Glosario de Términos Clave en Urbanismo
Localización: La localización de una ciudad es su situación respecto a otros lugares. Su posición está relacionada con la función que ejerce en su entorno geográfico.
Área metropolitana: Aglomeración urbana dominada por una gran ciudad en torno a la cual se integran varios municipios; en conjunto, forman una unidad funcional que, a menudo, está institucionalizada. Ejemplo: Barcelona.
Conurbación: Conjunto de varias ciudades de importancia similar que acaban formando un continuo urbano y una unidad funcional.
Suelo urbano: Suelo construido y urbanizado que tiene calles trazadas y cuenta con suministro de agua, electricidad y alcantarillado. Es la parte de la ciudad que ya dispone de todo lo necesario para que se pueda construir en ella.
Suelo no urbanizable: Suelo que nunca podrá urbanizarse ni edificarse por ningún motivo, ya sea porque se trata de zonas protegidas por sus valores ambientales, paisajísticos, históricos, culturales, etc., o porque son áreas donde se producen riesgos naturales u otras razones de beneficio colectivo.
Valor de cambio: Precio de un bien en el mercado.
Valor de uso: Aptitud que tiene un bien para satisfacer necesidades o cumplir una utilidad.
Agentes sociales urbanos: Todas aquellas personas, grupos e instituciones que intervienen de alguna manera en la creación y producción del espacio urbano.
Gentrificación: Rehabilitación de edificios antiguos como residencias de lujo o para la instalación de actividades y comercios relacionados con la moda, el diseño, restaurantes de lujo, galerías de arte, etc.
Emplazamiento: Es el lugar físico concreto donde se encuentra una ciudad. Su asentamiento depende de la topografía del terreno y de la función que ejerce en su entorno geográfico.
Planes urbanísticos: Documentos técnicos que también tienen una dimensión política y legal, ya que en ellos se concentran todas las disposiciones y propuestas relacionadas con el crecimiento y evolución de la ciudad. En ellos se plantean los lugares, pautas y ritmos de expansión de la ciudad, así como los procedimientos para renovar los barrios ya construidos, modernizarlos o resolver sus problemas heredados. Existen cuatro tipos: condicionado, correctivo, prospectivo y normativo.
Suelo urbanizable: Terrenos que en un futuro más o menos inmediato podrán ser urbanizados y construidos hasta conformar suelo urbano y formar parte de la ciudad.
Hinterland (área de influencia): El territorio que queda vinculado a una ciudad debido a la atracción que esta ejerce.
Ciudad global: Aquella ciudad que tiene una influencia que va mucho más allá de su propia región o país y que alcanza prácticamente a todo el planeta. Aglutina una cantidad tan grande de recursos, poder político y económico que participa activamente en la dinámica global.
Edificabilidad: Volumen de construcción permitido por el plan urbanístico; cantidad de casas o pisos que se pueden construir en un terreno determinado.
Acoso inmobiliario: Presión ejercida sobre una persona o grupo de personas que ocupan legalmente una vivienda para que la abandonen.
Los Planes Urbanísticos
Los planes urbanísticos son documentos técnicos que también tienen una dimensión política y legal, ya que concentran todas las disposiciones y propuestas relacionadas con el crecimiento y evolución de la ciudad. Estos planes determinan los lugares, la pauta y el ritmo según los cuales se deben expandir las ciudades y también los procedimientos para renovar los barrios ya construidos, modernizarlos o resolver los problemas heredados. Se clasifican según su objetivo:
- Condicionado: Parte de una situación preexistente que no se puede ignorar.
- Correctivo: Busca corregir deficiencias y resolver problemas.
- Prospectivo: Planifica inversiones y acciones para dibujar un futuro posible y deseable para la ciudad, considerando las zonas, tipos y ritmos de crecimiento.
- Normativo: Ley de cumplimiento obligada para todos.
Cada ayuntamiento define la orientación del plan según las necesidades y su ideología política. Un plan urbanístico debe ser firme en sus propuestas, pero también flexible para adaptarse a cambios en la ciudad. Los planes urbanísticos deben prever los servicios y equipamientos necesarios (escuelas, aparcamientos, zonas verdes, etc.) según la población de los nuevos barrios, incluyendo normativas sobre edificabilidad, habitabilidad… Tiene mucha importancia el transporte público y desarrollo viario de la circulación privada.
La Clasificación del Suelo
En España, los planes de urbanismo clasifican el suelo en:
- Suelo urbano: Terreno ya construido y urbanizado, con calles trazadas y suministro de agua, electricidad y alcantarillado. Es la parte de la ciudad que dispone de todo lo necesario para edificar.
- Suelo urbanizable: Terrenos que, en un futuro más o menos cercano, podrán ser urbanizados e integrarse como suelo urbano dentro de la ciudad.
- Suelo no urbanizable: Terreno que no podrá urbanizarse ni edificarse en ningún caso, ya sea por estar protegido por sus valores ambientales, paisajísticos, históricos o culturales, o por presentar riesgos naturales u otras razones.
- Sistemas generales: Terrenos destinados al funcionamiento general del municipio, como redes viales, zonas verdes, equipamientos y servicios urbanos, e infraestructuras publicas o privadas.