Funciones del Museo II: Comunicación
Las Exposiciones en el Museo
El sistema expositivo, que incluye el departamento de comunicación, las publicaciones y la biblioteca, es fundamental para que el museo se comunique con el público y se convierta en un centro cultural. Las exposiciones son la imagen del museo y la forma de diseñarlas, junto con la temática que abordan, es la manera de conectar con los visitantes.
Las exposiciones pueden ser permanentes o temporales, estas últimas a menudo son itinerantes. Suelen contar con material anexo como gráficas, dípticos, esquemas y fotografías para informar al visitante. Entre las ventajas de las exposiciones se encuentra el encuentro del visitante con un objeto desconocido o, si es conocido, la posibilidad de exponerlo de manera que aporte algo nuevo. Es importante respetar la libertad del visitante y evitar exposiciones lineales. Además, las exposiciones implican la revisión de los fondos del depósito, lo que conlleva la investigación de estos.
El principal inconveniente es el alto coste económico, que a menudo requiere ayuda externa de patrocinadores. Los traslados, catálogos, transporte y publicidad generan un gran gasto. Otro inconveniente es la ubicación; si no se dispone de salas especiales para exposiciones, es necesario montar y desmontar, quitando lo que está expuesto para poner cosas nuevas. También se deben evitar aglomeraciones, que son perjudiciales para los objetos y aumentan el peligro.
Los motivos para realizar una exposición pueden ser variados, como aniversarios, conmemoraciones o la imaginación de los comisarios. El efecto de la presentación puede tener una finalidad estética, por ejemplo, cuidar el marco para que cause buena impresión e incluso revalorice la obra. También puede ser romántica, evocando efectos teatrales. Y, por último, puede ser didáctica, donde lo que menos importa es la obra en sí y lo que más, que la presentación sea entendible y accesible.
Publicaciones
Las publicaciones pueden ser de investigación pura, como catálogos razonados sobre el propio museo o del departamento de restauración. También pueden ser de divulgación, dirigidas a un público especializado o no especializado. Además, existen publicaciones informativas, como los planos que se entregan con la entrada.
El museo debe tener mucho cuidado con los permisos que cede de sus imágenes, controlar quién va a escribir, qué se va a decir, etc. Es importante vigilar las reproducciones solitarias.
Funciones del Museo III: Difusión y Educación
El Museo como Recurso Didáctico
El museo, como centro cultural de los bienes patrimoniales de cada nación, no solo tiene la obligación de custodiar las obras, sino también de difundirlas, ya que de esta manera se incorpora al proyecto educativo de cada país. Para ello, deben contar con un departamento de educación, destinado a valorar los fondos del museo y adaptarlos a cualquier edad y nivel cultural. El quid de la cuestión es que esto es difícilmente realizable. No está estipulado quién debe desempeñar este trabajo; pueden ser especialistas (mucha información, más engorroso) o pedagogos (poca información, bien dada).
Según la ICOM, existen dos tipos de público: el visitante espectador, pasivo, y el visitante activo, o actor. La información educativa debe estar adaptada a ambos.
Mínimos de Información
- Ritmo y Forma: La presentación de los contenidos debe ser pausada o secuencial, yendo de lo fácil a lo difícil. Se debe tener conocimiento del estado de conocimiento del visitante. Lo idóneo y utópico sería que existieran varios tipos de museo.
- Elaboración de Mensajes Educativos: Se deben introducir elementos que llamen la atención, incluso si el visitante está en contra. Esto es más fácil en obras tradicionales y más complicado en ciencias u obras contemporáneas.
- Mensaje Ordenado: Se debe mostrar la idea que ha regido la exposición, tanto en la exposición como en un catálogo, mostrando cómo estaba colocado todo.
- Generalmente: El mensaje debe ir de lo conocido a lo desconocido. El límite de personas es otro dilema. Todo debe ser fácilmente legible en menos de 10 minutos, idealmente entre 5 y 7 minutos.
- Ideas Principales: Deben primar por encima de las demás.
- Departamento de Educación: Suele ser el que menos dinero tiene y se deja para lo último. Nunca tiene suficiente para realizar su cometido, por lo que se recurre a la recaudación de las asociaciones de amigos del museo, aunque obviamente solo los museos más importantes cuentan con ellas.
Actividades Didácticas
- Visitas Guiadas: A todos los niveles. Importadas a principios del siglo XX desde EE. UU. En el British Museum, por ejemplo, aún están prohibidos los grupos. Quienes apoyan los grupos quieren que su museo sea visitado, sin importar cómo. Las visitas son un medidor importante para las ayudas económicas.
- Talleres: Normalmente destinados a la infancia y a la tercera edad. Es importante tener un espacio para ellos, en lugar de utilizar el espacio del público general.
- Itinerarios por Rutas Didácticas: Para mostrar una idea, es como una pequeña exposición teórica sin alterar la disposición del museo.
- Cursos y Conferencias: Si son cursos, deben tratar aspectos nuevos o recién investigados. En museos grandes, suelen estar a cargo de conservadores; en museos pequeños, se necesitarían conservadores externos. Las conferencias pueden ser de tipo general (sobre los contenidos del propio museo) o específicas (relativas a la temática de las exposiciones temporales que se realizan). Debería ser obligatorio y deseable que no solo intervinieran personas del museo.
- Audiovisuales
- Actividades Lúdicas: Conciertos, jornadas de puertas abiertas con horario ampliado, ciclos de cine y la necesidad de utilizar la más avanzada tecnología.