La Restauración Borbónica en España (1875-1923)
El Reinado de Alfonso XII (1875-1885)
El 29 de diciembre de 1874, el pronunciamiento de Martínez Campos en Sagunto proclamó rey de España a Alfonso XII, hijo de Isabel II. Este hecho estuvo influenciado por las agitaciones campesinas y obreras, que llevaron a un acuerdo entre grandes propietarios e industriales. Alfonso XII reinó desde 1875 hasta su prematura muerte en 1885.
El régimen de la Restauración se consolidó gracias al apoyo de la burguesía y los grandes terratenientes, quienes, tras la experiencia revolucionaria del Sexenio Democrático, buscaban una fórmula que garantizara la estabilidad política y social.
El Sistema Canovista
El artífice de este sistema fue el político conservador Antonio Cánovas del Castillo, quien inicialmente prefería la vuelta de Alfonso XII por vías legales, sin necesidad de pronunciamientos militares.
Etapas de la Restauración
- Reinado de Alfonso XII: 1875-1885.
- Regencia de María Cristina: 1885-1902.
- Reinado de Alfonso XIII: 1902-1931 (con la Constitución de 1876 suspendida en 1923).
Pilares del Sistema Político
- Constitución de 1876: Un texto flexible y no partidista.
- Monarquía: Con amplios poderes, actuando como moderadora y directora del juego político.
- Bipartidismo y Turno Pacífico: Alternancia en el poder del Partido Liberal y el Partido Conservador.
- Mecanismo Electoral: Basado en la Ley Electoral, el encasillado, el caciquismo y el pucherazo.
La Constitución de 1876
La Constitución de 1876, de carácter liberal doctrinario, fue concebida como un punto intermedio entre las constituciones de 1845 y 1869. Su flexibilidad permitió la viabilidad del sistema canovista durante un extenso periodo (1876-1923), convirtiéndose en uno de sus pilares fundamentales.
Características Principales
- Soberanía compartida: Entre el Rey y las Cortes.
- La Corona como eje central: Con poder real y efectivo, capacidad de veto legislativo y competencias legislativas junto con el Parlamento.
- Poder Ejecutivo: Ejercido por la Corona a través de los ministros, nombrados y cesados por el rey, quien también elegía al Presidente del Gobierno.
- Poder Legislativo: Correspondiente a las Cortes y al Rey. La Corona podía vetar leyes y disolver las Cámaras. Sistema bicameral compuesto por el Congreso y el Senado.
- Poder Judicial: Independiente.
El Bipartidismo y el Turno Pacífico
El sistema se basaba en la existencia de dos grandes partidos: el Partido Conservador y el Partido Liberal, conocidos como los partidos dinásticos. Ambos se alternaban en el poder de forma regular, dando lugar al turnismo.
Partido Conservador
Liderado por Antonio Cánovas del Castillo, aglutinaba a los sectores más conservadores de la sociedad: aristocracia, alta burguesía y altos funcionarios civiles y militares.
Partido Liberal
Liderado por Práxedes Mateo Sagasta, integraba a la antigua izquierda liberal progresista.
Partidos Antidinásticos
Fuera del sistema quedaban los partidos antidinásticos: los carlistas o tradicionalistas a la extrema derecha, y a la izquierda, la oposición republicana, los nacionalismos, intelectuales, el anarquismo y el socialismo.
El Fraude Electoral y el Caciquismo
El turno pacífico era un fraude político destinado a mantener fuera del poder a las fuerzas de izquierda, el movimiento obrero, los regionalismos y los nacionalismos. No reflejaba la voluntad popular, sino que era acordado previamente por los dirigentes de los partidos.
Mecanismo del Fraude
- El Rey nombraba un nuevo Jefe de Gobierno y le otorgaba el decreto de disolución de Cortes.
- El nuevo gobierno convocaba elecciones adulteradas, fabricando los resultados mediante el encasillado, una asignación previa de escaños que dejaba un número predeterminado a la oposición.
El fraude electoral se sustentaba en el caciquismo, especialmente en un país agrario y atrasado como la España de la época. Los caciques, personajes ricos e influyentes en la España rural (terratenientes, prestamistas, notarios, comerciantes…), eran los encargados de ejecutar los resultados electorales acordados por las élites.
Los caciques seguían las instrucciones del Gobernador Civil de cada provincia, quien a su vez recibía órdenes del Ministro de Gobernación, siguiendo el encasillado pactado.
Métodos de los Caciques
Los métodos utilizados por los caciques eran variados: violencia, amenazas, intercambio de votos por favores (rebajas de impuestos, sorteo de quintos, condonación de préstamos, agilización de trámites burocráticos…) o, simplemente, trampas electorales, como el conocido pucherazo.