Las políticas activas son medidas relativas a la inserción laboral, el fomento de la contratación y el mantenimiento del empleo. Intentan favorecer la creación de nuevos empleos, la formación, el reciclaje y la movilidad profesional, previniendo así el paro. Además, buscan facilitar el acceso al empleo de desempleados y otros colectivos. Tanto el trabajador como el empresario son destinatarios de estas políticas. Es importante destacar el enfoque preventivo del desempleo, especialmente el de larga duración.
Heterogeneidad de las Medidas de Inserción Laboral
Existe una multiplicidad de medidas, cuya complejidad es creciente, que se pueden clasificar en función de varios criterios:
- Tipo de trabajo incentivado:
- Medidas que afectan al trabajo por cuenta propia.
- Medidas que afectan al trabajo por cuenta ajena.
- Colectivos a los que se dirigen: jóvenes, mujeres, parados de larga duración (1 año o más buscando empleo), discapacitados o inmigrantes. La mayor eficacia se asocia a programas intensivos, destinados a grupos bien definidos y relativamente reducidos.
- Contenido:
- Flexibilización de la entrada y salida del mercado de trabajo.
- Ayudas económicas de empleo:
- Directas: subvenciones que perciben los beneficiarios.
- Indirectas: deducciones en las cuotas a la Seguridad Social, desgravaciones fiscales para la creación de empresas.
- Duración del trabajo:
- Incentivos al trabajo temporal.
- Incentivos al trabajo indefinido.
- Fomento de la conversión de contratos temporales en indefinidos.
Hay una fuerte conexión entre estas clasificaciones. Ninguna medida está por encima de las demás ni es excluyente del resto: la elección de una u otra dependerá de las directrices europeas y de la situación económica. Es fundamental la coordinación en las políticas activas diseñadas por el Estado, las Comunidades Autónomas (CCAA) y los ayuntamientos para evitar la acumulación de incentivos y el despilfarro de recursos.
Incentivos Económicos al Fomento del Empleo
A) Estado: Bonificaciones para la Contratación de Trabajadores
Es la política activa más importante. Se trata de una ayuda económica indirecta a través de deducciones en la cuota de la Seguridad Social del empresario. Las bonificaciones se adaptan a la coyuntura económica, con una vigencia temporal limitada. Los tipos de contrato que se bonifican prioritariamente son los de contratación indefinida, tanto en la contratación inicial como en la conversión de contratos temporales en indefinidos.
Existen excepciones para la contratación temporal de algunos colectivos como discapacitados, víctimas de violencia doméstica y excluidos sociales. Sin embargo, se observa una baja tasa de supervivencia de los contratos indefinidos ordinarios, especialmente al acabar el periodo de vigencia de la bonificación.
Colectivos cuya Contratación se Bonifica
- Colectivos de desempleados tradicionales:
- Larga duración (mayores de 45 años).
- Discapacitados.
- Excluidos sociales.
- Mujeres:
- Contratación general.
- Bonificación de contratos de sustitución relacionados con la maternidad.
- Bonificación de contratación por reincorporación tras la maternidad (hasta dos años después).
- Nuevos colectivos:
- Víctimas de violencia doméstica.
- Desempleados de 60 años o más.
- Jóvenes de 16 a 30 años.
La aparición o desaparición de colectivos depende de la situación económica concreta del país, con un aumento de colectivos con la crisis actual. La eficacia de las bonificaciones se ve afectada por:
- Efecto peso muerto: la contratación se habría realizado igualmente sin la bonificación.
- Efecto sustitución: no se genera una nueva contratación, solo afecta a las características de los trabajadores contratados.
- Efecto rotación: los trabajadores protegidos obtienen un empleo de corta duración y vuelven al paro.
El Consejo Económico y Social (CES) establece que la bonificación no es la técnica más eficiente para favorecer la contratación estable, debido a la importancia del efecto peso muerto, la dispersión y la complejidad de las bonificaciones.
B) CCAA: Ayudas para la Creación de Empleo
Las CCAA no tienen competencias para fijar bonificaciones de las cuotas de la Seguridad Social. Sus principales medidas son:
- Ayudas económicas directas para la creación de empleo, condicionadas a la creación de empleo estable y/o dirigido a colectivos más afectados por el paro.
- Ayudas condicionadas a la creación de empleo en municipios poco desarrollados.
- Ayudas dirigidas al autoempleo:
- Subvenciones financieras.
- Asesoramiento técnico.
Fomento del Autoempleo y el Trabajo por Cuenta Propia
Se fomenta el trabajo autónomo y la creación de empresas a través de diversas medidas:
- Facilitar el camino mediante asesoramiento técnico y apoyo financiero.
- Ayudas como:
- Subvenciones financieras para asistencia técnica y formación.
- Asesoramiento técnico y facilidades para realizar los trámites.
- Bonificaciones en las cuotas de la Seguridad Social en el Régimen Especial de Trabajadores Autónomos.
- Ayudas financieras del Instituto de Crédito Oficial.
- Pago único de las prestaciones por desempleo.
- Bonificaciones a la contratación.