Fuentes de Energía en España
Según su origen
Fuentes de energía primarias
Las fuentes de energía primarias se obtienen directamente de la naturaleza, como el petróleo. En España, la producción de energía primaria se centró primero en el carbón, desde 1975 en la energía nuclear y, en los últimos tiempos, en las energías renovables. El consumo de energía primaria se ha basado, desde 1960, en el petróleo y, hoy en día, en el gas natural. La relación entre producción y consumo es muy baja y requiere costosas importaciones.
Fuentes de energía secundarias
Las fuentes de energía secundarias son las obtenidas de la transformación de las fuentes de energía primaria, como la gasolina. La producción de energía secundaria se centra en los productos petrolíferos y en la electricidad.
Según su uso/duración
Fuentes de energía no renovables
Proceden de recursos que se agotan o que no se regeneran a un ritmo superior al de consumo. Son energías contaminantes. España no tiene yacimientos, de manera que se ve obligada a importar estas materias, lo que supone una enorme dependencia del exterior. Las no renovables son las más utilizadas.
Carbón
Formado por la descomposición de restos vegetales durante millones de años. Es un combustible fósil. Su calidad y poder calorífico dependen de la antigüedad de este proceso: es mayor en los carbones de la era primaria que en los de la era secundaria. El carbón es una energía tradicional porque fue esencial durante la Revolución Industrial. La producción de carbón se ha ido reduciendo desde 1990. La producción se localizaba en trece cuencas, destacando la asturiana-leonesa, la de Teruel y la de Puertollano. A partir de 1990, se produjo una dura reconversión que se materializó en el cierre de minas y en la creación de ayudas para promover actividades alternativas en las zonas afectadas. En 2018 se cerraron todas las minas y en 2019 solo se extrae carbón de la mina de San Nicolás (Asturias). El destino del carbón era la industria siderúrgica y cementera, y la producción de electricidad en centrales térmicas. El consumo de carbón ha disminuido, sustituido por el gas natural y por el cierre de centrales térmicas.
Petróleo
Formado por la descomposición de animales y plantas que vivieron hace millones de años en un medio marino o lacustre. El destino del petróleo es la obtención de derivados en refinerías para su uso en el transporte y la industria. La producción de petróleo en España es insignificante y solo se limita a los yacimientos de la plataforma continental de Tarragona. Se importa de Oriente Medio, África, América Latina y Europa. Dado que el petróleo se importa por mar, la mayor parte de las refinerías y las petroquímicas se localizan en la costa, salvo Puertollano. El consumo de petróleo creció desde 1960, aunque se aprecian algunas fluctuaciones relacionadas con las crisis de 1980, 1991, 2008 y la COVID-19. Hoy en día, el petróleo ocupa el primer lugar en el consumo energético de España. Se prevé un descenso debido a su sustitución por el gas en la generación de electricidad y en las calefacciones. También influirá en esta reducción los cambios que se están produciendo en el transporte gracias al incremento del uso de biocombustibles, a la mejora de la eficiencia de los motores y al desarrollo del automóvil eléctrico.
Gas Natural
Se encuentra en yacimientos subterráneos, muchas veces asociado al petróleo. El destino del gas es la obtención de derivados en la industria petroquímica, el uso calorífico en la industria y los hogares, y la producción eléctrica en centrales térmicas. La producción interior es insignificante y se centra en los yacimientos del golfo de Cádiz. Es necesario importar gas de Argelia, Nigeria, Qatar o Noruega. La importación se realiza en forma líquida a través de buques metaneros y en forma gaseosa a través de los gaseoductos que conectan con los yacimientos internacionales, como el de Argelia a través de Tarifa. El consumo de gas, iniciado en 1969, se ha ido incrementando por su precio más bajo, su poder calorífico y su menor efecto medioambiental. Desde el año 2005 presenta ciertas fluctuaciones por la aportación de las renovables y los efectos de la crisis de 2008 y la COVID-19. Las previsiones apuntan a un descenso en el consumo de gas.
Energía Nuclear de Fisión
Su destino principal es producir electricidad en 7 centrales nucleares. Su localización responde a decisiones políticas. La oposición social por el miedo a accidentes no ha dejado de crecer. También se emplea en medicina. La producción se realiza gracias al uranio importado de Níger, Rusia, Australia y Namibia. El consumo y la producción se mantienen estabilizados desde 1987. El futuro de la energía nuclear es incierto.
Energía Nuclear de Fusión
Está en experimentación. Consiste en la unión de isótopos ligeros de hidrógeno. El problema es que la fusión requiere temperaturas de cien millones de grados centígrados. España cuenta desde 1998 con una instalación experimental en Madrid para investigar cómo obtenerla.