La Reconquista: Expansión de los Reinos Cristianos en la Península Ibérica


Los Primeros Reinos Cristianos

A partir del siglo XI, se inicia la conquista de los territorios ocupados por los musulmanes en la Península Ibérica. Los primeros cristianos que opusieron resistencia al Islam se localizaban en las zonas montañosas del norte peninsular. Su población aumentó con la llegada de refugiados visigodos que huían del avance musulmán.

El reino asturiano inició un proceso de expansión territorial hacia el sur. La mayor parte de estos territorios habían sido prácticamente abandonados por los árabes desde la rebelión de los bereberes. El sucesor de Pelayo también amplió sus dominios hacia el oeste (Galicia) y hacia el este (País Vasco).

La zona pirenaica se había convertido en un territorio de frontera entre el reino franco y el poder musulmán andalusí. Tenían una problemática común:

  • Lucha por mantener su independencia frente al imperio carolingio.
  • Fuerza de los musulmanes de Al-Andalus que se había establecido sólidamente en las ricas tierras del valle del Ebro.
  • Escasa densidad geográfica.

Consolidación de los Reinos Cristianos

El Reino Astur-Leonés

El reino asturiano se consolidó bajo los reinados de Alfonso II (789-842), que organizó la administración tomando como modelo las instituciones de la monarquía visigoda, y Alfonso III (886-910), ampliando los territorios hacia el Atlántico y el sur e incorporando el territorio occidental de los vascones, estableciendo una frontera ofensiva frente a navarros y musulmanes. Se estableció entonces León como capital del reino. Paralelamente, se consolidó el dominio leonés sobre la zona oriental de la meseta. Se trataba de un territorio bajo el control de un conde.

En la segunda mitad del siglo IX, el conde Fernán logra obtener una gran autonomía del poder leonés y convertir en hereditarias sus posesiones.

El Reino de Navarra

El reino de Pamplona experimentó una expansión hacia el sur a partir del siglo X y se transformó en el reino de Navarra, con reyes (dinastía Jimena) como Sancho Garcés, que extendió sus dominios hacia el sur (La Rioja). La política matrimonial con los territorios vecinos permitió al Reino de Pamplona incorporar el Condado de Aragón (970). Con Sancho III se consiguió el mayor esplendor de Navarra.

Tras su muerte, su patrimonio se dividió entre sus hijos:

  • García Sánchez III: el reino de Navarra.
  • Fernando I: gobernó Castilla, que se transformó en reino, y ocupó también León.
  • Ramiro I: se convirtió en Rey de Aragón (1035-1063).
  • Gonzalo: Sobrarbe y Ribagorza.

El Reino de Castilla

El reino de Castilla surgió como tal con Fernando I, aunque la conquista de León le permitió unir los dos territorios bajo su corona en 1037, pasando a denominarse rey de Castilla y León. A su muerte, el reino se dividió entre sus hijos, pero uno de ellos, Alfonso VI, logró unificar ambos territorios.

El Reino de Aragón

La continuidad geográfica existente entre Navarra y Aragón se rompió al morir Sancho III el Mayor al ceder Aragón a su hijo bastardo Ramiro, que lo convierte en reino de Aragón. A la muerte de su hermano Gonzalo, anexiona a este los condados de Sobrarbe y Ribagorza. Su hijo Sancho Ramírez volvió a unir a los reinos de Aragón y Navarra, que permanecerán así hasta 1134.

Al-Andalus en el Siglo XI

En el siglo XI, Al-Andalus vivió un periodo de crisis y debilidad política y militar (taifas). La llegada de los almorávides a la Península detuvo el avance cristiano. En 1086, derrotaron a Alfonso VI en la batalla de Sagrajas y recuperaron la taifa de Valencia.

El Siglo XII

En el siglo XII destacan los siguientes hechos:

  • El nacimiento de la Corona de Aragón con la unión del reino de Aragón y los condados catalanes (1132).
  • La crisis política de la corona castellano-leonesa: en 1143 se separó el reino de Portugal y en 1157 se separaron de nuevo Castilla y León.
  • Los pactos de colaboración y reparto entre Castilla y Aragón: Tratado de Tudilén de 1151 (Castilla reconocía a la Corona de Aragón el derecho de conquista sobre los reinos de Valencia, Denia y Murcia); Tratado de Cazola de 1179 (el rey aragonés renunciaba a la conquista de la taifa de Murcia, a cambio el rey castellano le concedía los derechos feudales sobre Zaragoza).
  • La creación de las Órdenes Militares en Castilla-León: Calatrava (1157).

Las Conquistas del Siglo XIII

El avance de los reinos cristianos tuvo como consecuencia la victoria de los cristianos sobre las tropas almohades en las Navas de Tolosa en 1212. Esta batalla produjo el declive almohade.

En la Corona de Aragón, Jaime I conquistó Baleares y Valencia. Alfonso IX de León conquistó Extremadura y Fernando III de Castilla llevó a cabo la conquista del valle del Guadalquivir y sometió a vasallaje al reino de Murcia. Además, Castilla y León se unificaron. Solamente quedaba bajo dominio musulmán el reino nazarí de Granada.

La Repoblación

La repoblación se llevó a cabo para afianzar la conquista y aprovechar recursos. La consecuencia más importante fue la aparición de diferentes estructuras en el sistema de propiedad de la tierra.

La repoblación se llevó a cabo mediante:

  • El modelo de presura, en el que los repobladores ocupaban unas tierras deshabitadas de acuerdo con el derecho romano y se convertían en sus propietarios.
  • El modelo concejil, que consistía en la creación de grandes concejos. Mediante este procedimiento, la población se concentraba en ciudades o grandes villas.

Estancamiento y Expansión

Los efectos de las malas cosechas, epidemias, guerras y enfrentamientos sociales condujeron a los reinos peninsulares a una fase de estancamiento. También las Coronas de Castilla y Portugal iniciaron su apertura hacia el exterior con el objetivo de expandirse.

Expansión de la Corona de Aragón en el Mediterráneo

La expansión de la Corona de Aragón en el Mediterráneo se produjo por la defensa de los intereses comerciales catalanes en el Mediterráneo y la intervención en conflictos dinásticos. Los reyes conquistaron Baleares, Sicilia, Cerdeña, los ducados de Atenas y Neopatria, y Nápoles.

Expansión de Castilla en la Baja Edad Media

Se conquistaron las islas Canarias, que constituían una excelente base marítima de operaciones y aprovisionamiento. La iniciativa de las primeras conquistas estuvo a cargo de la nobleza, que incorporó las nuevas tierras al régimen señorial. La nobleza conquistó también El Hierro y La Gomera. La conquista del resto de las islas fue realizada por la monarquía castellana.

Conclusión

Entre los años 1045 y 1266, los que habían empezado como pequeños núcleos de resistencia habían ampliado sus territorios con la adquisición de 40.000 km cuadrados de nuevas tierras. A finales del siglo XIII, la península queda dividida en tres grandes reinos: Portugal, Castilla y Aragón. Al sur, los musulmanes todavía controlan Granada hasta el reinado de los Reyes Católicos en la segunda mitad del siglo XV. Las fronteras permanecían intactas.

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