Política Exterior de Felipe II: Un Reinado Marcado por la Expansión y los Conflictos


Política Exterior de Felipe II

La Unión con Portugal (1580-1640)

En 1578, el rey Sebastián I de Portugal desapareció en la batalla de Alcazarquivir sin dejar descendencia. Esto provocó una crisis sucesoria con varios pretendientes al trono portugués. Felipe II, rey de España, tenía derecho a la corona por ser marido de la nieta de Manuel I de Portugal.

Felipe II se enfrentó a otros candidatos, especialmente Antonio, Prior de Crato, quien contaba con el apoyo popular. Para asegurar su posición, Felipe II envió al Duque de Alba a Portugal, quien tomó Lisboa sin encontrar mucha resistencia. En 1581, Felipe II fue reconocido como rey de Portugal en las Cortes de Tomar, donde juró respetar las libertades portuguesas.

Política frente a Turcos y Berberiscos

El Mediterráneo occidental se veía amenazado por la presión turca y los ataques de los berberiscos, que ponían en peligro las rutas comerciales. En 1565, la flota española, liderada por García de Toledo, obtuvo una importante victoria contra la flota turca de Solimán el Magnífico en la batalla de Malta.

Sin embargo, la amenaza turca persistió. En 1570, los turcos tomaron la isla de Chipre, posesión veneciana. El Papa Pío V convocó la Liga Santa, formada por España, Venecia, Génova, Malta y los Estados Pontificios. Don Juan de Austria lideró la flota aliada en la batalla de Lepanto (7 de octubre de 1571) contra la flota turca de Ali Pasha. La batalla, que tuvo lugar en el Golfo de Corinto, fue una victoria decisiva para la Liga Santa y marcó el fin de la supremacía naval turca en el Mediterráneo.

Política con Francia

Durante el reinado de Felipe II, Francia estuvo gobernada por Enrique II, Francisco II y Carlos IX. La inestabilidad religiosa en Francia, con el enfrentamiento entre católicos y hugonotes (protestantes calvinistas), marcó las relaciones con España.

Guerra de los Tres Enriques (1585-1589)

La sucesión al trono francés se complicó con la llegada al poder de Enrique III y el nombramiento como heredero de Enrique de Navarra, un hugonote. Enrique de Guisa, líder de la Liga Católica, se alió con España para evitar que Enrique de Navarra ascendiera al trono.

La Guerra de los Tres Enriques (Enrique III, Enrique de Navarra y Enrique de Guisa) terminó con el asesinato de Enrique de Guisa por orden de Enrique III, y el posterior asesinato de Enrique III. Enrique de Navarra se convirtió en rey de Francia como Enrique IV (1589-1610).

Para asegurar su posición, Enrique IV se convirtió al catolicismo. Con la Paz de Vervins (1598), Felipe II reconoció a Enrique IV como rey de Francia. Ese mismo año, el Edicto de Nantes otorgó libertad de culto y derechos políticos a los hugonotes.

Inglaterra

El reinado de Isabel I (1558-1603) en Inglaterra estuvo marcado por las tensiones con España. Isabel I, anglicana y protectora de los rebeldes holandeses, se enfrentó a Felipe II, quien intentó colocar a su hija, Isabel Clara Eugenia, en el trono inglés.

En 1588, Felipe II envió la Armada Invencible contra Inglaterra, con el objetivo de derrocar a Isabel I. La flota española, liderada por el Duque de Medina Sidonia, fue derrotada por la flota inglesa, comandada por Lord Howard y Sir Francis Drake.

Países Bajos

Origen del Conflicto

Los Países Bajos, un conjunto de 17 provincias, fueron heredados por los Habsburgo en 1477. En 1556, Felipe II se convirtió en rey de España y de los Países Bajos. Las tensiones entre el gobierno español y la población local, especialmente en las provincias del norte, de mayoría protestante, fueron en aumento.

En 1566, estallaron revueltas en los Países Bajos, conocidas como la Rebelión Holandesa. Felipe II envió al Duque de Alba para sofocar la rebelión. La represión del Duque de Alba provocó una mayor resistencia por parte de los holandeses, liderados por Guillermo de Orange.

Guerra de los Ochenta Años (1568-1648)

La lucha por la independencia de los Países Bajos se prolongó durante décadas. En 1579, las provincias del norte formaron la Unión de Utrecht, liderada por Guillermo de Orange. En 1581, las provincias del norte declararon su independencia de España.

En 1584, Guillermo de Orange fue asesinado. La guerra continuó hasta 1648, cuando España reconoció la independencia de las Provincias Unidas (actuales Países Bajos) en la Paz de Westfalia.

Dejar un Comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *