El Cambio de Mentalidad en el Segundo Franquismo (1959-1975)
Introducción
Este texto analiza un fragmento del capítulo de Walter L. Bernecker, historiador experto en la época franquista y en la transición española, titulado “El cambio de mentalidad en el segundo franquismo”, que forma parte del libro coordinado por Nigel Townson, “España en cambio: el segundo franquismo”. Este fragmento, clasificado como una fuente secundaria, narrativa, de carácter social y económico, y dirigido a un público interesado en el estudio de este período, se centra en la segunda etapa de la Dictadura de Franco (1959-1975), particularmente en los años del “desarrollismo”. Este período, posterior a la autarquía e iniciado con la liberalización económica de 1959 liderada por los tecnócratas del Opus Dei, representa una etapa de transformaciones crucial para comprender la transición de la dictadura a la democracia.
El Desarrollismo: Un Cambio de Mentalidad
La idea principal del texto es que el desarrollismo no fue solo un fenómeno económico, sino también un cambio de mentalidad. Bernecker afirma: “la disposición mental a cambiar la propia vida para mejorar las condiciones materiales forma parte, pues, del desarrollismo de los sesenta; éste fue, por lo tanto, un hecho económico y, al mismo tiempo, una actitud mental”.
Argumentos que Sustentan el Cambio de Mentalidad
- Disposición a la Emigración: La emigración, tanto del campo a la ciudad como de España al extranjero, refleja una actitud de no resignación ante la adversidad económica. Bernecker puntualiza que “este cambio de mentalidad estaba antes del auge económico o paralelamente a él”. En esta etapa, aproximadamente tres millones de españoles emigraron del mundo rural al urbano, y un millón de España a países europeos como Francia, Alemania y Suiza.
- Mejora del Nivel Educativo: El “boom estudiantil” de esta época, evidenciado por el descenso del analfabetismo (del 19% en 1940 al 9% en 1970), el aumento del número de alumnos de enseñanza media (siete veces entre 1960 y 1975) y el acceso a la universidad pública, demuestra la apuesta de las familias por un futuro mejor a través de la educación.
Contexto del Desarrollismo
El texto se desarrolla en la década de 1960, conocida como la etapa del desarrollismo o el “milagro español”, según el régimen franquista. Este desarrollo económico se explica por:
- La liberalización de la economía.
- La emigración interior y exterior (aportación de capital).
- La expansión industrial (bienes de consumo).
- El desarrollo del turismo.
El Plan de Estabilización de 1959 marcó el inicio de este auge, sustituyendo la política intervencionista y autárquica por una más liberal y moderna. Los Planes de Desarrollo Económico y Social buscaban resolver problemas estructurales de la empresa española, crear polos de desarrollo y evitar desequilibrios territoriales. Como resultado, se redujo la brecha entre España y los países europeos más desarrollados, las clases medias crecieron, y los españoles adoptaron costumbres más libres y necesidades políticas más europeas.
Problemas del Desarrollismo
A pesar de los avances, el desarrollismo también generó problemas:
- Aumento de los desequilibrios territoriales.
- Abandono del campo y despoblamiento del interior.
- Crecimiento desordenado de las ciudades.
- Desastres ecológicos (industria y turismo).
- Deficiencias en las prestaciones sociales y servicios estatales (ej. déficit de infraestructuras educativas).
Cambios Sociales
La estructura social se volvió más dinámica. El baby boom de los sesenta, la transición de una sociedad agraria a una urbana, el aumento de las clases medias, la incorporación de la mujer al mercado laboral, la minifalda, la televisión, los espectáculos de masa y las vacaciones, modernizaron, abrieron y flexibilizaron la sociedad en poco más de una década.
Conclusión
Comparando la sociedad española del inicio del franquismo con la de sus momentos finales, se observan cambios económicos y sociales profundos. Sin embargo, políticamente, a pesar de ciertos intentos de apertura, España continuó siendo una dictadura hasta la muerte de Franco.