Legalidad y Legitimidad del Poder Político
1. Legalidad vs. Legitimidad
El poder designa la posibilidad de actuar con vistas a un fin. El poder político se caracteriza por la existencia de un fin compartido, que parte de la autoridad social. En las sociedades democráticas, este reconocimiento se basa en la soberanía popular y en la defensa de los valores, principios y derechos que la sustentan.
La legalidad del poder político se refiere a la vigencia de las leyes e instituciones, así como a la adecuación a derecho de las acciones de los poderes. Todo sistema vigente es legal por definición. Un poder político basado en leyes vigentes es un poder legal. Sin embargo, un poder político puede ser ilegítimo si no se reconoce el valor de las leyes o si quienes lo ostentan actúan contra la ley.
La legitimidad del poder político se refiere a su justificación y entraña un componente ético. Por ejemplo, la legalidad democrática se justifica en la igualdad de los ciudadanos ante la ley. El poder político es legítimo cuando respeta estos principios.
2. Las Tres Formas de Legitimación del Poder según Max Weber
Max Weber clasificó los tipos ideales de autoridad según su legitimación:
- Poder de autoridad carismática: Se basa en las cualidades extraordinarias del líder (ej. Julio César, Gandhi, Hitler).
- Poder de autoridad tradicional: Se basa en la creencia en normas, costumbres e instituciones inmemoriales (ej. monarquías absolutas).
- Poder de autoridad legal-racional: Se basa en la creencia en la legalidad de las formas políticas basadas en el derecho, donde la ley es expresión de la soberanía popular (ej. democracias modernas).
3. La Concepción Política de Platón
Para Platón, la justicia debe ordenar la vida individual y colectiva. Políticamente, la justicia consiste en que cada uno desempeñe las tareas que le corresponden según sus capacidades. Su división de la sociedad (productores, guardianes y gobernantes) es paralela a la división del alma (concupiscible, irascible y racional). El poder es legítimo cuando es justo, es decir, cuando los gobernantes atienden al interés general. En su obra República, el gobierno ideal recae sobre los sabios.
Platón tiene una tendencia idealista en su pensamiento político.
4. La Concepción Política de Aristóteles
Para Aristóteles, la vida social responde a la necesidad humana de satisfacer necesidades conjuntamente. Para él, el origen de la sociedad prefigura la necesidad de un régimen justo. En caso de conflicto, prevalece el bien común (primado de la política sobre la ética).
Aristóteles teorizó sobre las formas de gobierno: monarquía, aristocracia y democracia son buenas; tiranía, oligarquía y demagogia son malas. Su pensamiento político es realista, ateniéndose a los hechos de su tiempo.
5. Las Concepciones Políticas en la Edad Media
En la Edad Media, la ética y la política se subordinan a la teología. Tres figuras destacan:
- San Agustín: Afirma la preeminencia de la ciudad de Dios (Iglesia) sobre la ciudad terrena (Estado).
- Santo Tomás de Aquino: Concede autonomía relativa al Estado, cuya legitimidad depende de su adecuación a la ley natural divina.
- Guillermo de Ockham: Defiende la independencia del Estado respecto a la Iglesia.
6. La Separación entre Ética y Política según Maquiavelo
Maquiavelo marca la diferencia entre ética y política, abogando por el realismo político. Prioriza los intereses del Estado sobre la moral. Su concepción pesimista de la naturaleza humana lo lleva a afirmar que los ciudadanos deben actuar por el bien de la patria, que se asegura mediante el poder del Estado.
7. La Conciliación entre Política y Moral según Kant
Immanuel Kant cree en la conciliación entre política y moral. Distingue entre:
- Político moral: Concilia la habilidad política con la moral.
- Moralista político: Adapta la moral a las conveniencias del Estado.
Kant propone una política fundada en el derecho, donde éste limita al Estado. Su visión se sitúa entre el realismo político y el idealismo.
8. La Teoría Naturalista
Desde la antigüedad, se plantea la idea del hombre como ser social y político por naturaleza (Aristóteles). La sociedad permite el desarrollo de las capacidades humanas y la consecución de fines como la justicia y la felicidad.
9. La Teoría Organicista
La sociedad se concibe como un organismo biológico con etapas de desarrollo. El individuo está subordinado a la comunidad. Esta teoría influyó en los totalitarismos.
10. La Teoría Contractualista
La sociedad se entiende como resultado de un pacto o contrato. Parte de un estado de naturaleza y establece las bases de la sociedad civil y el Estado. Influyó en el desarrollo del Estado absolutista y del Estado de derecho.
11. La Teoría Contractualista de Hobbes
Para Hobbes, el derecho natural describe los deseos individuales, limitados por la ley natural (conservación de la vida). El estado de naturaleza es violento. El pacto social transfiere el poder al soberano, justificando el absolutismo.
12. La Teoría Contractualista de Locke
Locke tiene una visión optimista del estado de naturaleza, donde el hombre tiene derecho a la vida, la libertad y la propiedad. La sociedad civil perfecciona el estado de naturaleza. El Estado garantiza los derechos naturales. Propone la división de poderes (legislativo y ejecutivo).
13. La Teoría Contractualista de Rousseau
Rousseau describe al hombre en estado de naturaleza como un bruto feliz. La propiedad privada crea desigualdad. El contrato social busca armonizar la libertad individual con las obligaciones sociales a través de la voluntad general.
14. Sociedades Cerradas
En las sociedades cerradas, la legitimidad proviene del pasado y de un futuro preestablecido. El individuo se subordina a la colectividad (ej. la polis platónica).
15. Sociedades Abiertas
Las sociedades abiertas reconocen la incertidumbre de la historia y la responsabilidad individual. Afirman el pluralismo y someten a crítica sus principios. Reconocen los derechos individuales y la separación entre lo público y lo privado.