Tolerancia, libertad y progreso: Defendían las ideas de libertad y progreso de los individuos, que chocaba con el rígido sistema de la sociedad
estamental o de los gremios y con la verdad revelada que impónía la iglesia como dogma de fe. La razón debía desplazar a la fe y a la revelación cristiana y, por lo tanto, eran muy críticos con la iglesia. Esto no significa que rechazaran necesariamente la idea de Dios, pero veían a Dios con la óptica de la razón: principio y causa del universo, un Dios racional común a todas las religiones. Esto es el deísmo. Liberalismo económico: Los ilustrados también lucharon contra la reglamentación económica por parte del Estado y defendieron la libre iniciativa, la propiedad privada y la libertad económica. Enciclopedia y educación: La Educación fue el instrumento que los ilustrados destacaron para que los hombres alcanzaran la ilustración y pudieran valerse porsí mismos guiándose por la razón y evitando así el sometimiento a los dictados de otros. Por eso, la obra más importante de los ilustrados, editada por Diderot (1713-1784) y D’Alembert (1717-1783) fue la Encyclopédie, la primera enciclopedia de la historia, que pretendía recopilar todos los conocimientos académicos de la humanidad, pero también las religiones,
las artes, las costumbres, los oficios manuales, los inventos… Además,
publicaron periódicos, ensayos, folletos, que se distribuían en las
ciudades y promovieron las reuniones en salones y cafés para difundir sus
ideasEl Reformismo Ilustrado
Carlos III sin renunciar a su poder y sin quitar los privilegios nobiliarios escogíó
como consejeros a algunos ilustrados ( Aranda, Floridablanca y Campomanes) y
acometíó una serie de reformas carácterísticas del Despotismo Ilustrado.
Pero la ausencia de amplios grupos burgueses en España, el conservadismo de
los medios intelectuales y el peso de la Iglesia dificultaron la expansión de las
ideas de la Ilustración y la consolidaciòn del proceso reformista.
Las reformas de Carlos III fueron:
Decretar honestos todos los oficios
Limitar privilegios de la Mesta y colonizar nuevas tierras
Fomentar libre circulación de mercancías
Permitir el libre comercio con América para todos los puertos españoles
Apoyar la producción de bienes, liberalizando el proceso de fabricación
Establecer aranceles
Imponer autoridad real sobre la Iglesia
Crear escuelas de primaria y reformar universidades
6. JOVELLANOS
XVIII surgíó en España un grupo de pensadores ilustrados preocupados por modernizar
la sociedad y la economía española. Entre ellos destacó Jovellanos. En sus escritos
criticó los privilegios del Antiguo Régimen, fustigó a la nobleza ociosa, se opuso a los
prejuicios de la Iglesia y justificó la necesidad de una reforma agraria.
Sus ideas influyeron en la corte, sobretodo en la época de Carlos III que impulsó el
Despotismo Ilustrado. Jovellanos defendíó que la modernización económica de España debía iniciarse con una
reforma agraria que liberalizase la propiedad de la tierra, propuso:
Suprimir las tierras amortizadas y comunales
Poner en cultivo las tierras comunales y los baldíos
Disolver la Mesta y cercar las fincas
Mejorar los contratos de arrendamientos de los campesinos
Limitar los mayorazgos
Estas medidas tenían que ir acompañadas de una reforma de enseñanza y de
la inversión del Estado
7. LA REPOBLACIÓN OLAVIDE
Dentro de las reformas promovidas por Carlos III para revitalizar Andalucía, se propuso
la colonización de Sierra Morena, el proyecto también pretendía poner fin al
bandolerismo que ponía en peligro las comunicaciones entre Andalucía y la corte.
Con el mismo objetivo se llevó a cabo el proyecto de colonizar las campiñas de
Córdoba y Sevilla donde existía grandes terrenos deshabitados desde la expulsión de los
moriscos Para la repoblación de Sierra Morena se designó al intendente de Andalucía , Pablo de
OLavide. La repoblación se llevó a cabo en gran parte por los colonos alemanes.
7.3 Las revoluciones de 1848:
La oleada revolucionaria de 1848 se inició, al igual que la de 1830, en Francia y
se extendíó a continuación a
gran parte de Europa. Es conocida con el nombre de “primavera de los pueblos”.
Sus causas fueron:
– La crisis económica de Francia.
– La negación de derechos y libertades a importantes sectores de la sociedad
francesa: la monarquía de Luis
Felipe de Orleáns sólo satisfacía los intereses de la alta burguésía, en tanto que
la pequeña burguésía como el proletariado quedaban política y económicamente
desatendidos. La revolución triunfó en Francia, que dejo de ser una monarquía y
se convirtió en una república social; se reconocieron los derechos de los
trabajadores y se impuso el sufragio universal.
(II República)
En el Imperio austriaco, en la Confederación germánica y en los Estados
italianos hubo diversas revoluciones democráticas, pero fueron reprimidas.
Balance de las revoluciones 1848:
Una buena parte de la pequeña burguésía, temerosa de una revolución social,
abandonó su alianza con el proletariado y se uníó a la gran burguésía. A pesar de
ese fracaso, los hechos acontecidos en 1848 supusieron la aparición de los
ideales democráticos (sufragio universal frente al censitario defendido por
liberales) y la
incorporación a la lucha política de la clase trabajadora.
7.4 El nacionalismo y las unificaciones de Italia y Alemania A principios del
Siglo XIX, Italia estaba dividida en distintos Estados y Austria había
incorporado a su Imperio Lombardía y el Véneto. Por su parte, Alemania
también se encontraba disgregada en varios estados, y Prusia y Austria se
enfrentaban por el control de sus territorios.
En 1859, el Piamonte gobernado por Cavour inició un proceso de unificación
para anexionar Lombardía tras enfrentarse a Austria. Al mismo tiempo,
Garibaldi dirigíó un levantamiento popular para acabar con los estados
absolutistas del centro y sur de Italia. En 1861, el primer Parlamento italiano
coronó a Víctor Manuel II de Saboyá como rey de Italia. Más adelante los
austriacos abandonaron el Véneto y se anexionaron los Estados Pontificios.
Unificación de Alemania
Prusia en 1834 potenció una uníón aduanera, Zollverein, que agrupaba gran
parte de los estados alemanes. En 1848, un parlamento reunido en Frankfurt
intentó unificar Alemania, pero acabó en fracaso puesto que el rey de Prusia no
aceptó la corona de Alemania. En 1860, con el ascenso al trono de Prusia de
Guillermo I y el nombramiento de Bismarck como canciller se inició una
política agresiva con los estados vecinos (Austria,Dinamarca y Francia), la
victoria en estos conflictos permitíó unir a todos los estados alemanes, en 1871
se produjo la proclamación del II Reich (Imperio) y de Guillermo como Káiser