Exploración Musical de Obras Maestras: Fauré, Franck y Musorgski


Muerte de Boris Godunov de Musorgski

La escena de la muerte de Boris, el cuarto monólogo del protagonista tras la coronación, el aria de Boris y la escena del reloj del Acto II, es un momento crucial en la ópera. En ella, el zar, colapsando, llama a su hijo Feodor para una última despedida. Esta escena, popular en el repertorio de bajo cantante, ha sido interpretada por grandes figuras como Fiódor Chaliapin, Boris Christoff y Nicolai Ghiaurov.

El monólogo se divide en episodios musicales que retoman motivos conductores de la ópera. El primero, declamatorio, incluye el motivo de Feodor en los violines. El segundo (ausente en la versión de Rimski-Kórsakov), también declamatorio, alude al motivo del falso Dimitri. El tercero presenta un motivo que simboliza los peligros del reinado de Feodor. Sigue un episodio lírico: la oración de Boris por sus hijos. El clímax dramático llega con el coro ortodoxo fúnebre en crescendo, el trémolo de violines y los ruegos finales de Boris. Un sereno postludio orquestal cierra la escena, recordando el tema principal del aria de Boris del Acto II sobre un pedal de tónica en Re bemol, simbolizando el fracaso de su reinado.

Libera Me del Réquiem de Fauré

El Réquiem de Fauré destaca por su serenidad e intimismo, contrastando con el dramatismo operístico de otros compositores del siglo XIX al abordar la liturgia de difuntos católica. Este estilo coincide con el movimiento romántico literario, desde El genio del cristianismo de Chateaubriand hasta Notre Dame de París de Victor Hugo, que exaltaba la espiritualidad medieval. La restauración de Notre Dame en 1842 por Eugène Violet-le-Duc refuerza esta conexión.

El «Libera me» sigue la estructura ternaria A B A’ de la liturgia gregoriana, con una coda final. En Re menor, la tesitura del barítono (Re3 a Re4) se ajusta al modo protus auténtico. El ritmo vocal, sin agilidades ni agudos, se aleja de la ópera.

Cuarto Movimiento de la Sonata para Violín de Franck

La Sonata para violín y piano en La mayor de César Franck (1886) es una obra de cámara fundamental. Ejemplo temprano de composición cíclica, junto con el Trío con piano de Chaikovski, presenta temas recurrentes en diferentes movimientos. El cuarto movimiento retoma elementos de los dos anteriores. Esta técnica, presente en obras de Beethoven, Berlioz y Schumann, fue consolidada por Liszt y la Nueva Escuela Alemana. Vincent d’Indy la describió como «el primer y más puro modelo del uso cíclico de temas en forma de sonata», un «verdadero monumento musical».

La sonata tiene cuatro movimientos:

  1. Allegretto ben moderato: Lírico, en La mayor, forma sonata.
  2. Allegro: Tempestuoso, en Re menor, forma sonata con coda. Utiliza el tema principal del primer movimiento en la transición y un motivo de la coda reaparece en el final.
  3. Ben moderato: Recitativo-Fantasia: Principalmente en Re menor (sin armadura), rapsódico, incluye dos temas del final y retoma el tema principal del primer movimiento.
  4. Allegretto poco mosso: Combina forma sonata, canon y rondó.

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