Transición Española a la Democracia: Etapas y Protagonistas


De la Dictadura a la Democracia: La Transición Española

En noviembre de 1975, tras la muerte de Franco, Juan Carlos de Borbón fue proclamado rey. Su discurso incluía palabras de apertura y reconciliación que presagiaban profundos cambios políticos. Sin embargo, el primer gobierno de su monarquía, presidido por Carlos Arias Navarro, siguió las pautas de la dictadura de Franco.

Los principales partidos democráticos de izquierda reclamaban la ruptura con el régimen franquista; exigían la libertad para todos los presos políticos; solicitaban libertades políticas y sindicales; y demandaban elecciones libres. El lema que resumía sus aspiraciones democráticas, coreado en las manifestaciones, era “Libertad, amnistía y Estatuto de Autonomía”.

La mayoría de las organizaciones de izquierda se habían agrupado en la Junta Democrática (impulsada por el PCE y liderada por Santiago Carrillo) y la Plataforma de Convergencia Democrática (impulsada por el PSOE y dirigida por Felipe González). Tras la muerte de Franco, ambas se unieron en un solo organismo (“Platajunta”).

La Ley de Reforma Política

En julio de 1976, el Presidente del Gobierno, Arias Navarro, presentó su dimisión. El Rey nombró nuevo Presidente a Adolfo Suárez. El punto principal del nuevo gobierno fue la aprobación de la Ley de Reforma Política, que preveía la celebración de elecciones con sufragio universal. Esta ley puede considerarse la frontera entre el régimen franquista y la nueva etapa que permitiría el establecimiento de un sistema plenamente democrático en España.

La Desestabilización de la Transición

Los primeros meses de 1977 España vivió una difícil situación que puso en peligro la transición a la democracia. Así, grupos extremistas iniciaron una campaña de desestabilización del nuevo régimen: la extrema derecha asesinó en enero a cinco abogados laboralistas vinculados al PCE y al sindicato Comisiones Obreras (la Matanza de Atocha). En la extrema izquierda, tanto ETA (grupo terrorista independentista vasco) como los GRAPO (Grupos Revolucionarios Antifascistas Primero de Octubre) secuestraron a militares y asesinaron a miembros de la policía y de las instituciones del Estado.

Legalización de Partidos y Sindicatos

Suárez legalizó los sindicatos UGT y Comisiones Obreras. Quedaba un obstáculo para que la oposición democrática representada por la Platajunta aceptara el proceso de reforma política: la legalización del PCE, liderado por Santiago Carrillo. Finalmente, Adolfo Suárez declaró legal al PCE. Los comunistas aceptaron la institución monárquica y la bandera bicolor. Además, se publicó una ley por la que se liberó a la mayoría de los presos políticos y permitió la vuelta a España de los exiliados.

Las Primeras Elecciones Libres

En junio de 1977 se celebraron en España las primeras elecciones libres desde 1936. Se presentaron dos coaliciones políticas importantes:

  • UCD (Unión de Centro Democrático), creada por Suárez.
  • AP (Alianza Popular), fundada por Manuel Fraga Iribarne, que incorporaba a personalidades procedentes del franquismo.

Y los partidos históricos:

  • PSOE (Partido Socialista Obrero Español).
  • PCE (Partido Comunista de España).

La UCD ganó, seguida del PSOE. Los partidos nacionalistas obtuvieron importantes resultados: en el País Vasco, el PNV (Partido Nacionalista Vasco) fue el más votado.

Los Pactos de la Moncloa y la Constitución de 1978

En estos años, para mejorar la delicada situación económica española era necesario reducir la conflictividad laboral y detener la inflación. Para ello, las organizaciones sindicales y patronales y el Gobierno firman en octubre de 1977 los Pactos de la Moncloa.

El siguiente paso importante en este proceso de transición democrática fue la redacción de una Constitución. Para ello se eligió a siete diputados (los «padres de la constitución«) que elaboraron un primer texto como proyecto constitucional, que fue aprobado por los españoles en referéndum el 6 de diciembre de 1978. La constitución fue fruto del consenso: la izquierda renunciaba al carácter republicano del Estado; la derecha admitía el pleno juego democrático y la existencia de Autonomías; los nacionalistas catalanes aceptaban el término “nación española” a cambio de que se reconociera el de “nacionalidad” para Cataluña. El PNV no aceptó la constitución porque afirmaba la unidad indisoluble de la nación española, aunque después la acató como hecho democrático.

Principios de la Constitución

En la Constitución, el Estado se define como social y democrático, organizado en una monarquía parlamentaria. El Rey ostenta el mando supremo de las Fuerzas Armadas y desempeña básicamente funciones de representación. En este nuevo Estado tiene cabida el autogobierno de las nacionalidades y las regiones. El Estado se declara laico y se reconocen derechos civiles a los ciudadanos: la libertad de asociación, de reunión y de expresión; el derecho al divorcio y la supresión de la pena de muerte. Las Cortes se componen de dos cámaras (Congreso de los Diputados y Senado) y se establece la división de poderes (el legislativo reside en las Cortes, el ejecutivo lo ejerce el Gobierno y el judicial está representado en los tribunales). Este nuevo Estado se declara como social, lo que supone el reconocimiento a los ciudadanos de derechos como la educación; igualdad y no discriminación por razones de sexo, raza o religión; derecho a la salud y la sanidad; a una vivienda digna y adecuada; etc.

Elecciones de 1979 y el Golpe de Estado de 1981

Una vez aprobada la Constitución, se convocan nuevas elecciones generales en 1979, que vuelve a ganar la UCD de Adolfo Suárez. En esta época se aprobaron los Estatutos de Autonomía del País Vasco, Cataluña y de Galicia. Por otra parte, 1980 fue el año de mayor número de víctimas del terrorismo de ETA (casi 100).

Adolfo Suárez dimitió en enero de 1981 y el 23 de febrero, día que se votaba la investidura del nuevo presidente del gobierno (Leopoldo Calvo Sotelo), un grupo de militares y miembros de la Guardia Civil al mando del teniente coronel Antonio Tejero asaltó el Congreso de los Diputados. En el final del golpe de Estado fue decisiva la intervención del rey Juan Carlos I a través de la televisión. El resultado fue la rendición de los golpistas y la vuelta a la normalidad. La democracia, que había estado en peligro, se había salvado.

Las Elecciones de 1982 y el Comienzo de los Gobiernos Socialistas

En 1982 se convocaron nuevas elecciones generales, que ganó el PSOE. Estos resultados cambiaron completamente el mapa político español y significaron el comienzo de un largo periodo de gobiernos socialistas.

Conclusión

En conclusión, uno de los elementos decisivos de la transición fue la actitud mayoritaria de todo el pueblo español, en el ejercicio pacífico de las libertades y las actitudes democráticas.

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