La Constitución de 1812: El Nacimiento del Liberalismo en España
Contexto Histórico y Origen
El texto que nos ocupa, titulado «Constitución de Cádiz», es un documento de naturaleza jurídica, política e ideológica. Se trata de un fragmento de una fuente primaria, redactado durante el segundo periodo de la Guerra de la Independencia española (1810-1812). Fue firmado el 19 de marzo de 1812 en la ciudad de Cádiz, aunque su vigencia se vio truncada a los pocos meses debido al golpe de estado de Fernando VII. Cádiz, la única ciudad libre del ejército francés, sirvió de refugio a la burguesía española. Esta ciudad poseía la protección de Gibraltar, era geográficamente estratégica y constituía un importante centro comercial, manteniendo una estrecha relación con las colonias americanas. El autor del texto son las Cortes de Cádiz, representantes de la ciudadanía española y de las colonias. Inicialmente convocadas como Cortes tradicionales, la burguesía aprovechó la ausencia de apoyos al Antiguo Régimen para adjudicarse el poder legislativo y transformarlas en Cortes constituyentes. De los 100 diputados iniciales, se pasó a 300 al finalizar el proceso, divididos principalmente en dos ideologías: liberales (mayoría) y absolutistas. El destinatario del texto es la ciudadanía, y su finalidad es la abolición del Antiguo Régimen y el establecimiento del liberalismo.
Principios Fundamentales de la Constitución
El tema fundamental del texto es la propia Constitución y, en concreto, una serie de artículos. En el preámbulo se presenta a Fernando VII como rey constitucional. La nación se define como la unión del Reino de España y sus colonias. Se reconoce la soberanía nacional y se establece la separación de poderes: el legislativo reside en las Cortes, elegidas por el pueblo; el ejecutivo, en el Rey; y el judicial, en los tribunales. Se establecen obligaciones para todos los ciudadanos, como el pago de impuestos, pero también se reconocen derechos, como la libertad de prensa. Por último, el Estado se declara confesional, protegiendo a la Iglesia Católica Apostólica Romana.
Antecedentes y Desarrollo
Los acontecimientos que precedieron a la Constitución de Cádiz se remontan al Tratado de Fontainebleau, que permitió a Francia atravesar España para conquistar Portugal. El ejército francés aprovechó para ocupar gran parte de España, lo que provocó el Motín de Aranjuez y las abdicaciones de Bayona. La familia real fue trasladada bajo custodia francesa, lo que la población madrileña interpretó como un secuestro, desencadenando la Sublevación del 2 de Mayo. En pocos días, toda España se alzó en armas.
Durante los dos años siguientes, se produjeron enfrentamientos entre ambos ejércitos. El ejército español se organizó en juntas para combatir al invasor. Al final del primer periodo de la guerra, Francia ocupaba gran parte del territorio, especialmente las ciudades más importantes. Las zonas rurales se convirtieron en focos de resistencia, con una fuerte presencia de guerrillas formadas por restos del ejército español y voluntarios civiles. Estas guerrillas, que contaban con el apoyo de la población civil, fueron pioneras en la concepción de la guerrilla moderna. La única excepción fue Cádiz, donde se refugió la Junta Suprema derrotada, que se disolvió para nombrar una regencia. Muchos burgueses se refugiaron en esta ciudad, protegida por Gibraltar, centro comercial estratégico. Mientras tanto, en las colonias, que también habían convocado juntas, comenzó un proceso independentista, aprovechando el vacío de poder. La burguesía refugiada en Cádiz, con grandes intereses económicos en las colonias, presionó a la regencia para convocar Cortes, viendo peligrar sus negocios. La mayoría de la representación era burguesa liberal, con pocos representantes del Antiguo Régimen, llamados «serviles». Esto permitió transformar las Cortes en constituyentes, otorgándose el poder legislativo al considerarse representantes del pueblo. Así nació la primera Constitución Española, sancionada el 19 de marzo de 1812.
Influencia Liberal y Reformas
Durante todo el proceso de elaboración, predominó la ideología liberal, reflejada en la Constitución, debido a la ausencia de gran parte del clero y la nobleza en las Cortes. Sus puestos fueron ocupados por representantes liberales.
Reformas y Consecuencias
Esta Constitución abolió el Antiguo Régimen e introdujo numerosas reformas:
- Establecimiento de la soberanía nacional por sufragio universal masculino (aunque para ser votado era necesario tener patrimonio, lo que se conoce como sufragio censitario).
- Reconocimiento de derechos naturales como la libertad de expresión, la propiedad y la igualdad de ciudadanía en las colonias.
- Establecimiento de deberes como el pago de impuestos.
- Separación de poderes: el legislativo en las Cortes y el Rey, el ejecutivo en el Rey y el judicial independiente.
- El Estado se definía como confesional. La enseñanza la impartía la Iglesia, que también tenía poder de censura y un tribunal eclesiástico.
- Desvinculación del señorío territorial y abolición del señorío jurisdiccional.
- Establecimiento de una relación laboral capitalista (liberalismo económico), con la desaparición de los gremios.
- Se intentó una reforma agraria con la desamortización de las tierras comunales, pero no llegó a aplicarse debido a la breve vigencia de la Constitución (solo cuatro meses).
- Disolución de la Mesta (asociación de ganaderos), permitiendo el vallado de los campos.
- Supresión de los fueros y establecimiento de una ordenación territorial y legislativa centralista.
El Retorno de Fernando VII y el Fin de la Constitución
Tras la guerra, las Cortes se trasladaron a Madrid y ofrecieron a Fernando VII el trono como rey constitucional. Sin embargo, este lo rechazó y, con el apoyo suficiente, dio un golpe de Estado, conocido como «El Golpe Fernandino», publicando un manifiesto que abolía la Constitución y toda su labor legislativa. Este evento marcó el inicio del Sexenio Absolutista, caracterizado por una profunda crisis económica y pronunciamientos liberales que hicieron tambalear los cimientos del absolutismo.
Legado e Importancia
La Constitución de 1812 es de gran interés e importancia, ya que abolió el Antiguo Régimen, otorgando derechos y obligaciones a los ciudadanos tanto del Reino de España como de las colonias, frenando temporalmente el proceso independentista en dichas zonas. Además, se convirtió en un punto de referencia para las constituciones posteriores.