Contexto histórico
Desde el punto de vista histórico, el primer tercio del siglo XX se caracterizó por grandes tensiones y enfrentamientos entre las potencias europeas. Por su parte, la Primera Guerra Mundial entre 1914 y 1918 y la revolución soviética en octubre de 1917 fomentaron las esperanzas en un régimen económico diferente para el proletariado. En España, el siglo XX había dado comienzo con el fin del régimen de la Restauración y el inicio del reinado de Alfonso XIII. En lo social, el clima era de descontento, con revueltas como la Semana trágica de Barcelona (1909) o la huelga general revolucionaria (1917), lo que desembocó en el golpe de estado que instauró la dictadura de Primo de Rivera (1923-1930). A este período lesucedió el éxito de las fuerzas republicanas en las elecciones de 1931 y el establecimiento de la Segunda República. Sin embargo, algunas políticas llevadas a cabo por el gobierno republicano sembraron el descontento en los sectores más conservadores de la sociedad, dando lugar al alzamiento militar que desencadenó la Guerra Civil (1931-1936).
Definición vanguardias y breve caracterización de los principales movimientos de vanguardia europeos: Futurismo, Cubismo, Dadaísmo y Surrealismo
El período comprendido entre 1914 y 1925 engloba a todos aquellos autores posteriores a la Generación del 98 que se distancian de estos al querer renovar por completo la literatura. Esta nueva literatura supone una ruptura total con el pasado (con la vulgaridad del realismo, los excesos modernistas, el sentimentalismo romántico, o la subjetividad del 98). Giran a un tono más intelectual y menos subjetivo, propugnan un arte puro alejado de sentimientos personales, y se concibe una nueva literatura desde el punto de vista más elitista pues está realizado y pensado para minorías. En el ámbito literario era necesaria una profunda renovación. De esta voluntad de ruptura con lo anterior nacerán las literaturas de vanguardia, término que fue acuñado durante la Guerra Mundial para designar a una serie de inquietudes artísticas que se situaban en la avanzadilla cultural del momento. El vanguardismo significó uno de los momentos de mayor unidad entre los artistas europeos que proyectaban una nueva cultura y, por tanto, una nueva sociedad. Pero el vanguardismo no fue una tendencia unitaria sino que estuvo formado por una gran cantidad de movimientos, cada uno de ellos con peculiaridades, intenciones y técnicas propias. Lo que tuvieron en común fue el deseo de renovar radicalmente el arte rompiendo con la estética anterior, sobre todo con la realista.
El cubismo
Su principal representante, Guillaume Apollinaire, incorporó la superposición de imágenes, sin desarrollo argumental, la técnica del collage y la creación de poemas que forman un dibujo. El cubismo literario se expresa con poesías cuya estructura forma figuras o imágenes que ejemplifican el tema, la rima es opcional y no tienen una métrica específica ni se organizan en versos.
El futurismo
El manifiesto futurista, escrito por Marinetti, propugna entre otras cosas: el rechazo del pasado, la atracción por las máquinas de reciente creación, el antisentimentalismo y la apología de la violencia. Pretende conseguir una nueva expresividad a través de la destrucción de la sintaxis, la omisión de los signos de puntuación y la eliminación de las imágenes convencionales.
El surrealismo
Su principal impulsor fue André Breton. En el primer manifiesto expuso los principios de la tendencia que consistía en incorporar a la creación el funcionamiento real del pensamiento, el mundo del subconsciente, que se expresa en los sueños. Mediante la escritura automática, el poeta surrealista debe escribir sin premeditación en un estado de oscurecimiento mental parecido al de los momentos previos al sueño o al de la hipnosis. Las palabras se deben relacionar por azar, sin intentar construir nada, liberando el inconsciente.
El expresionismo
Para el Expresionismo, la literatura debe ser un reflejo de las tensiones espirituales internas y un arma de combate contra la sociedad. De ahí el tono pesimista, inquietante y rebelde de sus escritos.
El dadaísmo
Fue un movimiento fundado por Tristan Tzara. En su primer manifiesto expone su carácter provocador y nihilista: negación total del arte y la cultura anterior, abolición de la lógica y de la memoria. Reivindican la libertad, la independencia, el humor, la irracionalidad y el absurdo.
Movimientos de vanguardia hispánicos: Creacionismo y Ultraísmo
En España podemos distinguir, en general, cuatro etapas en el desarrollo del vanguardismo: 1. 1908-1918: en este período se dan las primeras manifestaciones de las vanguardias. Destaca la figura de Ramón Gómez de la Serna, quien publica su ensayo-manifiesto El concepto de la nueva literatura. 2. 1918-1925: se trata del período de plenitud de las vanguardias. Nace el Ultraísmo, con figuras como Guillermo de la Torre, y el Creacionismo, con Vicente Huidobro. 3. 1925-1930: en este período la tendencia vanguardista predominante es el Surrealismo, que supone una vuelta a las preocupaciones humanas y, por tanto, el principio del fin de la vanguardia. 4. 1930-1936: los movimientos de vanguardia van desapareciendo. La literatura se politiza. El arte ya no se quiere minoritario sino dirigido a la inmensa mayoría y con un claro espíritu utilitario. En España destacaron las siguientes vanguardias: El Ultraísmo: los ultraístas declararon su afán de renovación y su apertura a todas las tendencias, por lo que en él se incorporaron elementos de diversos -ismos: cubismo, futurismo, dadaísmo. Los ultraístas desprecian la expresión de sentimientos y anécdotas personales (desaparece el yo autobiográfico), buscan hacer un arte hermético (cerrado, difícil de entender). Rechazaron lo sentimental y sus obras se caracterizaron por la importancia de la metáfora, los neologismos, la supresión de la puntuación, la disposición tipográfica de los versos y los caligramas. Destaca el poeta Guillermo de la Torre con Helices (1923). El Creacionismo: el principal difusor de esta tendencia en España fue el chileno Vicente Huidobro. Sus características eran: rechazo a la imitación de la realidad, rechazo de la narración, de la descripción y de lo anecdótico. El poeta creacionista inventa nuevas imágenes y asociaciones ilógicas o desconcertantes. En España destacan Juan Larrea con Versión celeste y Gerardo Diego con Manual de espumas. El Surrealismo: este movimiento influyó especialmente en algunos poetas del 27. Los temas propios del surrealismo que tratan los poetas españoles son la pasión por la libertad y el azar, la importancia del mundo interior y de las emociones, los sueños y lo instintivo, el gusto por lo misterioso, lo insólito y lo maravilloso, y el amor. Entre los recursos expresivos destacan la falta de coherencia textual, el uso de aliteraciones, repeticiones, juegos de palabras y el verso libre.
Ramón Gómez de la Serna
Junto a estas vanguardias de ámbito hispánico hay que incluir la obra de Ramón Gómez de la Serna, creador de la greguería e introductor de las vanguardias en España. Su amplia obra, llena de originalidad, rompe con todos los convencionalismos presentando una forma distinta de crear y entender la literatura. Su visión fragmentaria se caracteriza por escoger rasgos de la realidad para después unificarla creando así un nuevo concepto marcado por su visión particular. Ofrece un enfoque subjetivo de todas las cosas que nos rodean, utilizando la cosificación y de la humanización, del mismo modo que cosifica a las personas, atribuyéndolas rasgos propios de los objetos. La greguería, es una sentencia breve e ingeniosa, en la que Gómez de la Serna da otra visión de la realidad cotidiana, reinterpretándola de forma humorística y subjetiva. Una mezcla de metáfora y humor como él mismo definió. El autor busca la sonrisa, la sorpresa y la complicidad del lector en sus obras. Intenta buscar la reflexión del propio lector utilizando distintas técnicas literarias como la asociación de dos imágenes, como por ejemplo «La luna es el ojo de buey del barco de la noche»; la contraposición paradójica, como por ejemplo «El fotógrafo nos coloca en la postura más difícil con la pretensión de que salgamos más naturales»; la inversión de la relación lógica como en «El polvo está lleno de viejos y olvidados estornudos», o la asociación libre de los conceptos.
Comentario de texto
El comentario de texto tiene que tener: Tema, Resumen, Modalidad y tipologia, Localización del texto, elementos de la comunicación, Funciones del lenguje, Estructura y Estilo.
Tema: Un titulo del poema
Resumen: Dar a entender el texto, resumir el contenido
Modalidad y tipologia:
Localizacón del texto: De donde viene el poema. sacarlo de la teoria
Elementos de la comunicación: Emisor, receptor y mensaje que quiere dar el texto.
Funcines del lenguaje: referencial, emotiva, apelativa, fática, metalingüística, expresiva y poética.
Estrucura: AB, AB, AB, CD, CD, CD
Estilo:
Texto Argumentativo:
el primer parrafo Introducción del tema
el segundo parrafo Argumentos de lo que defiendes (en primer lugar)
el tercer parrafo contraargumentos de lo que estas defendiendo (cierto es, por otra parte)
el cuarto parrafo conclusion diciendo algo parecido a los argumentos (en definitiva)