Fertilización en agricultura ecológica
La agricultura ofrece una solución lógica y con fundamento científico que radica en la
alimentación activa del suelo a través del suministro de materia orgánica en sus distintas
configuraciones, sin olvidar los aportes minerales en forma de rocas minerales pulverizadas
(Shundt et al., 1987).
Así, las principales fuentes de humus que aparecen en el Consejo Regulador de la Agricultura
Ecológica son:
A) Abonos orgánicos producidos en la finca o comprados a otras fincas inscritas en los
Registros:
– Estiércol, descompuesto por fermentación en montón, en hoyo o en la superficie.
– Residuos de cosechas.
– Abonos verdes.
– Paja y otros acolchados.
– Estiércol líquido (lisier) y orines (purines) fermentados aerobiamente.
– Purín de ortigas.
– Compost hecho a partir de residuos orgánicos.
– Humus de lombriz.
B) Abonos orgánicos que no provienen de fincas inscritas en los registros:
– Compost hecho a partir de residuos orgánicos no contaminados.
– Estiércoles no contaminados y previamente descompuestos por fermentación en
montón o en hoyo.
-Paja no contaminada.
– Algas marinas y derivados.
– Pescado y derivados.
– Guano de aves.
– Humus de lombriz hecho a partir de estiércoles no contaminados.
– Subproductos orgánicos de la industria alimentaria y textil, siempre que no estén
contaminados ni tengan aditivos químicos.
– Serrín, virutas y cortezas, si proceden de madera no tratada.
Por otro lado, los abonos minerales que autoriza el Consejo Regulador de la Agricultura
Ecológica son los que se enumeran a continuación:
– Rocas en polvo.
– Enmiendas calcáreas, magnésicas y de azufre o yeso.
– Algas calcáreas.
– Fosfatos naturales.
– Cenizas de madera.
– Escorias Thomas.
– Mineral magnésico.
– Mineral potásico con bajo contenido en cloro.
– Oligoelementos.
Control por lucha biológica
Se pueden considerar tres apartados en la lucha biológica (Cabello, 1994):
a) Lucha biológica contra plagas. Es la manipulación deliberada por el hombre de parasitoides,
depredadores o patógenos dentro del cultivo, proyectada para reducir la población de la plaga
a un nivel de daños no perjudicial o de importancia económica.
b) Lucha biológica contra patógenos que causan enfermedades en los cultivos. Comprende
cualquier tipo de reducción o descenso en el inóculo potencial de un patógeno por medio de
la acción directa o indirecta de otros agentes biológicos.
c) Lucha biológica contra las adventicias de los cultivos. Se trata de la utilización por el hombre
de fitófagos o patógenos para reducir las poblaciones de adventicias dentro de los cultivos.
Por otro lado, el Departamento de Agricultura de los Estados Unidos propone una definición
global sobre el tema en cuestión: La lucha biológica es la supresión de una plaga (en sentido
amplio: plagas fitopatógenos y adventicias) con un agente biótico, excluyendo la mejora
vegetal por resistencia a plagas, técnicas de esterilización y modificaciones químicas del
comportamiento de plaga.
Otra definición es la de la O.I.L.B. (Organización Internacional para la Lucha Biológica) que
dice: el control biológico es la utilización de organismos vivos o de sus productos, para impedir
o reducir (no eliminar) las pérdidas o daños ocasionados por los organismos nocivos.
En el control biológico contra plagas se aprovechan los enemigos naturales para impedir el
desequilibrio ecológico debido a las prácticas agrícolas que emplea la lucha química.
Utilización de microorganismos antagónicos
Se hace empleando generalmente bacterias y hongos para que reduzcan la actividad, la
eficacia o la cantidad de inóculo del agente fitopatógeno mediante mecanismos como la
antibiosis, la competencia, la predación o hiperparasitismo.
Uso de feromonas
Para el uso de estas sustancias tenemos distintas técnicas como: monitorización de
poblaciones, capturas masivas, atración y muerte, confusión, etc.
Uso de reguladores de crecimiento de insectos
Los efectos que surgen del empleo de estas sustancias dependen del estado en que se
encuentra el organismo de los insectos y de sus condiciones fisiológicas en el momento de la
aplicación. Pueden ser:
‐ Inhibición del desarrollo de las larvas, de forma que no lleguen a realizar la ninfosis.
‐ Ruptura de la metamorfosis, impidiendo la emergencia de los adultos.
‐ Alteración del sistema reproductor y del metabolismo, induciendo incluso la diapausia o
interrumpíéndola.
Uso de microorganismos entomopatógenos
Utilizamos ciertos microorganismos que desencadenan enfermedades en los artrópodos y
finalmente producen su muerte: virus, bacterias, hongos, nemátodos y protozoos.
Uso de entomófagos
Se trata del uso de artrópodos parásitos o parasitoides de otros artrópodos que afectan
negativamente a nuestros cultivos.
Destacan las superfamilias Ichneumonoidea y Chalcidoidea.
También se emplean lepidópteros, neurópteros, dípteros, coleópteros, hemípteros y
arácnidos.
Los métodos utilizados son:
Introducción de organismos exóticos.
Incremento de enemigos naturales criados en cautividad.
Conservación y mejora de la acción de los enemigos naturales ya existentes.
Técnicas para minimizar la erosión
-Uso de abonos orgánicos como estiércol o compost mejora la estructura, esta mejora
de la estructura permite que el agua sea retenida en el suelo, lo cual reduce los efectos
erosivos de esta.
– Laboreo mínimo, En este sistema se realizan labores entre los sucesivos cultivos. Las
variantes son muchas empleán‐dose aperos como el arado cincel, gradas de discos,
cultivadores y vibrocultivadores. La cantidad final de rastrojo dependerá del número
de operaciones, de la agresividad de las mismas (profundi‐dad, velocidad, etc.) y del
tipo de apero.
– Siembra directa, No se realiza ninguna labor entre la cosecha y el establecimiento del
siguiente cultivo. El control de malas hierbas se consigue con herbicidas de mínimo
impacto medioambiental. Se trata del sistema ideal desde el punto de vista del medio
ambiente y, en la mayoría de los casos, agronómico
– Cultivo en caballones, la siembra se realiza sobre caballones permanentes que son
reconstruidos durante el cultivo ante‐rior, normalmente mediante dos operaciones,
permitiendo un calentamiento más rápido del suelo y un mejor aprovechamiento de
la humedad.
– Cultivo en terrazas, en terrenos con pendiente pronunciada son una solución para
evitar la escorrentía de las aguas de lluvia.
-Cubiertas vegetales, Es el sistema de cultivo que ha demostrado mayores beneficios
medioambientales. Consiste en es‐tablecer franjas de vegetación, espontánea o
sembrada, entre las hileras de árboles.
Entre las acciones que contribuyen a aumentar las poblaciones de enemigos naturales están:
– Asociaciones de cultivo
La presencia de umbelíferas en ribazos o campos próximos
Minimizar las intervenciones con insecticidas y fungicidas, químicos o naturales
Minimizar las labores profundas
Presencia de malezas que sirvan de refugio o alimentos alternativos. Las leguminosas
y las compuestas suelen ser las más acogen a insectos beneficiosos
La construcción de nidales para sírfidos en los casos que no existan cañas o plantas de
tallo huevo, o la pulverización de extractos azucarados con levadura sobre los cultivos,
setos o malezas.
La presencia de plantas productoras de néctar como la Phacelia.
La presencia de plagas como pulgones o cochinillas que general gran cantidad de
melazas.
La presencia de setos vivos
La maduración se produce cuando tienen lugar en los frutos una serie de cambios que se
manifiestan en la disminución de la consistencia, cambio de la textura, reducción de la
clorofila, aumento de los carotenos y antocianinas que inducen a los tonos ocres o rojizos,
aumento de los azúcares, de los sólidos solubles y disminución de la acidez.
Desde el punto de vista biológico se distinguen dos tipos de madurez:
La madurez fisiológica: El fruto está en condiciones de proseguir su total desarrollo
con únicamente sus propias reservas. Se inicia antes de terminar el crecimiento y sólo
ocurre mientras el fruto esté unido a la planta.
La madurez organoléptica. También llamada de consumo, cuando el fruto presenta en
un grado óptimo sus carácterísticas para consumo inmediato.
Desde el punto de vista del consumo se distinguen otros dos tipos de madurez:
La madurez de recolección: Se refiere al momento en el que el fruto es apto para
soportar en condiciones óptimas los procesos de manipulado y comercialización y
capaces de alcanzar la madurez de consumo.
La madurez comercial: Indica el estado en el cual los frutos o productos agrícolas son
requeridos por el mercado.
Métodos de realización de pruebas objetivas: Son los que están basados en
determinaciones analíticas.
Determinación de la firmeza del fruto mediante el penetrómetro: Se basa en la
presión necesaria para insertar un puntal, de tamaño específico acoplado a un
dinamómetro, en la pulpa de la fruta a una profundidad dada y después de quitar la
piel. El instrumento es sencillo de usar y se pueden hacer las mediciones en campo con
facilidad. Los resultados se expresan en kilos.
Determinación del contenido de almidón utilizando una solución de yodo: Durante
la maduración el almidón de algunas frutas se rompe en azúcares. Empieza por el
corazón del fruto y avanza hasta la periferia. La prueba consiste en aplicar yodo que
reacciona con el almidón formando un color negro, viéndose las zonas donde todavía
hay almidón. Para cuantificarla se utilizan escalas según el tipo de fruta.
Determinación de sólidos solubles totales (SST) de azúcar mediante el refractómetro:
como los azúcares son los componentes mayoritarios de las frutas, se determina el
contenido total de sólidos solubles de azúcar con un refractómetro.
Determinación de los ácidos en los frutos por titulación y cálculo de la proporción
entre azúcar y ácidos: La composición entre azúcares y ácidos y su proporción es lo
que les da a la fruta su sabor carácterístico. La determinación por titulación consiste
en utilizar un reactivo de compensación estandarizado como el NaOH y como
instrumento se utiliza un pHmetro o un indicador de color.
Métodos de realización de pruebas subjetivas: Su determinación se basa en análisis
sensorial por lo que es difícil su precisión y reproducción.
Determinación del color mediante cartas de color: Constituidas por múltiples tarjetas
coloreadas, según las distintas tonalidades que pueden presentar el fruto a lo largo de
su maduración. Son específicas de cada especie vegetal y de cada variedad comercial.
En los últimos años se están aplicando métodos más precisos como el uso del
colorímetro.
Determinación de aroma, sabor: Se basa en el sentido olfativo y del paladar.
Métodos cronológicos: Se refiere a los días transcurridos desde la floración hasta la
madurez.