Capítulo 1: La Evaluación de Proyectos y su Impacto Social
La evaluación de proyectos aborda la asignación eficiente de recursos, lo que conlleva una responsabilidad social que afecta a toda la sociedad. Se deben emplear patrones y normas técnicas para garantizar que el destino de los recursos sea óptimo. Los proyectos surgen de necesidades individuales y colectivas, considerando la realidad social, cultural y política del entorno. La evaluación proporciona información crucial para la toma de decisiones, y es recomendable realizar múltiples evaluaciones para determinar la rentabilidad del proyecto, la capacidad de pago del inversionista y el impacto social de la inversión. La evaluación social busca cuantificar los costos y beneficios sociales directos, indirectos e intangibles, así como las externalidades generadas por el proyecto.
La Planificación como Puente entre el Presente y el Futuro
La planificación es un proceso mediador entre el futuro y el presente. Todo proyecto debe planificarse a futuro para determinar las variables cuantitativas y cualitativas que influyen en su desarrollo. La puesta en marcha de los programas se realiza mediante la elaboración de proyectos, considerando su viabilidad económica y el cumplimiento de los objetivos establecidos. El proyecto es un medio para alcanzar los objetivos generales del plan de desarrollo y abordar los problemas sectoriales. El preparador y evaluador deben trabajar con neutralidad respecto a las políticas de contexto, independientemente de su posición personal.
Viabilidad Comercial: Análisis del Mercado
La viabilidad comercial implica analizar todos los entes relacionados con el proyecto. El estudio de mercado se divide en cinco áreas clave:
1. Análisis del Entorno
Se utilizan metodologías como FODA y Porter para analizar la estructura de la industria y el entorno competitivo.
2. Análisis de la Demanda (Consumidores)
Se estudian las características de los consumidores, incluyendo instituciones, individuos, familias, nivel social, sexo, edad, cultura y ubicación geográfica.
3. Análisis de la Competencia (Oferta)
Se analizan los competidores directos e indirectos, considerando factores como costos de producción, flexibilidad tecnológica, expectativas de los productores, barreras de entrada, precios de bienes relacionados y capacidad adquisitiva.
4. Distribuidores (Comercialización)
Se evalúan los canales de distribución y los intermediarios que conectan el producto con el consumidor.
5. Análisis del Mercado Proveedor
Se estudian los proveedores de insumos y materias primas.
Estrategia Comercial: Las 4 P’s
La estrategia comercial representa un conjunto de variables que la empresa puede manipular para llegar al consumidor y asegurar su fidelidad. Las 4 P’s son:
Producto
Se analizan los atributos del producto, como forma, tamaño, color, aroma, diseño, utilidad, marca, envase, calidad, servicio postventa, perecibilidad, funcionalidad y ciclo de vida.
Promoción
Se refiere a las estrategias de comunicación para influir en la conducta de los consumidores, incluyendo publicidad, degustaciones, fuerza de ventas, concursos, sorteos y rebajas de precio.
Precio
Se determina el precio del producto considerando las condiciones de competitividad del mercado.
Plaza
Se refiere a los canales de distribución que hacen llegar el producto al mercado, incluyendo mayoristas y minoristas.
Viabilidad Técnica: Tamaño y Localización
La viabilidad técnica implica la búsqueda de alternativas tecnológicas, de tamaño y de localización para el proyecto. Se analizan la factibilidad de producir el bien o servicio y el efecto de las variables en la rentabilidad. El estudio técnico debe apuntar a determinar la factibilidad y rentabilidad del proyecto.
Tamaño del Producto
Se define la capacidad de producción, considerando variables como el tamaño del mercado, los insumos, el proceso tecnológico, la localización y la capacidad financiera.
Localización
Se consideran factores como la disponibilidad y costo de mano de obra, la cercanía a fuentes de abastecimiento y mercados, factores ambientales, costos y disponibilidad de terreno, estructura impositiva y legal, disponibilidad de recursos como agua y energía, y la posibilidad de gestionar desechos.