Evolución Humana: De los Primates a Homo Sapiens


Evolución Humana: De Primates a Homo Sapiens

La Colisión de Continentes y el Clima

India continuó chocando con Asia, elevando el Himalaya. El mar de Tethys separaba África y la península arábiga. India continuó su desplazamiento hasta que África colisionó con Eurasia en la región turco-arábiga hace entre 19 y 12 millones de años (m.a.). El posterior levantamiento de montañas en el Mediterráneo occidental y la disminución global del nivel del mar causaron la desecación temporal del Mediterráneo al final del Mioceno.

Mejor indicador de los cambios climáticos: los cambios evolutivos y la distribución geográfica de las angiospermas. La gran abundancia de plantas herbáceas en este período justifica el nombre de Edad de las Hierbas. El éxito de las herbáceas fue resultado del deterioro climático durante el Oligoceno y el Mioceno. El enfriamiento y las condiciones secas causaron la regresión de los bosques y la expansión de plantas herbáceas adaptadas a hábitats abiertos y bajas precipitaciones.

El Desarrollo de los Primates

El grupo de primates se expandió con la aparición de los monos cercopitecinos (macacos, babuinos). Los homínidos Sahelanthropus, primero, y Ardipithecus, después, comenzaron a diversificarse en el este de África. Driopitecinos evolucionaron hacia los Ramapithecus, mejor adaptados a bosques abiertos y subtropicales, considerados los primeros ancestros hominoideos (primates bípedos).

Australopithecus ya caminaban erguidos. Hace 8 m.a., un cambio climático en África dividió la región ecuatorial, antes una sola área biogeográfica (con ancestros comunes de chimpancés y humanos), en dos regiones separadas por el Rift Valley, con características diferentes: selvática al oeste y menos arbolada al este. Oeste: chimpancés; este: humanos.

El clima árido con lluvias estacionales, de bosque bajo y pastizales altos, favoreció la adaptación de Australopithecus (4 m.a. hasta 1 m.a.). Postura erguida: manos libres para transportar objetos, fabricar y usar herramientas, y para las hembras, transportar crías. También ampliaba el rango de visión. Sin embargo, la ausencia de herramientas ha llevado a buscar otros factores (alimentación, desarrollo evolutivo).

Características clave de supervivencia fueron el desarrollo de un lenguaje complejo y la cooperación en grupos coordinados. Bipedestación: revolución anatómica, liberando la capacidad craneana. Las manos, liberadas de la locomoción, permitieron a los homínidos usar más el cerebro para coordinar acciones. Su habilidad manual se volvió más compleja, con mayor cooperación y comunicación.

Cultura y Evolución Cerebral

La cultura ofreció una ventaja selectiva a los individuos capaces de aprovecharla, hasta que el Australopithecus de pequeño cerebro se convirtió en Homo sapiens. Estructuras culturales, cuerpo y cerebro, crearon un sistema de retroalimentación positiva, impulsando el progreso mutuo. La interacción entre el uso de herramientas, la anatomía de la mano (pulgar oponible) y el crecimiento de la corteza cerebral es un ejemplo claro. El hombre, mediante programas simbólicos, determinó su propio destino biológico.

Seres humanos: existimos en conversaciones, y lo humano comenzó con la conversación como modo de vida. Caminar erguidos: cambio en el eje horizontal-vertical columna vertebral-cerebro. Mejor posición del cerebro: mejor respuesta neuronal al crecimiento en tamaño y capacidad, y posiblemente a una mayor capacidad de reflexión. Erguido: liberación de las manos para aprender, con gran esfuerzo mental de coordinación vista-mano, contribuyendo al desarrollo cerebral.

Cambios evolutivos: chimpancés y humanos se separaron. Los humanos sobrevivieron usando recursos biológicos y el lenguaje, a diferencia de los chimpancés. Humanos desarrollaron un sistema de comunicación mutua con lenguaje (gestos y sonidos) que podían emitir con la garganta. Vivían en grupos con funciones y acciones distintas según sexo y edad. Mejor organización a través del lenguaje obligó a un esfuerzo mental y a la reflexión. Se desarrolló la capacidad de darle sentido al entorno. El desarrollo cerebral implicó la capacidad de recordar el pasado y proyectarse al futuro. Los monos antropoides desarrollaron inteligencia, pero no suficiente para acumular pensamientos.

Cultura: sentido de las cosas. Este sentido se usó para establecer relaciones con otros de la misma especie como medio de supervivencia (Sociedad).

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