1.En primer lugar, para designar “un siglo” con el nombre de un personaje histórico es necesario que este siglo haya durado el tiempo suficiente para permitir el desarrollo de una generación humana. Por otro lado, también es necesario que la persona por al cual se llama el siglo haya logrado dominarlo de varias maneras y tenga influencia en los acontecimientos políticos, militares y espirituales.
2.El siglo de Augusto abarca desde la muerte de cesar el 15 de Marzo del 44 a. C. Hasta la de el mismo Augusto el 19 de Agosto del 14dC. Sin embargo, el 16 de Enero del año
27 se proclamó oficialmente el principio de una “nueva era”.
3.La importancia de acción de Octavio fue que logró presentar una profunda unidad querida y conscientemente impuesta ya que cuando llegó al poder encontró a una Roma en caos y cuando murió la dejó en un estado organizado, pacificado, armado de un ideal y de una razón de ser que los contemporáneos de Cesar habían buscado en vano.
4.Octavio nacíó el 24 de Septiembre del año 63 aC durante el consulado de Cicerón. Pertenecía una familia burguesa de caballeros y bien posicionada (su abuelo era rico). Su padre se casó una sobrina de César y cuando murió, Octavio pasó rápidamente a estar bajo la tutela de L. Marcio Filipo (segundo marido de su madre), pero Cesar se lo llevó y decidíó adoptarlo en el año 45. De esta manera recibíó la herencia (de manera política) del dictador. Octavio nacíó el 24 de Septiembre del año 63 aC durante el consulado de Cicerón. Pertenecía una familia burguesa de caballeros y bien posicionada (su abuelo era rico). Su padre se casó una sobrina de César y cuando murió, Octavio pasó rápidamente a estar bajo la tutela de L. Marcio Filipo (segundo marido de su madre), pero Cesar se lo llevó y decidíó adoptarlo en el año 45. De esta manera recibíó la herencia (de manera política) del dictador.
5.El dia en que Octavio entró en la historia (16 de Enero del 27); por una inspiración genial L. Munacio Planco le propuso al Senado que se le otorgara al nuevo señor el nombre de Augusto. Sin embargo, al principio los senadores querían concederle el nombre de Rómulo, pero este era muy peligroso y de mal agüero y resultaba imposible pretender que la República estaba restaurada y a la vez conferir honores reales al hombre a quien había dependido esa restauración. La elección del nombre Augusto, destinado a tanta gloria, fue una maniobra parlamentaria ya que tres días antes Octavio había anunciado que (restaurando la paz) ponía el poder a la libre disposición del Pueblo y del Senado romano. Sin embargo, ya había tenido demasiada influencia en Roma para que le fuera posible volver a ser un simple ciudadano. Sus servicios y sus victorias lo habían elevado por encima de los demás y era precisamente esa posición excepcional lo que se trataba de expresar con un título, con un nombre nuevo.
6.El autor lo define como un sistema constitucional cuya habilidad maquiavélica tiene por objetivo concentrar la autoridad real en las manos del príncipe, sin dejar de conservar la apariencia de la libertad republicana. Sin embargo, el no niega la propaganda ya que es imposible pensar en un periodo de tanto florecimiento intelectual sin una (propagando), por lo tanto, sin esa “propaganda” Augusto no hubiese sido lo que fue.
Años preliminares y la conquista de los espíritus
1.El panorama político después de los Idus de Marzo (cinco años de intensa actividad legislativa no podía ser abolida) era el “cesarismo”. El senado, compuesto en gran parte por hombres a quienes el mismo Cesar había llamado, asintió el deseo de Antonio. Antonio se esforzó por mantener la paz y dar tiempo para que las pasiones se calmaran. Además, tenía como aliado político a Lépido, señor de la caballería de César y aquellos que sirvieron al difunto estaban dispuestos a seguir las consignas cesarianas.
2.Octavio entra en escena cuando regresa a Roma luego de enterarse del asesinato de su padre adoptivo para realizar la apoteosis de este. Para lograr esto, Octavio intentaba explotar el culto naciente del Dios César (Los Juegos de la Vitoria de César). Durante la celebración aparecíó un cometa en el cielo y nadie dudo que ese prodigio no hubiese sido enviado por los dioses para probar la divinidad del muerto.
3.Octavio no es fundador de una religión. Pero si tenía ciertas creencias. En primer lugar, creía en los presagios extraídos de los sueños, temía al trueno y en sus viajes se cubría con una piel de foca que lo protegía del rayo. Además, era un apasionado de la astrología y siempre se esforzaba para lograr que sus decisiones y los acontecimientos importantes coincidan con aniversarios gratos y de buen augurio.
4.La relación entre Antonio y Octavio era una en la que cada vez había más rivalidad. En un principio, los seguidores de César empezaron a dudar de Antonio, quien buscaba asegurar un mando militar por el fin de su consulado. Tras una marcha fallida sobre Roma, Octavio se atrinchera en Arezzo, mientras que Antonio intentaba arrojar a bruto para gobernar la Galia Cisalpina. Luego, el Senado reconocíó gracias a Cicerón, la legalidad de los ejércitos de Octavio y de bruto, y Antonio no fue declarado enemigo público A la vez que se buscaba someterlo al Estado. M Junio Bruto y Casio Longino en lugar de volver a Creta y Cirene, se habían apropiado de todos los recursos de Oriente. La República envió tres generales en operaciones militares victoriosas contra Antonio de los cuales sólo quedó Octavio. Finalmente, al ocupar un sitio entre ambos partidos, Octavio marchó sobre Roma con sus soldados, tres legiones del Senado y el apoyo del pueblo, consiguiendo el consulado.
5.El pueblo tan fiel como los soldados a la memoria del Dios César, elevó por unanimidad a su heredero al consulado, dándole como colega a Q. Pedio (hombre sin ambiciones). Mediante un Golpe de Estado Octavio aseguró aún más su fuerte posición entre los gobernadores rebeldes del oeste y los asesinos de Cesar. El primer acto que realizo fue condenar (por tribunal regular) a los matadores de su padre. Más tarde cerca de Bolonia se establecíó entre Antonio, Lépido y él mismo, el Segundo Triunvirato que constituía una magistratura oficial. Ellos tres en este Triunvirato tenían la misión de restaurar el Estado y asegurarle una constitución viable. El pacto de Bríndisi (firmado en el año 40 aC. Entre Antonio, Octavio y Lépido) es lo que estructura a este Segundo Triunvirato y aparecíó como el comienzo de una nueva era de paz entre los partidos políticos repartiendo el poder de cierto modo. Antonio tenia manos libres en Oriente, Octavio en Occidente y finalmente Lépido obténía el África.
6.Las bucólicas son una obra (tipo de poesías que reflejan el culto a Octavio así como cada hombre posee un elemento divino (genius)) de Virgilio. La primera habla sobre lo gentil que era Octavio y lo confiable que era y la novena habla sobre las nuevas políticas que había hecho por el campo, les había sacado tierra a los pequeños agricultores para dárselas a los grandes.
7.En las negociaciones que Tarento entre Antonio y Augusto se establecíó que el triunvirato se prolongaría durante cinco años más (hasta el 33 aC. Y que Antonio le cedía, a su, en ese momento colega, 120 navíos.
8.Octavio comprendíó que por medio de confiscaciones y repartos de tierra le era posible crear, en la misma Italia, una burguésía nueva en que apoyar su popularidad de modo duradero. Sin embargo, para asentar una verdadera autoridad no bastaban las aclamaciones inconstantes de la plebe urbana devota de los manes de César y los reveses sufridos en la lucha contra Sexto Pompeyo (dueño de lso mares) habían provocado motines en varias ocasiones y mostrado el peligro de apoyarse exclusivamente en el populacho. Para invertir esta situación debía reconciliara Italia con Roma y lo hace mediante las Geórgicas (poema raro de Virgilio donde se cantan las maravillas de la agricultura (extemporánea)). Por otro lado, Antonio encabezó una expedición contra los partos, la cual fracasó.
9.Octavio tenía que ampliar a toda costa las bases del nuevo régimen y como los sobrevivientes de los grandes familiares manténían con obstinación su enojo hacia él, este se volvíó hacia la burguésía de las pequeñas ciudades italianas como bases sociales de apoyo.