Relación entre la Didáctica y la Psicología de la Educación
Los primeros antecedentes de la Psicología de la Educación se encuentran en pedagogos que intentaron fundamentar el trabajo educativo en la psicología.
En el siglo XVI, Luis Vives se preocupó por las diferencias individuales, pasando a la historia como el padre de la Psicología de la Educación. En su obra De anima et vita, explica el proceso de aprendizaje como un camino que va de los sentidos a la imaginación y de esta a la mente; en resumen, de lo particular a lo general. Clasifica a los alumnos en tres categorías según su capacidad de aprendizaje, considerando las diferencias individuales, y utiliza datos de la experiencia para respaldar sus afirmaciones.
Otros autores, como Pestalozzi y Herbart (siglos XVIII-XIX), también planearon el trabajo docente con orientación psicológica, utilizando el término «psicologizar» la enseñanza.
Ya en el siglo XX, psicólogos y pedagogos investigaron experimentalmente los problemas escolares relacionados con el aprendizaje. De Garmo utilizó por primera vez el término «Psicología de la Educación», aunque fue el norteamericano Thorndike quien lo difundió. A Thorndike se le atribuye la importancia del aprendizaje como objeto de la Psicología de la Educación, así como la creación de métodos y procedimientos didácticos y experimentales para medir el trabajo escolar (las escalas).
La Psicología de la Educación es indispensable en la formación inicial del maestro y está estrechamente relacionada con la Didáctica, a veces incluso confundiéndose. Sin embargo, existen diferencias. La Psicología de la Educación estudia los problemas del ser humano y su interpretación como sujeto de aprendizaje, considerando las diferencias individuales como factores de rendimiento. Estudia el trabajo escolar como un fenómeno que estimula las funciones psíquicas.
Competencias Clave en la Educación
Una de las razones que justifica la existencia de las competencias clave es la amplitud, complejidad y constante evolución del conocimiento, lo que hace imposible que una persona procese toda la información disponible. Lo importante es desarrollar criterios para seleccionar, procesar y aplicar la información.
La LOE incorporó al panorama escolar un nuevo tipo de aprendizaje: las competencias básicas (CCBB). El Proyecto DeSeCo (Definición y Selección de Competencias) de la OCDE (2006) ofreció un marco para identificar y definir las competencias clave para la ciudadanía. Estas competencias se incluyeron en los sistemas educativos españoles en la LOE y posteriormente en la LOMCE.
Existen diversas definiciones de competencia. La OCDE (2006) la define como «ser capaz de responder a demandas complejas y llevar a cabo tareas diversas de forma adecuada». La Comisión Europea (2004) la define como «utilizar de forma combinada los conocimientos, destrezas, aptitudes y actitudes en el desarrollo personal, la inclusión y el empleo».
En Educación Primaria, las competencias son las capacidades para aplicar de forma integrada los contenidos de cada enseñanza y etapa educativa, para lograr la realización adecuada de actividades y la resolución eficaz de problemas complejos.
Se agrupan en 7 tipos:
- Comunicación lingüística
- Competencia matemática y competencias básicas en ciencia y tecnología
- Competencia digital
- Aprender a aprender
- Competencias sociales y cívicas
- Sentido de iniciativa y espíritu emprendedor
- Conciencia y expresiones culturales
Características de las CCBB:
- Multifuncionales: permiten la realización y el desarrollo personal a lo largo de la vida, la participación ciudadana y el acceso al empleo.
- Transferibles: se aplican en múltiples situaciones y contextos para conseguir distintos objetivos y resolver problemas variados.
- Transversales e interdisciplinares: se aplican en diversas materias, no solo en una disciplina.
- Integradoras: combinan conocimientos («saber»), destrezas («hacer») y actitudes («querer»).
- Dinámicas: se construyen y desarrollan a lo largo de la vida, sin límite.
No existe una relación unívoca entre la enseñanza de determinadas áreas o materias y el desarrollo de ciertas competencias. Cada área contribuye al desarrollo de varias competencias y cada competencia se alcanza tras el trabajo de varias áreas o materias.