1. Este fragmento pertenece al poema La muerte de Antoñito el Camborio, incluido en el Romancero gitano de Lorca. Se sitúa en el bloque I y se engloba en la serie de los tipos míticos masculinos. Pertenece al género de los romances tradicionales, destacándose por sus características formales y temáticas. Entre los rasgos más importantes del neopopularismo están la repetición (en el inicio del poema, a modo de estribillo) y el paralelismo, junto con el uso del verso octosílabo y la rima asonante, típicos del romance. También se observan recursos literarios como la anáfora y la aliteración que refuerzan la musicalidad y el ritmo del poeta. Con respecto a los rasgos vanguardistas, destaca la abundancia de metáforas audaces <> y la presencia de símbolos (sangre) y metonimia, como «los cuatro puñales» que añaden profundidad emocional y conectan con las tradiciones de la literatura popular, aunque con una visión renovada y realista. El hilo narrativo sería la muerte y destaca también el fragmentarismo.
2. El Romance de la luna, luna pertenece al inicio del Romancero gitano de Lorca y puede considerarse como un romance-prólogo. Este fragmento forma parte del primer bloque de la obra centrado en los asuntos gitanos contemporáneos, con una dominante presencia de personajes femeninos y la creación de los mitos de la luna y el viento. En cuanto a los componentes simbólicos, destacan elementos como la luna (antropomorfizada como la figura femenina), el aire (personificado), los animales (como la zumaya, asociada a presagios de muerte), partes del cuerpo (los ojos) y los metales (como el bronce o la fragua, símbolos de creación y destino). Respecto a los elementos míticos, el poema presenta la mitificación del gitano, una constante en el Romancero gitano, y ofrece una explicación simbólica y antropomorfizada de una realidad universal: la muerte. En este caso, la luna se convierte en un personaje que presagia y personifica el destino fatal, reforzando el tono lírico y mítico del poema.
5. El poema Prendimiento de Antoñito el Camborio forma parte del bloque uno del Romancero gitano, centrado en los asuntos gitanos contemporáneos. Se engloba en la serie de típicos míticos masculinos, creados por Lorca. En este contexto, el gitano es mitificado como símbolo de libertad y ensoñación, presentando al hombre libre que busca afirmar su individualidad, pero que inevitablemente sucumbe ante un destino trágico. Este destino en ocasiones está marcado por la pasividad, lo que puede interpretarse como una pérdida de honor, tal como se expresa en los versos «ni tú eres hijo de nadie ni legítimo Camborio». El poema aborda una rica variedad de temas, destacando el amor frustrado que aparece como una fuerza conflictiva y destructiva, la violencia y la muerte que surgen de la invasión de los derechos y el prestigio del gitano, simbolizados en este caso por la represión ejercida por la Guardia Civil, y finalmente, el destino trágico del gitano, que avanza como héroe épico, arrastrado por fuerzas oscuras hacia su final. En el caso concreto de este poema, el tema principal es la frustración que se refleja en la indefensión de Antoñito frente a la autoridad, y en el ocaso del mito del gitano, ejemplificado en los versos, «se acabaron los gitanos que iban por el monte solos!». Con ello Lorca transciende el ámbito andaluz para otorgar a su poema un significado universal.
6. El poema Romance de la pena negra pertenece al comienzo del primer bloque del Romancero gitano, centrado en los romances de protagonista femenino. Este fragmento refleja los aspectos formales característicos del neopopularismo y las innovaciones vanguardistas de Lorca. En cuanto a los rasgos neopopulares, destaca el uso del esquema métrico del romance (versos octosílabos con rima asonante en los pares), la combinación lírica y narrativa, los diálogos dramáticos (versos 9-12) y el uso de recursos como el paralelismo (versos 5-8). También conecta con la tradición literaria, como en «las piquetas de los gallos cavan buscando la aurora» inspirado en el Cantar de Mio Cid. Destaca también la respuesta eco. Por otro lado, en los rasgos vanguardistas sobresalen las metáforas «lloras, zumo de limón», el desplazamiento calificativo «yunque ahumados sus pechos» y los símbolos (Soledad Montoya, la sombra del caballo, el yunque). Además, Lorca combina lo realista y lo sensorial, logrando transmitir emociones concretas y paisajes visuales, como «el zumo de limón agrio de espera y de boca», ligado al amanecer, evidenciando la importancia de lo tangible en la creación de imágenes poéticas.