Generación del 14, Novecentismo y Vanguardias
La Generación del 14 o Novecentismo representa un nuevo talante para la literatura, el arte y la realidad española. Esta generación se caracteriza por su formación académica y su actitud europeísta. Su método se basa en el rigor, la exigencia y el análisis racional. Investigaron sobre la realidad del país para rehacer la historia con criterios más rigurosos y sistemáticos. Defendieron el arte puro y cuidado sobre los aspectos formales.
Las Vanguardias, surgidas en el siglo XX, representaron una auténtica explosión creativa en Europa. Entre ellas destacan el Futurismo, el Cubismo, el Expresionismo, el Dadaísmo y el Surrealismo. Cada una de estas corrientes artísticas tenía características propias y buscaban romper con las convenciones establecidas.
Futurismo
El Futurismo exalta la velocidad, la técnica, el deporte y la fuerza. Emplea onomatopeyas, signos no verbales e innovaciones tipológicas para romper con la sintaxis tradicional.
Cubismo
El Cubismo presenta distintas perspectivas de la realidad y reivindica la dimensión plástica de la palabra. El principal representante es Apollinaire.
Dadaísmo
El Dadaísmo niega todo arte anterior y se basa en la experimentación radical y lo absurdo. Busca la novedad y el impacto del lector. El autor más destacado es Tristan Tzara.
Surrealismo
El Surrealismo es la vanguardia más importante y significativa, con un gran impacto en todo el arte posterior. Defiende la libertad del creador y fue influenciado por las teorías de Sigmund Freud.
Expresionismo
El Expresionismo se caracteriza por la deformación grotesca y exagerada de la realidad. Ahonda en temas como la guerra, la violencia y la angustia.
Franquismo
El franquismo atravesó tres etapas: el Primer franquismo (1939-1959), la Consolidación y desarrollismo (1959-1969) y la Crisis del franquismo (1970-1975). Durante estas etapas, el régimen franquista se caracterizó por el predominio de diferentes grupos en el Gobierno y por la represión política y social.
Democracia
Desde el regreso de la democracia en 1977, España ha experimentado alternancia política entre Gobiernos de centro-derecha y centro-izquierda. Las etapas políticas de la democracia se han caracterizado por la lucha contra el terrorismo, la descentralización, la modernización económica y las reformas sociales.