LA FEDERACIÓN DE TRABAJADORES DE LA RegíÓN ESPAÑOLA Y “LA MANO NEGRA” Comentario de texto Localización.
Es un texto de naturaleza circunstancial, fuente primaria de estudio, materia prima de la historia, y de temática política ideológica. Está fechado en Marzo de 1883, dos años antes de la muerte del rey Alfonso XIII. Su autor es Anselmo Lorenzo, que fue uno de los principales líderes del anarcosindicalismo español, también conocido como “el abuelo del anarquismo español”. Optó por la vía de la acción sindical (frente a la acción directa1 que propugnaban otros grupos anarquistas), como procedimiento para ir avanzando en la construcción de una sociedad sin jerarquías, autoridades y sin Estado. Colaboró en la creación de la CNT. Una de sus obras escritas es “El proletariado militante”, en la que se recoge el presente manifiesto. Análisis interno. El manifiesto de la FTRE se articula en tres puntos: 1- Reclamar para los anarquistas el mismo derecho a organizarse que el que tienen el resto de las ideologías (líneas 1-3). 2-Exponer los principios básicos del pensamiento anarcosindicalista: no reglamentación de los derechos naturales del hombre (línea
4-5), colectivismo como sistema económico (líneas 6-8) y federativismo como principio político (líneas 8-11). 3-Denunciar la maniobra por la que se relacionaron las actividades delictivas de la Mano Negra con el anarquismo, táctica destinada a justificar posteriores represiones (líneas 12-20). La Mano Negra fue una presunta organización anarquista, que actuó en Andalucía a fines del siglo XIX (años 80), y a la que se le atribuyeron numerosos delitos y atentados, como la quema de fincas, cosechas y documentos. Hoy en día hay un acuerdo entre los historiadores, en señalar que fue un invento desde las altas instancias del estado y que sirvió de excusa a los gobiernos de la Restauración para perseguir al movimiento anarquista en el campo andaluz. Cierto es que en Andalucía actuó una organización denominada Mano Negra, a la que se quiso relacionar con el anarquismo. Sus numerosos delitos quedaron en parte impunes aunque, en el proceso contra 300 acusados, se dictaron varias penas de muerte. Los anarcosindicalistas negaron tajantemente la relación de los procesados con el anarquismo, y la existencia de tal grupo, considerado como una invención del Estado para poder agredirles e intentar controlarlos. Contexto histórico. La libertad que supuso la Revolución de Septiembre de 1868, permitíó la expansión y consolidación del movimiento obrero al tiempo que, al igual que en la AIT, Primera Internacional (Londres 1864, Marx y Bakunin), se formaron las dos grandes líneas de pensamiento, organización y actuación que han caracterizado al Movimiento Obrero Occidental, no sólo en el Siglo XIX, sino también en gran parte del Siglo XX: el anarquismo y el socialismo marxista.
El anarquismo se propagó rápidamente en España a partir del activismo de Giuseppe Fanelli, discípulo de Bakunin, enviado de la AIT para visitar España, logrando una gran expansión en Cataluña y Andalucía.
En 18812, la Ley de Asociaciones del gobierno liberal de Sagasta, volvíó a abrir ciertas posibilidades organizativas. Aprobada la ley, el socialismo marxista, con Pablo Iglesias como presidente, inscribirá oficialmente un partido que había fundado en la clandestinidad en 1879: el PSOE y en 1888 fundará en un congreso en Barcelona el sindicato vinculado al mismo, la UGT. Las ideas anarquistas continuaban teniendo, tanto en Cataluña como en Andalucía, el monopolio casi completo del movimiento obrero. Sus participantes se habían agrupado bajo las siglas de FRE (Federación Regional Española), posteriormente denominada FTRE (Federación de Trabajadores de la Regíón Española), desmarcándose de cualquier organización internacionalista, condición que debía incluir cualquier asociación en España para ser legalizada. Es precisamente a esta organización (FTRE) a la que quiere el autor, Anselmo Lorenzo, desvincular de estos críMenes cometidos por la “Mano Negra”.
Posteriormente, el anarquismo se separó en dos tendencias: La primera, el anarcosindicalismo, era partidaria de la acción de masas, de promover el sindicalismo y contraria a la violencia como método. La segunda propugnaba la acción directa, terrorista, de pequeños grupos que atentasen contra los pilares del capitalismo: el Estado, la burguésía y la Iglesia. La primera tendencia fundó en 1907 y 1910, respectivamente, Solidaridad Obrera y CNT. La segunda, protagonizó hasta final de siglo numerosos actos de violencia social (atentados con bombas contra El Liceo de Barcelona, en la Procesión del Corpus de 1896 en la misma ciudad, contra Antonio Cánovas del Castillo3 o contra Arsenio Martínez Campos), a los que siguió una violenta represión por parte del estado. El ideario anarquista que manifiesta Anselmo Lorenzo en el presente documento, siguió intacto a lo largo del Siglo XIX y parte del XX. Los anarquistas vieron en la II República y en la Guerra Civil la ocasión de convertir en realidad algunos sus principios. El enfrentamiento con el socialismo marxista, primero, generando una Guerra Civil dentro de la misma guerra, y por encima de todo el fracaso final de la República y el Franquismo derivado del mismo, acabaron con la fuerte implantación que esta ideología había tenido en el obrerismo español, dada la gran cantidad de agricultores y campesinos sin tierras que sufrían la miseria en la sociedad española en aquellos años. Hoy es un movimiento residual y, realmente, considerado cómo muy utópico. Tema: El movimiento obrero en la época de la Restauración y represión del mismo. Elementos opositores al sistema político de la Restauración. Leer página 227 del libro de texto, Editorial Santillana.