Contexto Histórico y Literario de *La Casa de Bernarda Alba*
Nos encontramos ante un fragmento de la obra La casa de Bernarda Alba, escrita por Federico García Lorca en 1936. Lorca fue un representativo autor del teatro vanguardista de la Generación del 27. Esta obra está escrita junto con Yerma y Bodas de sangre, todas centradas en la temática de la tragedia encarnada por mujeres que ven frustrados sus deseos de libertad, amor o maternidad. Estas tres obras llevan a Lorca a la cumbre del teatro vanguardista, otorgándole fama y convirtiéndolo así en uno de los autores clásicos de nuestros días. La casa de Bernarda Alba es la última obra escrita por Lorca antes de su fusilamiento y la más relevante, ya que da un punto de vista crítico sobre la situación de las mujeres en la época y se muestra como una llamada al cambio. Es una obra que trata temas como el conflicto entre la autoridad y el deseo de libertad, el matrimonio por conveniencia, la desigualdad entre hombres y mujeres, etc. Es un teatro dividido en tres actos que va reflejando la pérdida de pureza a través de los colores de las paredes, y en la que Lorca utiliza durante toda la obra la simbología, como por ejemplo el vestido verde, que refleja la rebeldía; el caballo, al hombre; el agua, la libertad; el bastón, la autoridad… Por lo que podemos decir que es un teatro simbólico.
Contexto Histórico: De los Felices Años 20 a los Sombríos Años 30
Al comienzo del siglo XX, ya caído el Antiguo Régimen, nos encontramos en una época de angustia e incertidumbre, lo que da comienzo al «problema de España» para los intelectuales, que pasa de los felices años 20 a los sombríos años 30. Al comienzo de 1920, el ambiente intelectual de Europa y España está marcado por el intelectualismo, el purismo y las vanguardias. Pero en estos años 20 irrumpió el fascismo, lo que dio comienzo a los sombríos años 30. En 1929 se vivió el crack de la bolsa de Nueva York. En este momento, los poetas se dejan influir por las teorías liberadoras del surrealismo. A partir de 1930, los escritores desembocan en la militancia política y revolucionaria. En 1931 se alza la II República, lo que hizo que se crearan frentes defensivos contra el fascismo y el nazismo. El golpe del general Franco ese mismo año y la guerra posterior marcaron la vida y las obras de los autores del 27. La muerte y el exilio condicionaron la intelectualidad.
Contexto Literario: Vanguardias, Generación del 98 y Novecentismo
En cuanto al contexto literario, los autores del 27 estaban influenciados por el movimiento vanguardista, el cual busca una innovación radical, dejando a un lado la tradición y la estética anterior. Dentro de las vanguardias podemos diferenciar varios «ismos», como el futurismo, el cubismo (en el que debemos mencionar el libro llamado Caligramas) y, por último, los más influyentes: el ultraísmo y el surrealismo.
En España, los poetas del 27 se encontraron con la pervivencia de la Generación del 98, con el prestigio de autores como Unamuno, Machado… En cuanto al modernismo, Rubén Darío fue un referente obligado. Mucha mayor afinidad tuvo el novecentismo de Ortega y Gasset. La deshumanización del arte (1925) supuso el triunfo de la renovación. También hay que mencionar a Ramón Gómez de la Serna, quien proclama la necesidad del cambio. Las greguerías supusieron un avance en la renovación del lenguaje literario.
De este modo, la fecha de 1927 es la idónea para aunar a los autores de este grupo por el centenario de la muerte de Góngora. Metemos a autores como Salinas, Lorca, Guillén…
El Teatro Anterior a 1936: Entre lo Comercial y lo Innovador
En el teatro anterior a 1936, nos encontramos con dos tendencias:
- Teatro comercial: al que le interesa la asistencia de la clase burguesa, por lo que no hacen ninguna crítica en sus obras. En este tipo de teatro nos encontramos con tres secciones:
- El teatro costumbrista, también llamado de alta comedia, en el que el autor más conocido es Benavente, con obras como Los intereses creados y El nido ajeno.
- El teatro en verso, un teatro tradicional influenciado por el modernismo, en el que debemos mencionar a Villaespesa y Marquina, que escribieron obras como La Lola se va a los huertos y La verbena de la paloma.
- Por último, la comedia, en la que destacan los hermanos Álvarez Quintero y Carlos Arniches.
- Teatro innovador: más profundo, que enfoca nuevos temas e incorpora nuevas formas teatrales y tiene otras preocupaciones ideológicas para representar. Nos encontramos con muchas obras de los autores noventayochistas: Zorrilla, Unamuno, Valle-Inclán… Posterior a los noventayochistas, incorporamos a Lorca, quien renueva el teatro, la poesía y el uso de la simbología. Comienza a utilizar las vanguardias y recursos innovadores. Los personajes de Lorca casi siempre están encarnados por mujeres.