1. La Generación del 98: Definición y Características
Se denomina así a un grupo de escritores que comenzaron su carrera literaria al comenzar el siglo XX y volcaron en sus textos sus preocupaciones filosóficas y sus reflexiones sobre la realidad española de la época. Una cuestión fundamental que se ha planteado la crítica es hasta qué punto se trata de una generación literaria o si solo es un grupo. Para intentar contestar a esta cuestión, a menudo se recurre a la obra de Julius Petersen, Las generaciones literarias (1930), en la que enuncia los llamados “requisitos generacionales”, condiciones que ha de cumplir toda generación para ser considerada como tal. Estos requisitos son los siguientes:
- Formación intelectual semejante.
- Contactos personales entre los miembros de la generación.
- Acontecimiento generacional, común a ellos, a partir del cual se considera que se inicia un camino más o menos unitario. En el caso de esta generación, el nombre viene dado por el llamado Desastre del 98, la pérdida de las últimas colonias americanas, que produjo en España una gran crisis social, política y económica.
- Estilos literarios semejantes, y opuestos a los de generaciones anteriores. Esto ha de suponer una cierta reacción en contra del estilo impuesto en épocas anteriores.
A principios de siglo, el trío formado por Azorín, Pío Baroja y Ramiro de Maeztu constituyó un grupo más o menos homogéneo que fue llamado “Grupo de los Tres”, y que inicialmente cumplía los requisitos antes mencionados. Por eso se considera el núcleo más importante de esta generación.
2.2. Modernismo y Generación del 98:
Mientras que el Modernismo es un movimiento reflejo de las corrientes espirituales e históricas de Europa, y posee una significación más literaria, más formal, la Generación del 98 tiene, tal vez, un significado más espiritual e histórico, reflejo de la crisis nacional a partir de la pérdida de las colonias.
Los integrantes de la Generación del 98 son:
- Miguel de Unamuno
- Pío Baroja
- José Martínez Ruiz, “Azorín”
- Antonio Machado
- Ramón del Valle-Inclán
En 1902 se publicaron cuatro de las novelas más importantes de diferentes autores:
- La voluntad, de Azorín
- Sonata de otoño, de Valle-Inclán
- Camino de perfección, de Baroja
- Amor y pedagogía, de Unamuno
2.3. Caracteres del 98
A. Preferencias Literarias y Tradiciones
Los autores del 98 reivindican a autores de nuestra historia literaria que estaban un poco olvidados por las generaciones anteriores: así, obras y autores de la Edad Media como el Poema de Mío Cid, Berceo o el Arcipreste de Hita, y clásicos como Fray Luis, Quevedo o Cervantes. De los autores contemporáneos prefieren a Larra (que anticipó la visión crítica de España) o a Galdós (aunque hubo otros noventayochistas que criticaron mucho a don Benito, como es el caso de Valle: “Don Benito el garbancero”).
B. Novedades en la Lengua Literaria
- Sobriedad de estilo, sencillez. Voluntad antirretórica.
- Cuidado en la forma (antiprosaísmo).
- Gusto por el léxico popular y tradicional.
- Subjetivismo, sobre todo en Azorín (los “primores de lo vulgar”).
C. Temas más Importantes
El problema de España: Todos hicieron críticas a la situación de crisis (política y moral) que vivió la España finisecular. Exaltan la vida sencilla y espontánea del pueblo.
Anhelo de europeización: Propugnan la apertura de las costumbres españolas hacia Europa, que ha de conciliarse con una defensa de las tradiciones nacionales. Ambas tendencias, para ellos, no son incompatibles.
Importancia del paisaje: Las tierras de España, sobre todo de Castilla, se exaltan de forma lírica. Asimismo, se reivindican las costumbres de los diferentes pueblos, así como la vida cotidiana de las gentes (intrahistoria) más que los grandes acontecimientos – Unamuno-.
3. Dialectos del Castellano o Variedades Geográficas
Llamamos dialectos a las variedades o diferencias existentes en una lengua según las regiones geográficas. Pueden establecerse dos tipos de dialectos del español:
- Uno, motivado por circunstancias históricas (dialectos históricos).
- Otro, causado por la propia evolución de la lengua (dialectos meridionales).
A. Leonés – Asturiano
En la actualidad este dialecto procedente del latín vulgar es considerado como variante o modalidad del castellano. Se caracteriza por una serie de rasgos lingüísticos arcaizantes que se conservan de forma irregular en los territorios de Asturias, centro y oeste de Cantabria, oeste y noreste de León, oeste de Zamora y Salamanca, y una parte de Cáceres. Como en todas las variedades lingüísticas las zonas límite son muy difíciles de precisar, debido al contacto con otras lenguas de mayor arraigo cultural: castellano, gallego y portugués. Por ello, se suelen distinguir tres zonas:
✓ La occidental, entre el río Navia y la sierra del Rañadoiro, con influencias galaicas: presencia de diptongo “ei» y «ou», carreira, ouro.
✓ La oriental en las provincias de Santander, Zamora y la Extremadura leonesa, que presentan rasgos más castellanizados: pérdida de la f- inicial latina.
✓ La central, menos influida por esta lengua, se reduce a Asturias, donde se mantiene una mayor autenticidad en sus rasgos lingüísticos. Esta variedad se denomina bable.
Las CARACTERÍSTICAS más generales del leonés-asturiano son:
\º\ Diptongación de las vocales breves latinas e , o , tanto en sílaba libre como trabada y ante «yod»: o
\º\ No diptonga cuando le sigue una consonante nasal: ponte.
\º\Se conservan los diptongos decrecientes, «ou», «ei»: causa., touro, caldeiro (parte occidental).
\º\Uso de la terminación en «-in» como diminutivo.
\º\ Conservación de f- inicial latina: facer.
\º\ Palatización de l- y de n-: l > ll, n > ñ: llobu (lobo), ñiño (niño).
\º\ Se conserva el grupo latino -mb-: palombu (palomo).
B. EL ARAGONÉS
Esta variedad de lengua procede del antiguo romance navarro-aragonés que con la expansión del castellano redujo su ámbito y relegó su uso. Este dialecto es considerado como una variante del castellano rústico, denominado también «habla baturra». Al igual que en el leonés-asturiano, esta modalidad tiene zonas de transición entre el castellano y el catalán, siendo la parte más arcaica la comprendida entre los valles de Ansó, Hecho, Lanuza, Biescas, Sobrarbe y Ribagorza. Las características lingüísticas del aragonés son similares en algunos rasgos al asturianoleonés:
• conservación de f- inicial latina: fambre (hambre).
• diptongación de “e», «o»: tiengo.
• evolución de g-, j-, ante “e», «i» átonas: genaru, chener (enero)..
• conservación de -it-: muito (mucho).
• uso de -ll- por -j-: muller (mujer), milló (mejor).
• conserva las oclusivas sordas intervocálicas «p», “t», «k»: marito, lacuna, napo, (marido, laguna, nabo).
3. LAS VARIEDADES GEOGRÁFICAS MERIDIONALES. El castellano ha evolucionando y ha generado diferencias en las distintas zonas geográficas peninsulares. Se da el nombre de dialectos meridionales a las variedades surgidas a partir del s. XVI en el mediodía peninsular: andaluz, extremeño, murciano y canario. estos dialectos no tienen la fuerza histórica que tienen el astur-leonés o el aragonés, QUE son producto de la diversificación iberorrománica.
Las CARACTERÍSTICAS GENERALES o meridionalismos que configuran estos dialectos son:
❖ El yeísmo o alteración de los sonidos palatales «ll» e «y», que se pronuncian igual: «llano», «yelmo».
❖ La relajación de la -s final de la silaba, que se aspira. La vocal que precede a la aspiración suele pronunciarse abierta y cuando la aspiración desaparece por completo su función significativa es desempeñada por la abertura de la vocal, que se alarga. Por ejemplo: dio/dios, va/vas, etc. ❖ El intercambio de las consonantes finales r, 1, : muhel (mujer), cuelda (cuerda), sordao (soldado).
❖ La aspiración de f- inicial latina.
❖ La relajación de las sonoras intervocálicas que se eliden -vulgarismo- , por ej. vestío (vestido), deo (dedo), etc.