-1902).
1.2 El sistema político
El sistema político de la Restauración se basó en dos pilares:
- La Constitución de 1876: Establecía una amplia declaración de derechos, que podía restringirse más o menos en función del partido gobernante; la soberanía compartida entre el rey y las Cortes; y un sistema de sufragio.
- El turno pacífico de los partidos políticos: Se basó en la alternancia en el poder del Partido Conservador, liderado por Cánovas del Castillo y heredero de los moderados, y del Partido Liberal, dirigido por Sagasta y heredero de los progresistas. Cuando el Gobierno se desgastaba, el rey encargaba formar un nuevo Gobierno al jefe de la oposición.
2. Problemas y crisis (1898-1902)
2.1 Los problemas internos
Los problemas principales del sistema de la Restauración fueron la oposición de los partidos excluidos del sistema del turno:
- Los partidos opuestos al turnismo fueron el republicano, dividido en varias tendencias; y el carlista, cuyos núcleos en el Maestrazgo y el norte fueron vencidos por el Ejército.
- El auge del movimiento obrero se inició tras el reconocimiento de los derechos de reunión y de asociación por la Constitución de 1876. El anarquismo fundó la FTRE, difundiéndose entre los obreros catalanes y el campesinado andaluz. El socialismo se difundió tras la fundación de la UGT.
- Los regionalismos y los nacionalismos surgieron como reacción frente a la política centralista de la Restauración. El nacionalismo catalán reivindicó su idioma como lengua oficial.
2.2 El «Desastre» de 1898
Se inició con una insurrección en Cuba en 1895, y otra en Filipinas en 1896, causadas por el descontento económico y la negativa española a conceder una administración autónoma. La guerra contra Estados Unidos se desarrolló en el Pacífico y el Atlántico, donde las escuadras españolas fueron destrozadas por los cruceros americanos. España se vio obligada a pedir la paz, y por el Tratado de París (1898) reconoció la independencia de Cuba, Puerto Rico y Filipinas. Estos hechos provocaron una honda crisis moral e ideológica y el nacimiento del regeneracionismo, un movimiento intelectual y político.
3. De la continuidad del turnismo a la dictadura (1902-1923)
3.1 La continuación del turnismo (1902-1917)
El turno de partidos se mantuvo hasta 1917, con Antonio Maura al frente del Partido Conservador y José Canalejas al frente del Partido Liberal. La guerra de Marruecos fue el principal problema del período. El Tratado de Algeciras (1906) permitió la división de Marruecos en dos protectorados: uno al sur, adjudicado a Francia; y otro al norte, adjudicado a España. En 1909, la movilización de los reservistas originó violentos disturbios en Barcelona, la llamada Semana Trágica.
3.2 La crisis del sistema (1917-1923)
La crisis de 1917 tuvo una triple dimensión:
- Una crisis militar, en la que el Ejército reclamó la subida de salarios y el ascenso por antigüedad y no por méritos de guerra.
- Una crisis política, en la que una asamblea de parlamentarios catalanes reclamó la creación de un estado descentralizado.
- Una crisis social, en la que los partidos y los sindicatos de izquierda convocaron una huelga general para protestar por la subida de precios.
Entre 1919 y 1923 la situación se agravó. Se sucedieron los gobiernos de concentración. Aumentó la conflictividad social, pues la crisis económica que siguió a la Primera Guerra Mundial y la influencia de la Revolución Rusa provocaron violentos enfrentamientos entre obreros y patronos. A esto se sumó el desastre de Annual en la guerra de Marruecos. La situación derivó en una grave crisis política que supuso la pérdida de autoridad del rey. Finalmente, el general Primo de Rivera dio un golpe de Estado e impuso una dictadura.
3.3 La dictadura de Primo de Rivera y el fin de la monarquía
Entre 1923 y 1925, Primo de Rivera gobernó al frente de un directorio militar, que suspendió la Constitución, disolvió las Cortes y prohibió los partidos políticos. Entre 1925 y 1930 implantó un directorio civil, incluyendo en su gobierno algunos políticos civiles. La crítica de muchos intelectuales ante la continuación del régimen dictatorial provocó la dimisión de Primo de Rivera en 1930. Pero el desprestigio del rey por su apoyo a la dictadura hizo que en las elecciones municipales de 1931, la victoria fuera para los partidos republicanos. Obligado por estas circunstancias, Alfonso XIII abandonó el país y se proclamó la Segunda República Española.
4. La Segunda República (1931-1936)
4.1 La implantación de la República
Proclamada la República, un Gobierno provisional formado por republicanos, socialistas y nacionalistas convocó elecciones a Cortes Constituyentes. Estas dieron mayoría a los partidos de izquierda, que redactaron una nueva Constitución. La Constitución de 1931 establecía una amplia declaración de derechos, la soberanía popular, la división de poderes, el sufragio universal para ambos sexos, la autonomía regional y la separación Iglesia-Estado. Fue elegido presidente Niceto Alcalá-Zamora y jefe de Gobierno, Manuel Azaña. La Segunda República se divide en tres etapas: el Bienio Reformista, el Bienio Conservador y el Frente Popular.
4.2 El Bienio Reformista
El gobierno de Azaña, formado por una coalición de republicanos y socialistas, realizó importantes reformas:
- Se redujo el número de oficiales del Ejército.
- Se aprobaron el estatuto de autonomía de Cataluña y los proyectos de estatuto del País Vasco y Galicia.
- Se impulsó una reforma agraria.
- Se mejoraron las condiciones laborales de los obreros, subiendo los salarios.
- Se limitó la influencia de la Iglesia, autorizando el matrimonio civil y el divorcio.
- Se impulsó la educación pública.
Estas reformas provocaron movilizaciones de la derecha y de la izquierda que pensaba que se habían quedado cortas. Azaña dimitió en 1933, lo que obligó a convocar elecciones en noviembre de ese año.
5. Del Bienio Conservador al Frente Popular (1933-1936)
5.1 El Bienio Conservador
El gobierno conservador recayó en el Partido Radical de Centro, presidido por Alejandro Lerroux, apoyado por partidos de derecha. La presencia de la CEDA en el Gobierno provocó la Revolución de Octubre de 1934:
- En Asturias, los mineros protagonizaron una revolución social y sitiaron Oviedo durante dos semanas. La revuelta fue duramente reprimida por el Gobierno.
- En Barcelona, el Gobierno autónomo proclamó la República catalana dentro de la República española. Tras ser sofocado el movimiento, se disolvió la Generalitat.
El descontento obligó a convocar elecciones en 1936. La izquierda se presentó a ellas unida en una coalición, denominada Frente Popular, y logró la victoria.
5.2 El Frente Popular
El nuevo gobierno, presidido por Santiago Casares Quiroga, reanudó las reformas. Se produjo una creciente radicalización política de la izquierda y de la derecha, se fundó Falange, un partido ultraderechista. La violencia política se manifestó en atentados y choques callejeros entre falangistas, comunistas y anarquistas (Primavera Trágica). Los sectores más conservadores del Ejército decidieron impedir la aplicación del programa del Frente Popular y acabar con la República mediante un golpe de Estado, dirigido por Mola.
Comentario:
- Lectura atenta.
- Clasificación: Histórico e historiográfico.
- Contexto espacio y tiempo: Encuadrar fecha. Repaso general de 4 o 5 líneas.
- Autor o autores: Saber el autor o grupo social.
- A quién se dirige y cuál es el objetivo del texto.
- Tema del texto: Puede ser económico, social, político, cultural, religioso.
- Explicación de los términos o palabras.
- Identificación de las ideas principales del texto.
- Comentario propiamente dicho: Explicaremos brevemente y resumiremos.
- Responder a las cuestiones que se formulan.