Decisiones y Desafíos en la Antigua Roma
Decididas estas cosas a toda prisa, les son exigidos jinetes y tropas auxiliares por Petreyo a la Celtiberia, a los cántabros y a todos los bárbaros que se extienden junto al océano; les son exigidos por Afranio.
Realizadas estas cosas, Petreyo rápidamente se presenta ante Afranio y deciden de común acuerdo llevar la guerra a Lérida a causa de su situación ventajosa. Sucede también un inconveniente repentino, pues se origina una tormenta tan grande que consta que nunca había habido en aquellos lugares mayores inundaciones. En cambio, entonces arrastró las nieves de todos los montes y desbordó las partes altas de la ribera del río y destruyó ambos puentes que Gayo Fabio había construido. Esta situación trajo grandes dificultades para el ejército.
César y la Conspiración
A partir de ahí, César, apaciguadas las guerras civiles por todo el orbe, volvía a Roma. Empezó a comportarse de forma intolerante y contra la costumbre de la libertad romana. Al hacer cosas casi tiránicas, hubo una conspiración contra él por 60 o más senadores y caballeros romanos. Así pues, César, al haber acudido entre los demás el día del Senado a la curia, fue atravesado por 23 puñaladas.
El Reinado de Calígula
Sucedió a este Calígula, el más criminal y el más funesto, y quien incluso limpió los actos vergonzosos de Tiberio. Emprendió la guerra contra los germanos y, al entrar al territorio de los suevos, no realizó nada con esfuerzo. Cometió incesto con sus hermanas; de una reconoció incluso una hija. Al mostrarse cruel, fue asesinado en el Palatino en el vigésimo noveno año de su vida.
Antonio, Cleopatra y la Batalla de Accio
Antonio, repudiada la hermana de Octaviano, se casó con Cleopatra, reina de Egipto. Fue vencido por Augusto en una batalla naval brillante e ilustre junto a Accio; este lugar está en el Epiro. Desde aquí huyó a Egipto y, perdidas las esperanzas al pasarse todos al bando de Augusto, él mismo se quitó la vida. Cleopatra, asimismo, se procuró un áspid y murió por el veneno de esta.
El Gobierno de Tiberio
Tiberio gobernó el imperio con gran cobardía, profunda crueldad, con avaricia criminal, con vergonzoso libertinaje. Pues nunca luchó en persona, dirigió la guerra a través de sus legados. Este murió en Campania para gran alegría de todos en el vigésimo tercer año de su gobierno, a los 78 años de vida.
La Fundación de Roma por Rómulo
Rómulo, una vez fundada la ciudad, que por su nombre llamó Roma, acogió una multitud de vecinos en la ciudad, a los cuales nombró senadores a causa de su vejez. Entonces, como él mismo y su pueblo no tenían esposas, invitó a un espectáculo a las naciones vecinas a la ciudad de Roma y raptó a las jóvenes de esta.
Numa Pompilio y la Religión Romana
Sucede a Rómulo, Numa, a quien los romanos propusieron por su célebre sentido de la religión. Aquel enseñó los ritos sagrados y las ceremonias y todo el culto a los dioses. Aquel estableció los pontífices, los augures y los demás sacerdocios y distribuyó el año en 12 meses. Hasta tal punto finalmente sometió a un pueblo salvaje que gobernó el Estado con sentido de la religión y con justicia.
Tarquinio Prisco y las Mejoras en Roma
Después, Tarquinio Prisco heredó el reino. Este duplicó el número de senadores, edificó el circo de Roma, estableció los juegos romanos, que permanecen en nuestra memoria. Venció él mismo también a los sabinos y entró el primero a la ciudad triunfante. Hizo las murallas y las cloacas, empezó el Capitolio. En el trigésimo octavo año de su gobierno fue asesinado por los hijos de Anco, su rey, al cual él en persona había sucedido.
La Tragedia de Lucrecia y el Inicio de la República
Pues, al haber violado su hijo a Lucrecia, una muy noble mujer y poderosísima, esposa de Colatino, y al haberse quejado esta de la injuria a su marido, a su padre y a sus amigos, se dio muerte a la vista de todos.
A partir de este momento empezaron los cónsules, dos en lugar de un solo rey, nombrados por esta causa para que, si uno era malvado, uno limitase al otro, y pareció bien que no tuvieran el poder por más tiempo que un año. Así pues, el primer año desde la expulsión de los reyes fueron cónsules Lucio Junio Bruto y Tarquinio Colatino, marido de Lucrecia.
Aníbal y la Segunda Guerra Púnica
Aníbal, dejado en Hispania su hermano Asdrúbal, cruzó el Pirineo. Abrió para sí los Alpes, todavía intransitables por esta parte. Se cuenta que condujo hasta Italia 80.000 soldados de infantería, 10.000 jinetes, 37 elefantes. Entre tanto, muchos ligures se unieron a Aníbal. Sempronio Graco trajo desde Sicilia al ejército de Rímini.
Inundaciones y Desafíos Militares
Sucede también un inconveniente repentino, pues se origina una tormenta tan grande que consta que nunca había habido en aquellos lugares mayores inundaciones. En cambio, entonces arrastró las nieves de todas las montañas y desbordó las partes altas de la ribera del río, y destruyó ambos puentes que Gayo Fabio había construido.