Generación del 27: Poesía española de vanguardia


Contexto histórico y definición

Hacia finales de la década de 1920, tiene lugar una profunda crisis económica conocida como la Gran Depresión. En España, dos acontecimientos políticos son fundamentales: el fin de la dictadura de Primo de Rivera y la proclamación de la Segunda República en 1931. Las derechas llegan al poder en 1933, paralizando las reformas. Posteriormente, la sublevación de Asturias y Cataluña es duramente reprimida, lo que profundiza la división social.

La Generación del 27 es un grupo de escritores nacidos entre 1891 y 1902, con obra publicada en 1925. Federico García Lorca es su líder indiscutible. La crítica literaria les dio este nombre por la celebración del tercer centenario de la muerte de Luis de Góngora en 1927. También se les conoce como la «generación de poetas profesores» por su actividad docente, «generación de la Revista de Occidente» por su vinculación a la publicación de Ortega y Gasset, o «generación vanguardista» por introducir las vanguardias en España.

Los diez nombres clásicos del grupo son: Pedro Salinas, Jorge Guillén, Gerardo Diego, Dámaso Alonso, Vicente Aleixandre, Federico García Lorca, Rafael Alberti, Luis Cernuda, Emilio Prados y Manuel Altolaguirre. Además, existió un grupo de mujeres intelectuales y artistas del 27, llamadas «Las Sinsombrero», que rompieron con las convenciones sociales de la España de 1930, como Concha Méndez, Josefina de la Torre o María Teresa León.

Las relaciones personales entre los miembros del grupo fueron estrechas, conviviendo en la Residencia de Estudiantes artistas como Lorca, Buñuel, Alberti o Dalí. Colaboraron en las mismas revistas, como la Revista de Occidente, y crearon sus propias publicaciones literarias. El grupo del 27 representa una excepcional unión de modernidad y tradición.

Influencias y temas

Entre sus maestros modernos destacan Ramón Gómez de la Serna, con su greguería y el ultraísmo; Ortega y Gasset, cuya Revista de Occidente dio a conocer al grupo y cuyas aportaciones sobre el arte puro son imprescindibles; y Juan Ramón Jiménez, admirado tanto por su poesía pura como por su evocación del paisaje andaluz, el romance y la canción.

En cuanto a la tradición, se inspiran en la poesía culta del Siglo de Oro y las formas tradicionales de los cancioneros y romanceros. Luis de Góngora y su culteranismo tienen un papel especial, presente también en la poesía amorosa de Luis Cernuda.

Los temas principales de la Generación del 27 son:

  • La ciudad, como expresión del progreso.
  • La juventud y la vida.
  • La naturaleza, que proyecta el estado de ánimo del autor.
  • El amor en plenitud, libre y despojado de prejuicios.
  • El compromiso con la modernidad, con sus amigos y el político y social.

Etapas de la Generación del 27

Primera etapa (1918-1929)

Se distinguen tres tendencias:

  1. Poesía de primera vanguardia: Atracción por el creacionismo y el ultraísmo. Destaca Imagen (1921) de Gerardo Diego.
  2. Poesía pura: Intelectual, desprovista de anécdota y sentimiento, con métrica clásica. Destaca Cántico (1928) de Jorge Guillén.
  3. Tendencia neopopular: Inspirada en el folclore andaluz y la poesía tradicional del Siglo de Oro. Poemas en versos cortos, rimas asonantes, romances o canciones de estilo popular con estribillo. Destaca Marinero en tierra (1925) de Rafael Alberti.

Segunda etapa (1929-1939)

Comienza con el surrealismo, movimiento que pretendía crear una superrealidad uniendo inconsciente y consciente. Su base política es el marxismo. En esta etapa, la poesía del 27 alcanza su máxima altura. Son libros imprescindibles Sobre los ángeles (1928) de Rafael Alberti y Poeta en Nueva York (1929) de Federico García Lorca. En la poesía neorromántica, influida por Bécquer y la poesía pura, destaca Pedro Salinas, que concibe la pasión amorosa como una experiencia intelectual en La voz a ti debida. A mediados de los años 30 aparece la poesía social y política, que manifiesta la conflictiva realidad del momento. Los poetas del 27 adoptan posturas a favor de la República, sobre todo Rafael Alberti con El poeta en la calle.

Tercera etapa (a partir de 1939)

Se divide en dos vertientes:

  1. Poesía clasicista: Gerardo Diego representa esta vuelta al soneto y al estilo del Siglo de Oro. Destaca su obra Alondra de verdad (1941).
  2. Poesía desarraigada o existencial: Los poetas en el exilio alternan la nostalgia por la patria y la condena de la guerra, como Salinas, Guillén o Alberti. En España, Dámaso Alonso y Vicente Aleixandre muestran desazón existencial y marcan el camino para los jóvenes poetas de posguerra.

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