Características Psicológicas del Niño según Wallon
Wallon distingue 5 etapas:
Etapa Impulsivo-Emocional (Primer Año)
- Primer mes al sexto: predominan los movimientos.
- Sexto mes: las emociones contribuyen al desarrollo del niño, aunque Wallon las considera de forma distinta a Freud.
- A partir del sexto mes: aparecen conflictos y antagonismos.
- Después de los 12 meses: aumenta la observación e investigación.
Etapa Sensorio Motora-Proyectiva (De 2 a 3 Años)
Se divide en dos:
- Desde 13 a 14 meses (Periodo Sensorio Motor): surgen los gestos, hay reconocimiento de objetos, manipulación de objetos distintos (aquí podemos compararlo con Piaget) de su cuerpo y explora más el espacio. Empieza la imitación y el juego del “como si”.
- De 25 a 36 meses (Periodo Proyectivo): el niño proyecta sus sentimientos y pensamientos a través de palabras y gestos. Los juegos son de mímica y dramatización.
Etapa de la Crisis del Personalismo (Alrededor de los 3 Años)
Motivada por el descubrimiento del yo, tiene 3 fases:
- Fase de Oposición o Negativismo: predominio del «no» y situación conflictiva por defender su autonomía y su yo.
- Fase de Gracia: el niño busca aproximarse al adulto a través de la seducción. Aparecen los celos entre hermanos.
- Fase de Imitación: el niño refuerza su autonomía imitando y supera conflictos anteriores (imitación Piaget).
Se producen avances intelectuales con el sincretismo o capacidad de síntesis. Aparece la inteligencia práctica. Progresa el lenguaje, la motricidad y aparece el juego de ficción (igual que el juego simbólico de Piaget).
Etapa Categorial (De 6 a 11 Años)
Destaca por:
- Avances afectivos: concepto más completo de sí mismo, participación en grupos.
- Avances intelectuales: capacidad para no confundir la cualidad invariable, aumenta la capacidad de síntesis.
Características Psicológicas del Niño según Freud
Freud describe 5 fases:
Fase Oral (Primer Año)
Se llama así porque la boca es el principal vínculo de contacto con el mundo exterior. Se subdivide en:
- Etapa Narcisista (Los dos primeros meses): identificación del mundo exterior y yo de la madre, que se confunde con su yo. El niño reacciona antes frente a las personas que ante las cosas.
- Etapa Preobjetal (Hasta los 7 meses): reconoce objetos. Mucha protección de la madre. Aparece la sonrisa. La madre presta su yo y lo confunde, aunque empiezan a aparecer características propias.
- Etapa Objetal o de la Angustia (De los 8 (Spitz) a los 12 meses): angustia ante la no presencia de la madre, ahora se denomina apego. Se equilibra el yo de la madre, el suyo y el del mundo.
Fase Anal (2 y 3 Años)
Se llama así porque el ano es el principal vínculo de relación y se basa en el placer de retención y de expulsión de esfínteres. El niño obedece por temor a perder el amor de la madre. Si la relación ha sido mala habrá conflictos y el niño retiene, lo que le proporciona más placer o se hace fuera de lugar y de tiempo.
Fase Edípica o Fálica (3 a 7 Años)
Se llama así porque aparece el complejo de Edipo o de Electra:
- Inclinación afectiva hacia el padre de distinto sexo y hostilidad hacia el otro. Las relaciones son de amor y odio.
- Se supera con la identificación hacia el padre del mismo sexo y con la sublimación del instinto de placer por el de la realidad, es decir, por la estructura del Yo.
- Hay una evolución afectiva: sentimientos de culpa, miedo a la autoridad.
- También aparecen actitudes agresivas, de rivalidad, de competencia, de conquista hacia el padre del mismo sexo.
Fase de Latencia (7 a 11 Años)
Se llama así porque los instintos permanecen latentes, aunque existen y se manifiestan de distinta forma antes del gran estallido de la adolescencia.
La falta de organización del instinto sexual es lo que diferencia la sexualidad adulta de esta etapa y de las anteriores, aunque la sexualidad está presente también. Freud reconoce la existencia de una sexualidad infantil, pero habla de estrechos vínculos afectivos hacia los adultos y de amistad con amigos o compañeros. También establece grados entre la sexualidad normal y perversiones, que es lo que puede derivar en conflictos sexuales después en la adolescencia y madurez. Para Freud, según Laplanche y Portalis, la sexualidad en esta etapa es “una serie de excitaciones y de actividades existentes desde la infancia, que producen un placer que no puede reducirse a la satisfacción de una necesidad fisiológica ni al placer dependiente del aparato genital”. En este sentido, Freud ha sido mal interpretado.
Aumenta la socialización y la importancia del grupo y sus normas.