3.4Estructura sociopolítica de la sociedad moderna-industrial: –
Se rompe con la concepción tradicional del reino esto es lo que da pie a la consolidación del Estado Moderno.
El estado moderno implica el parlamentarismo, el pacto social (Rousseau) y la separación de poderes:
Legislativo, ejecutivo y judicial (Montesquieu).
Pero también implica el progresivo proceso de burocratización de la vida pública, consecuencia inevitable del proceso de modernización que, según Max Weber, termina convirtiéndose en una “jaula de hierro” donde ciudadanos y trabajadores quedan sujetos como engranajes de una máquina.
Acción de gobierno está articulada a partir de criterios de racionalización.
Se hace imperiosa la necesidad de administrar y clasificar el aparato industrial surgido del contexto económico y político: las nuevas infraestructuras, el urbanismo, las escuelas, los hospitales, las cárceles…
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Estructura social de la sociedad moderna-industrial: Nuevas clases sociales y desarrollo urbano: –
En el esquema urbano de la sociedad medieval tradicional las ciudades habían perdido la importancia que tenían en la época clásica (Grecia y Roma), en favor de la vida rural y campesina. Desde el Renacimiento se da una recuperación de la importancia de las ciudades que se consolida con la época moderna.
Es en este marco urbano en el que se desarrolla la industrialización, el auge del comercio y la consiguiente consolidación de los comerciantes como la clase social emergente: la burguésía. –
De manera paralela, tal y como ya se ha señalado, la Industrialización impulsa el surgimiento social de un tipo de burgués capitalista y del proletariado en espacios nuevos de producción; la fábrica, ya que los criterios de racionalización exigen que los obreros compartan el mismo lugar de trabajo y la misma maquinaria. Todo ello establecerá nuevos tipos de interacción social y nuevos tipos de necesidades y conflictos entre los agentes. Las condiciones de trabajo son tremendamente duras.
Enfrentamiento de clases. –
Los obreros pasan a ser productores. Se produce un abandono masivo de las zonas rurales hacia las ciudades industriales generando grandes conflictos demográficos y urbanísticos en ciudades que en muy pocos años multiplican exponencialmente su población (hacinamiento, higiene, delincuencia, etc.).
3.6.Estructura cultural e ideológica de la sociedad moderna-industrial: Aspectos destacables: –
Secularización
:La secularización de la vida social y política es una de las importantesconsecuencias paralelas que acompañan y condicionan al mismo tiempo el desarrollo de la modernidad. –
Pensamiento racional-científico
:El pensamiento racional, incluso aceptando la creencia religiosa, implicaba descubrir y vincular la gran cadena de causalidad existente entre Dios y los hombres, hasta el punto de resaltarse la independencia y objetividad de las múltiples ciencias naturales que eclosionan en estos momentos que describimos a partir del Siglo XVII. Las enfermedades podrían ser estudiadas porque la causa no era un castigo divino; las especies habían evolucionado desde formas más simples; la legitimidad de los gobiernos era social y cívica, no divina. –
Fe en el progreso:
La consecuencia de lo anterior fue la confianza en las posibilidadeshumanas para transformar las cosas a mejor y, por tanto, la de la fe en el cambio social entendido como progreso. La felicidad sería posible y la realización de la utopía en este mundo también. Hoy este asunto, como veremos más adelante, ha entrado en crisis. Sin embargo, también hubo voces críticas sobre las consecuencias negativas del progreso desde el principio. –
Nacionalismos:
En el Siglo XIX surgieron los movimientos ROMánticos cuya mirada utópica nose proyectaba al futuro sino al ideal de un pasado excelente aún por realizar. El fenómeno del nacionalismo es mucho más complejo que esto, pero sin duda se vincula con este ideal ROMántico. –
Individualismo moderno y conciencia de clase:
Al proceso de modernización le esinseparable el desarrollo del individualismo moderno que arranca en los clásicos grecolatinos y, de manera especial, en el Renacimiento con el protagonismo de la medida humana como referencia del cosmos.
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En las sociedades tradicionales el concepto de individuo, como vimos, era prácticamente inexistente. La persona tenía sentido como parte de un conjunto social más amplio y los sujetos estaban supeditados al grupo social al que pertenecían. El proceso de individuación implica que la persona se convierte en objeto de derechos y de deberes.
-Contrato social:
Los derechos individuales de las personas son los que efectivamentegeneran la preocupación de la teoría política en el contrato social.
Es preciso dar respuesta a las demandas de libertad de los individuos y los conflictos de intereses que generan la puesta en común de derechos y obligaciones. Esta concepción contractual del estado más artificial también requiere, de alguna manera, elementos afectivos de adhesión. Estos se irán concretando en la sustitución de los rituales religiosos por rituales civiles (fiestas nacionales, de la patria…), la exaltación ROMántica de los nacionalismos, y, como sugerimos anteriormente, la partencia a una clase social con los mismos intereses.-
Ética del trabajo:
La nueva ética del trabajo inculca a los obreros un estado de deseo permanente de una vida mejor alcanzable mediante el esfuerzo y el sacrificio permanente en el trabajo combatiendo la idea de que es posible vivir decentemente con poco.
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Las sociedades postindustriales
4.1Marco sociohistórico y delimitaciones sobre la época postindustrial
Podríamos decir que el fin de la II Guerra Mundial es la fecha emblemática de una nueva etapa histórica en la que se van a ir obrando una serie de cambios especialmente significativos en la estructura social cuyos desarrollos están llegando hasta nuestros días.
El término “sociedad postindustrial” hizo fortuna a partir de la obra de dos sociólogos a finales de los años 60 y principios de los 70: Alain Touraine y Daniel Bell.
Las grandes transformaciones, tan sustanciales y tan rápidas, que se han producido en los últimos 60 años han hecho que los teóricos sociales, filósofos e intelectuales hayan tenido que ir dotando de constantes calificativos a nuestra época, apellidar con múltiples nombres a nuestra sociedad, para intentar delimitar lo indeterminado. Es por eso que la sociedad postindustrial de la que hablamos como época se haya denominado también sociedad del conocimiento, programada, del bienestar, del ocio, de la información, líquida, del consumo, postmoderna, hipermoderna, del riesgo, global, de la transparencia, del simulacro, informe, cansada, evanescente, etc.
Entre los elementos que permanecen podríamos destacar de manera significativa la estructura política de racionalidad de los estados, su burocracia y también la confianza en el pensamiento científico-técnico y sus desarrollos.
Otros aspectos podrían parecer que se mantienen, pero su transformación de contenido es de tal magnitud que implica un importante cambio formal:
Como ejemplo pensemos la estructura de las clases sociales, que aunque sigamos hablando de este modelo de estratificación sus derivas históricas en las últimas décadas nos invita a pensar que no tenga nada que ver con aquella que nos planteaba Marx.
Del mismo modo asistimos también a cambios que hacen irreconocibles los discursos y las prácticas anteriores como, por ejemplo, el paso de una ética del trabajo como sustento de la vida moral y social a una estética del consumo como expresión vital y cultural; o de igual manera el cambio de unos valores materiales (alimento, higiene, trabajo, supervivencia, etc.) por un proceso claro de desmaterialización de los valores; cubiertas las necesidades básicas empiezan a ser importantescosas como el desarrollo personal, la participación, los derechos, el placer, etc.
Esquema de caracterización
-Dimensión internacional de la sociedad postindustrial: –
Política de bloques Este-Oeste (Guerra fría). -Conciencia global de riesgo (Crisis del paradigma del progreso indefinido). -Desarrollo de organismos internacionales: ONU. OTAN. UE… -Protagonismo del tercer mundo: procesos de independización de los países, descolonizaciones, revoluciones, migraciones…
-Dimensión política de la sociedad postindustrial: –
Pacto social, desdibujamiento del conflicto de clases, reconocimiento de derechos sociales. -Modernización de los Estados y de sus estructuras políticas.
Descarga de los estados “por arriba” (internacional) y “por abajo” (descentralización). -Auge del poder de los sistemas de (tecnología de la) información.
Estado del bienestar y protección social.
-Dimensión económica de la sociedad postindustrial: –
Economía transnacional: globalización… (nos detendremos en ello en la conclusión del tema).
Gerencialismo (lo que funciona). -Desregulación. –Nuevas fuentes de energía. -Consumo de masas. –Acceso general a los bienes de consumo. -Preponderancia del sector servicios.
-Dimensión social de la sociedad postindustrial. –
Aumento de las clases medias. -Complejidad y fragmentación.
Sociedad del consumo y del ocio.
Bienestar social desde el consumo: hedonismo, narcisismo. -Nuevas tecnologías. –Nuevas emigraciones: barrios, problemas urbanos. -Cuarto mundo: exclusión social, marginación.
Modificación de estructuras clásicas: familia, mujer, juventud, tercera edad…. -Preocupación por las necesidades secundarias (desmaterialización).
Sociedad postindustrial: Científico-filosófico. –Nuevos enfoques de pensamiento y paradigmas científicos: sistémico, complejidad,…
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Dimensión ideológica
Es preciso recordar, aunque ya es bien conocido, que la lógica de nuestro actual proceso globalizador es fundamentalmente económica y se encuentra sustentada por el neoliberalismo como presupuesto político: un mercado mundial de materia primas; la industria manofacturada en muchas ocasiones se dedica expresamente a ensamblar lo producido en países de todo el mundo; el mercado de capitales no cierra en ningún momento del día porque el dinero corre por las bolsas de todo el mundo constantemente; el consumo se generaliza y se espectaculariza por tiendas y franquicias clónicas a lo largo de todo el entramado de centros comerciales. –
Dimensión política:
Desde el punto de vista político, tras la caída del muro de Berlín y los procesos que de ello se han ido produciendo, parece definitivamente que se ha dado por bueno el sistema político democrático. Más de dos tercios de países de todo el mundo se rigen por este sistema, con sus diferentes peculiaridades. Sistemas, por otra parte, que sustentan su organización en una organización supranacional que condiciona habitualmente su capacidad estructural de decidir. La resistencia natural del estado nacíón soberano con el que aún nos manejamos desde la modernidad encuentra la correspondiente presión en organismos internacionales de diferentes tipos como las Naciones Unidas (ONU), la Organización Mundial del Comercio, el Banco Mundial, el Fondo Monetario Internacional, la Uníón Europea. Desde el punto de vista del denominado tercer sector, es decir, de la actividad ciudadana desformalizada, no se pueden olvidar los otros tipos de organizaciones internacionales (ONGs). -·
Dimensión crítica
La globalización ha traído consigo una fuerte reacción crítica de movimientos antiglobalización y antisistema radicales que reaccionan especialmente ante el determinismo economicista, desregulador y de mercado y ante su modo de afectar a los procesos de igualdad social. De algún modo, los analistas han advertido, en este sentido, que los procesos decimonónicos de lucha estructural de clases se han desplazado en la actualidad desde una perspectiva geopolítica advirtiendo no sólo la profunda desigualdad que generan las consecuencias de la globalización económica entre los individuos, sino especialmente entre países del norte-del sur, desarrollados-subdesarrollados, etc.