18: Explica las tres interpretaciones que tradicionalmente se dan de la escalera como elemento central de la obra
Los tres actos de la obra se desarrollan en el mismo lugar: un «tramo de escalera con dos rellanos». Es en este espacio donde tiene lugar toda la acción; en la escalera se comentan los chismes y se escuchan las discusiones; allí se reflejan los proyectos y los sueños de todos los vecinos. Todos los personajes se sienten ligados a ella. Algunos la odian, porque «encadenados» simbólicamente a esta escalera han ido perdiendo sus sueños y sus esperanzas con el paso de los años; otros, como Paca, 8 la consideran una vieja compañera. De este modo, las tres interpretaciones que tradicionalmente se han dado son las siguientes:
1) La escalera como personaje: es el escenario que hace posible la consideración colectiva de los personajes. Así se ha considerado a la propia escalera uno de los personajes fundamentales de la obra de Buero.
2) La escalera como símbolo del paso del tiempo: la escalera se humaniza hasta el punto de compartir simbólicamente la historia vital de los personajes, envejeciendo junto a ellos.
3) La escalera como símbolo de la inmovilidad:
La escalera es símbolo tanto de la inmovilidad social como de la inmovilidad personal. – Símbolo de la inmovilidad social: La escalera es imagen simbólica de la gran barrera que divide a las personas en una serie de estadios económicos y de oportunidad social, sin la menor concesión en treinta años. – Símbolo de la inmovilidad personal: Por tratarse de un espacio cerrado, la escalera asfixia las ilusiones de los personajes que viven en ella. El ambiente ahoga sus ambiciones personales. Aunque los vecinos pueden salir al espacio exterior –a la calle–, siempre retornan a la escalera.
20: ¿Qué interpretación y sentido se le da a Historia de una escalera?
Buero provoca la angustia y la inquietud en el espectador, al plantear una serie de cuestiones para las que no ofrece las correspondientes soluciones. Es el propio espectador o lector quien debe reflexionar sobre ellas para extraer sus conclusiones. El espectador tiende a identificar en los asuntos representados sus propios hábitos y problemas cotidianos. Todos los días sale de su casa para trabajar, para ir a la compra… Y es posible que sienta las mismas o semejantes inquietudes y sueños. A través de esta representación de la realidad se denuncian algunos males de la sociedad actual: la injusticia, la insolidaridad, la incomprensión… El autor consigue que el espectador contemple lo representado como algo real, cansado de la vida misma, hasta el punto de poder identificarse con la acción situándose en el lugar de los protagonistas y comprometerse con la historia. El público debe reflexionar acerca del modo de evitar o de solucionar los males que los personajes no acertaron a resolver a tiempo. Al final de la representación, Buero parece dar muestras de una muy lejana esperanza en el futuro. Las últimas palabras que se pronuncian renuevan la posibilidad de que el amor y la sinceridad hagan la vida más llevadera
21: . ¿Crees que la obra contiene alguna crítica sociopolítica? Justifica tu respuesta
Aunque no hay referencias a la Guerra Civil, algunos críticos consideran que sus secuelas gravitan en el drama humano que expresa la obra, hasta el punto de que se cree que es un elemento fundamental para entender en todo su sentido la obra, en la que se nos mostraría, desde un punto de vista crítico, una realidad que había estado ignorada y hasta olvidada. La mayoría de los críticos opina que la obra de Buero es un trasunto de la realidad social española de los años cuarenta, y que él fue el primero en reflejar su problemática en una pieza teatral. El inmovilismo social que refleja Historia de una escalera no afectaba solo a la clase media baja del tipo de la que habita la vivienda. España atravesaba una penosa situación, en todos los órdenes, después de una devastadora Guerra Civil. La frustración de los personajes de la obra se extendía a una gran parte de la población española. Es posible que los espectadores que asistieran al estreno de 1949 sintiesen como propias las frustraciones de los personajes, aunque pertenecieran a una clase inferior. Por razones obvias –la censura existente– en la obra de Buero Vallejo no se hace ninguna referencia a la Guerra Civil (1936-1939), que transcurríó en el lapso entre el segundo y el tercer acto. El público de 1949 tenía el hecho muy presente. Solo habían pasado diez años desde su final y conocía bien las causas del fracaso del sindicato y lo que tal fracaso entrañaba. Como conclusión, podemos decir que su intención es retratar de forma crítica la situación social de las clases bajas durante la inmediata posguerra española: el paso del tiempo y el estancamiento de estos personajes, que simbolizan la sociedad española de su época.